El pilar del agua llevaba un buen rato observándola mientras dormía y como sus cabellos revoloteaban por su cara de forma divertida. Agarró uno de los mechones y los coloco detrás de su oreja. Le gustaría que el momento fuera eterno, pero sabía que pronto acabaría ya que Shinobu, comenzó abrir de apoco sus ojos violetas.
–Hola –dijo adormilada, sin embargó le sonrió volviendo a cerrar los ojos.
–Hola... ¿Como dormiste? –sonrió nervioso, le costaba mirarla y procesar que de verdad estaba a su lado, como antes de que pasará todo.
Ella volvió abrir los ojos y lo miró por unos segundos antes de responder: –Bien, gracias –dijo aún aletargada–, ¿Cómo dormiste?
–No muy bien bromeo- roncaste toda la noche.
Levanto la cabeza y lo miró sorprendida, siendo consciente de la situación en la que se encontraban, no pudo evitar que los colores se le subiera a la cara -No mientas, ¡qué dices! –Se defendió–, ¡Tamioka-san yo no ronco! –aseveró.
No pudo aguantar la cara de indignación de la pilar insecto, terminó cediendo a ella y acarició su cabeza, revolviendo sus cabellos más de los que estaban.
-Me gusta cuándo pones esa cara –le dijo de forma coqueta.
-Eres imposible -alegó tratando de sonar molesta, para ocultar lo avergonzada que se sentía. Apenas pudo se levantó con una velocidad impresionante del futón, agarró sus cosas y se marchó prácticamente corriendo del lugar. Por su parte Giyu, sonrió satisfecho, esto recién comenzaba, pensó divertido.
***
El ojiazul apenas se alistó, fue a ver a su maestro, seguramente el hombre quería hablar con él. Se encontraba en la sala principal tomando té, por suerte no había rastro de los demás, sería más fácil hablar de ese modo. Tomó asiento enfrente de él.
– Urokodaki-sama, buenos días– saludo cortes– ¿cómo durmió? –preguntó.
El hombre levanto la vista y lo miró asintiendo– He dormido bien,Tamioka-kun, gracias por preguntar–. El pelinegro asintió, mientras se servía un poco de té.
–Tamoka, de verdad Shinobu-chan, se encuentra bien –le dijo de forma directa, mientras lo miraba los ojos, con seriedad, por un momento se quedó en blanco, la mirada penetrante del anciano era la forma que tenía para sacarle siempre la verdad.
–Por qué piensas esos, te dije que se encuentra bien –atinó a responder haciéndose el desentendido.
–Recuerda siempre esto muchacho, llevo una vida más que ti sobre el cuerpo– el asintió como un niño pequeño–. Y segundo no me reconoció cuando no encontramos y a pesar que lo pudo disimular muy bien, su expresión era el de una persona que hablaba con un extraño –le explicó con tranquilidad, pese a la seriedad de su rostro.
–Solo ha estado bajo mucho estrés –le recordó – ya sabe después de lo que paso.
–Lo sé, y lamento mucho por todo lo que ha pasado Shinobu. Y las reacciones que ha tenido la glicina sobre su cuerpo, pero lo importante ahora es que está sana y libre de cualquier peligro. ¿Verdad?
Asintió, estaba de acuerdo con su maestro el verla recuperarse fue duró, todavía le costaba creer que estuviera a su lado, pese a todas las circunstancias. De verdad estaba agradecido.
–Sí –acepto–. Lo importante es que ahora se encuentra bien, solo necesita descansar un poco, ya sabes cómo es, apenas yo la puedo sacar de aquí.
–Supongo que puedes que tenga sentido –dijo pensativo–, pero sigo sintiendo que hay algo más, sin embargo, no voy a hurgar en tu vida Giyu, solo quiero que sepa que estoy aquí para apoyarte y de verdad deseo que tengas un vida larga y feliz con las personas que amas. ¿Lo entiendes verdad?
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Aquí estoy, Shinobu
FanfictionNadie esperó que ellos terminará juntos y tuvieran la vida que siempre desearon. Sin embargo, por culpa de un accidente la vida que había logrado hasta ahora se vería amenazada.