Entre nubes y el sol

Al parecer me equivoqué - C6

Después de organizar absolutamente todo lo que necesitaríamos en este viaje, partimos hacía la aldea en la que se encontraba el caso. Según lo que informó mi hermano que literalmente era casi nada, estábamos en duda de si solamente habían desaparecido las novias o había ocurrido algo parecido con los novios, pero esto tendríamos que averiguarlo cuando llegáramos a la aldea que se situaba en las fronteras de Gusu y si necesitábamos ayuda podíamos acudir a Qishan ya que el lugar a donde nos dirigíamos no lo ocupaba ninguna secta y estaba relativamente cerca de Qishan.

A pesar de que esto no me daba buena espina y sinceramente espero no tener que ir a pedir ayuda al padre de Ruohan, según algunos rumores que circulaban recientemente el líder estaba cada vez más trastornado intentando buscar una reliquia que pueda aumentar su vida, pero una vez intenté preguntarle esto a Ruohan pero lo único que me dijo es que si estaba buscando una pieza de cinco y que él le tenía que ayudar, pero nada más, y es muy frustrante porque a pesar de que nos llevamos relativamente bien no puedo sacarle ninguna información beneficiosa para cambiar el futuro.

En fin, íbamos a demorar otras dos horas más de viaje en espada y luego tendríamos que acampar en las afueras del pueblo porque ahí no existía una posada. Los encargados de hacer las averiguaciones fueron Wei Chang Ze, Jiang Feng Mian y Ruohan, mientras los demás esperábamos a que terminaran de averiguar la situación para después ponernos en marcha y no demorarnos más de lo esperado.

— Saben podríamos habernos ahorrado todo esto si el líder de Gusu hubiera hecho una evaluación un poco más profunda de los hechos. — Dijo Jin cuyo nombre mejor nos ahorramos al igual que sus palabras.

— Lan Qiren le parece si mejor alistamos lo que necesitamos para no llevar tantas cosas con nosotros en lo que vienen los demás y así poder irnos de una vez. — Dijo Nie Min Xue, que por cierto me cae bien, una lástima que su final haya sido tan trágico.

— De acuerdo y heredero Jin podría quedarse aquí y emm cuidar las demás cosas, gracias. — Le hice una seña al Nie para alejarnos de ahí y empacar todo lo esencialmente necesario, que dicho sea de paso ya lo teníamos hecho, pero siempre es mejor alejarse de este Jin.

— Le parece si vamos a donde están los otros para ver qué es lo que sucedió joven maestro Nie.

— Claro todo lugar es mejor que estar cerca de ese altanero.

Apenas pudimos visualizarlos, sus rostros no estaban nada bien.

Me acerque a Ruohan para preguntarle qué es lo que sucedía, ya que su rostro era el que peor se encontraba, estaba pálido y sobre todo su expresión se asemejaba a esa que pondría en el futuro, sin vida, como si todo a su alrededor hubiera dejado de importar.

— ¿Ruohan? — lo llame mientras tiraba ligeramente de su manga para que me preste atención.

Tardó unos segundos en captar que le estaba llamando y cuando me miró sus ojos mostraban una tremenda preocupación y tal vez decepción. — Vamos Qiren, ellos ya saben que hacer — Dijo mientras señalaba a Chang Ze y Feng Mian.

— De acuerdo.

Estuvimos caminando por un sendero mientras Ruohan me contaba que tendríamos que ir a un templo abandonado de una supuesta Diosa del matrimonio que los aldeanos usualmente iban a ofrecer incienso y a realizar algunas bodas ahí, pero desde que a una pareja de novios recién casados fallecieron a la semana de contraer nupcias, lo mismo sucedió con unas cuantas parejas más que se habían casado ahí, también fallecieron, a todos los encontraron muertos así sin más, sin ningún signo de lucha o alguna enfermedad, por esto los aldeanos dejaron de asistir a ese templo a pedir sus deseos y optaron por construir un templo en la ciudad y adorando a otra deidad.

Ruohan y yo nos encargaríamos de ir al templo abandonado, mientras Chang Ze y Feng Mian iban a los hogares de los fallecidos, y por último Nie Min Xue iba a recorrer los caminos por los que iban las parejas hacia la montaña para casarse y Jin Guang Shan, bueno él era el encargado de ir a pedir refuerzos.

— Ruohan, ¿hay algo más que te esté molestando?

— No

Uy que cortante, y eso solo me confirma que existe algo más que me oculta.

— Sabes que me puedes contar cualquier cosa, porque somos amigos y aparte creo que hemos convivido lo suficiente para tenernos un poco de confianza, pero emm si tú no me lo quieres decir entonces no te forzaré. — Que difícil, si lo presiono definitivamente no me va a decir nada, pero igual siento que incluso si confiáramos plenamente el uno en el otro, aun así, él no me diría lo que pesa en su corazón.

— Tal vez en otro momento te cuente Qiren, pero por el momento no quiero discutir sobre este tema y te agradecería de que no lo mencionaras durante está cacería. — Lo dijo mirando al frente y su tono era muy plano.

Claro es que bueno tiene razón, quién soy yo en su vida para que me cuente cosas tan personales y sobre todo solo somos compañeros, tal vez haber estado pasando tanto tiempo junto a él me hizo pensar que éramos por lo menos amigos, al parecer me equivoqué.

— Ya llegamos, entraremos y revisaremos el lugar en busca de alguna pista. — Dijo mientras empujaba la puerta y entraba al templo.

Por mi parte me quede un momento ahí, estático, habiendo dado unos pasos dentro del templo y sin tener la menor idea de porque Ruohan cayó al piso, y al parecer yo iba por el mismo camino, ya que un olor extremadamente dulce invadió mis fosas nasales llevándome a la inconsciencia.  

Nota

Holaa a todos, es un capítulo corto, pero no quería dejarlos sin actualización. 

Solo diré que se preparen que se nos viene el drama, o tal vez lo aplace jajaja 

Sin nada más que decir, me despido.

Besos