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Narra Monica.

Desperté a media noche con el llanto de Vanesa resonando en la habitación.

Seguí dormida de espaldas a mi entre sollozos y palabras sueltas, me abrace a su cuerpo y empecé a hablarle al oído intentado despertarle y zarandeado su cuerpo con cuidado, se terminó de despertar en un grito nervioso, abrió sus ojos con fuerza recorriendo el luegar con su mirada aún nerviosa y secando las lágrimas que corrían por sus mejillas.

- ya está cariño fue un sueño - le dije mientras me abrazaba a su espalda.

- fue horrible moni - se aferró a mi cuerpo hundiéndose en mi cuello sus manos temblaban mientras las mías las sostenían.

- ya esta, ya paso - le decía dejándonos caer nuevamente en la cama.

- mis hermanos - dijo aún con la voz rota.

- están bien vane están en Málaga ¿si? Mañana les llamamos - le dije y ella asintió volviendo a mi cuello escondiéndose en este.

Dejaba pequeñas caricias en las palmas de sus manos dibujado círculos en estas que seguían temblando.

Vanesa solía tener una pesadilla constante, sus abuelos habían muerto cuando era muy pequeña y solía soñar que ella estaba con ellos cuando esto pasó y no podía ayudar a nadie aunque fuera la única que estaba bien,solia despertar a media noche tal como esta llorando fuerte y temblando.

Y allí entraba yo, me despertaba con su llanto, las primeras veces me asuste aún más que ella, terminé llorando, sin poder dormir en lo que sobraba de noche, luego al pasar el tiempo me acostumbre de alguna manera a saber que estaba bien y era solo un sueño, aun así me asustaba pero intentaba trasmitirle toda la paz que pudiera tener en ese momento, esperaba a que se durmiera y ya si acaso salía de la cama a tomar aire, dejar correr alguna lagrima y intentar  convencerme de que todo estaba bien antes de dormir.

A la mañana no recordaba nada o al menos no me decia nada y yo simulaba que nada había pasado aunque estaba más con ella dándole mimos cada que podía, tratando de no dejar hueco para alguna pesadilla aunque esto no dependiera de mi.

A la mañana siguiente desperté con saltos en la cama y gritos de una niña no tan pequeña que quería abrir los regalos de debajo del árbol.

- vane duerme - le dije aun soñolienta.

- moni regalos - dijo sentándose sobre mis piernas.

- quita estas gorda - le dije y ella se hizo la ofendida.

- estoy muy guapa, levanta que me como tus chocolates - dijo a la vez que salía de la cama me dio un último vistazo y salió corriendo entre saltitos, me levante mareandome en el acto y corrí tras ella nadie se metía con mis bombones.

- quita quita - de dije tomando la caja de bombones que tenia entre manos.

- loo que hacen los chocolates - dijo riendo.

- son míos gracias, no se comparten - dije lo último señalandole

Camarón ya había tomado su regalo y Vanesa le ayudaba a abrirlo, premios de jamón, juguetes chillones y una chupa de lluvia que era una cosa super mona.

- dame - dijo a la vez que intentaba robarme el chocolate que tenía en la mano apunto de comerme.

- quita - di un leve golpe en su mano y ella la aparto con una queja de por medio

- me das y te doy un regalo - y me gano le entregue el bombón y ella tomo uno de los regalos entregandomelo.

- a ver - rasgue el papel dejándome ver un reloj le agradecí dejando un beso casto en sus labios y la vi abrir el suyo que era igual al mío

- un detallito - reí y le abrace antes de entregarle mi regalo.

- pa' ti guapa - ella lo abrió ansiosa sonriendo al ver el contenido de esta .

-¡que chula! A la gira - dijo y yo reí fuerte abrazándome a ella y besando sus labios.

- a la gira de mi artista - le dije a la vez que le hacía dar vueltas.

- me la pruebo - dijo a la vez que se la colocaba sin esperar respuesta.

- que bonita - dije y ella seguía girando y moviendo los flecos de su chaqueta nueva.

- maravilla pura - paro de girar y se apoyo en mi - ay que me mareo.

Reímos, dejamos todo de lado llendo a la cocina y preparando la comida entre turnos mientras la otra se duchaba terminado las dos listas para salir a caminar con Camarón comimos los 3 y salimos.

En Elche solíamos ser más libres nos dabamso pequeños permisos para robarnos besos a mitad de la calle o de tomarnos de la mano mientras caminabamos, nos sentamos en un banco mientas camarón corria y a ratos corríamos tras el jugando con su pelota nueva.

Al volver a casa Vanesa llevaba a camarón y una chica se nos acercó.

- hola disculpa ¿eres Vanesa m
Martin? - le pregunto la chica tímidamente y yo sonreí tome la correa y me adelante.

- si soy yo un momento Moni espérame que quiero ir a lo de Maria quede con Alex - escuche a mis espaldas y me detuve girandome y viendo que ya estaba centrada nuevamente en la chica que ya parecía estar más cómoda.

Me quedé apoyada en la pared esperando hasta que volvió a acercarse a mi caminando dando vueltas y moviendo sus caderas en un vaivén llegó a mi tomando mi cintura para luego robarme a camarón.

Llegamos a casa de mis padres y estaban jugando todos en el salón

Promesas De Abril Donde viven las historias. Descúbrelo ahora