Jelena
*
Ser la asistente personal de Adrien no era tan complicado como había imaginado.
Me había adaptado rápidamente y me había acostumbrado a estar de un lado a otro junto a Adrien.
En ocasiones le acompañaba a ver las nuevas propiedades que estaba por adquirir. Todo ese ajetreo de ir y venir me había servido para distraerme sobre lo sucedido hace meses con mi hermana. Necesitaba arreglar las cosas, quería llamarle pero decidí esperar a que ella llamara, darle más tiempo pero no lo hizo, tal vez nunca lo haría y estaba en su derecho, después de todo yo era la culpable, construí una nueva vida para mí pero destruí la vida de mi hermana y la de Andy.Ansiaba que este día terminara solo quería llegar a casa para salir a algún club y divertirme.
Olvidar todo y a todos.
- Por hoy fue todo, Celine. - la voz de Adrien me saco de mis pensamientos. - puedes ir a casa, mi chofer que te llevara.
- Gracias. Pero no es necesario.
- Sí que lo es, es tarde y no me gustaría que vayas sola puede ser peligroso.
- No se preocupe señor Saveliev, se cuidarme sola.
- Señorita Novikova. Es una orden. - se cruzó de brazos.
- ¿Ya le dije que a veces suelo desobedecer?
- No. Pero soy su jefe y una orden es una orden.
- Bien, será como usted ordene señor.
- Perfecto. En un momento vienen por ti.
- Gracias, es muy amable.
- Es lo menos que puedo hacer, y soy yo quien debería darte las gracias por dedicarme tu tiempo. No podría estar tranquilo sabiendo que te vas sola y que algo podría pasarte. - confeso con preocupación.
- Pronto dejaras de preocuparte.
- ¿Por qué?
- Compraré un auto - respondí con una sonrisa.
- Bien, pero mientras lo haces, que mi chofer te lleve.
- Ok. - sonreí.
- Señor, el auto está listo. - regrese a ver al hombre que estaba parado en medio del pasillo.
- Que pase linda noche señor Saveliev. - me despedí de él y camine hasta el chofer que después me siguió no sin antes hacer una pequeña reverencia a Adrien.
- Linda noche para usted también señorita Novikova.
El hombre condujo después de darle mi dirección, no tardamos mucho llegar pues solo estaba a veinte minutos de la empresa.
Cuando llegamos me apresure a bajar antes de que el hombre lo hiciera y me abriese la puerta.
Estaba harta de eso.
- Señorita permítame ser yo quien le abra la puerta. -replico.
- No te preocupes puedo hacerlo yo sola. - sonreí.
- si así lo desea.
- Gracias. - agregue dudosa. - Linda noche... - y espere a que dijera su nombre.
- Fabien...
- Linda noche Fabien.
- Linda noche para usted también señorita.
- Gracias. - dije y espere a que se fuera, pero este no lo hizo.
- Lo siento el señor Saveliev me pidió que no me marchara hasta que no la viese entrar a casa.
- Oh! Ya veo. Está bien, entonces entraré para que puedas irte a descansar. - Fabien me sonrió.
Continúe con mi camino, saque las llaves de mi bolso y abrí la puerta y me apresure a cambiarme y ponerme algo adecuado para el lugar al que iría a divertirme.
****
Estaba muy concentrado firmando aquellos papeles para la importación de los vinos, cuando mi celular comenzó a vibrar, la pantalla se encendió y dejo ver el nombre de Henry en la pantalla. Solté el bolígrafo y respondí.
- Señor. la señorita Novikova ha llegado a casa.
- ¿sola o acompañada?
- sola. El chofer del señor Saveliev la ha traído a casa.
- Espera unos minutos, si ves algo raro me llamas.
- Como ordene señor. - y colgó.
Mi interés por ella había crecido aún más después de aquella cena, estaba seguro de que me deseaba tanto como yo a ella. No podía sacármela de la cabeza, siempre estaba pensando en ella.
Sabía que seguirla de esa manera no la conquistaría pero quería asegurarme de que ella estuviese a salvo, era mi manera de protegerla de su padre, del cual, aun no sabía quién era y por qué quería hacerle daño, pero esperaba pronto saberlo para dejarle muy en claro que a mi mujer nadie... nadie la tocaba.
Una segunda llamada de Henry interrumpió mis deberes.
- ¡Señor!, la señorita ha salido de casa.
- ¿A esta hora? - mire el reloj en mi muñeca.- Creo que ella se dirige a algún centro nocturno. - respondió.
- Síguela. y cuando llegues al lugar me mandas la ubicación.
- Como ordene señor.
- Henry...
- ¿Sí, señor?
- se su sombra hasta que llegue.
Había terminado de firmar aquellos documentos y me apresure a salir de la oficina después de que Henry me mandara el mensaje con la ubicación.
***Después de veinte minutos estaba lista, había elegido un vestido de terciopelo, color rojo de tirantes que me llegaba a la mitad del muslo, me puse unos tacones color negro con cintilla en el tobillo, amarre mi cabello en una cola alta y aplique un poco de labial del mismo color que el vestido. Tome mi bolso y salí de casa cuando el uber había llegado, le salude y tan pronto cerré la puerta se dirigió al centro nocturno que se encontraba a tan solo unos minutos de mi hogar.
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¿Arrodillarse o Sangrar? 🖤 - Donghae - Libro 1
Teen FictionDecidí huir de aquella vida, de aquel destino marcado por la sangre dejando atrás a las personas que más amaba solo para ir en busca de mi propia felicidad. Pero no importaba que tanto corriera, fuese donde fuese, ese destino me perseguiría y me arr...