Emma:
Candy había salido de mi casa hace como cuarenta y cinco minutos.
Había venido a arreglarse y a que la ayudará a verse sexy, después de todo, tal vez pensó que llegaría a más. Siempre lo piensa.
Pero me preocupa, ya que dijo que enviaría un mensaje y no lo ha hecho. ¿Estará algo mal? No creo.
Dejo de ver por la ventana la casa al lado de la mía, vuelvo a mi cama y gracias a la luz natural que se cuela por la ventana, puedo seguir leyendo mi libro. Siento el aire fresco chocando contra mi cabello, haciéndolo hacia un lado y haciendo que las páginas del otro libro extendido en mi cama, pasen página por página.
Leigh se fue con mi padre a un entrenamiento de tiro o algo así, no preste atención a eso.
Mamá se había ido con la vecina del lado, no con la señora Stein, con la Señora Blanca. Así que si, estaba sola y solo estaba leyendo.
Oigo fuertes golpes desesperados a la puerta de abajo, dejo el libro a un lado y bajo las escaleras a abir la puerta y ahí la veo.
Candy tiene el cabello desordenado, lágrimas caen por sus mejillas y su rimel "natural" ahora está manchando sus mejillas.
—¿Qué te pasó?— digo preocupada.
Ella no se lo piensa y entra a la casa, me obliga a subir a mi habitación, se voltea a mi y desesperada me ve.
—¿Hay alguien más en la casa?
Niego con la cabeza, extrañada por su apariencia y actitud.
Ella cierra mi ventana y cortina, haciendo que el viento y luz ya no entren en la habitación. Prende la lámpara y me ve.
—Escúchame bien, Emma. Te diré algo que nadie debe saber ¿Ok?
Confundida, asiento con la cabeza.
—La familia Stein es...todos son asesinos, Frey me lo confesó cuando me quiso matar y-y me amenazó diciendo que si decía un-na palabra me mataría y ahora tengo mucho miedo.
A pesar de que Candy lo dijo demasiado rápido, pude procesarlo y entenderlo.
La abrazo, haciendo que las manchas de sus lágrimas con rimel mezclado se queden en mi blusa blanca.
—Tranquila, tranquila...seguro viste algo diferente y...
—¿No me crees? ¡Son jodidos asesinos! ¡TODOS SON UNOS JODIDOS ASESINOS!— la desesperación en su voz es algo torturador.
—Candy, te creo ¿bien? Estas bien, ahora no hay ningún Stein aquí. Tranquila, solo respira y...
—Emma— ella me toma por los hombros, abriendo bien los ojos —. No es mentira, si quieres ve a comprobarlo tu misma, entra y ve toda la alfombra machada, había un tipo muerto ahí ¡Un tipo muerto! Y Frey el...el fue quien lo mato, yo lo vi, dijo que si hablaba me pasaría lo mismo y-y...
La tranquilizo, alejándome de ella y camiando hacia la puerta, —Bien, iré a ver ¿si? Tranquila.
—¡No! No vayas, no me dejes sola...tengo miedo ¿y si no vuelves? ¿Y si...?
—Shhh— digo calmandola —. La puerta delantera y trasera están cerradas con llave y adivina, están a tu lado en mi mesita de noche, la ventana de todas las habitaciones también al igual que sus cortinas. Estas a salvo, tranquila.
Ella respira agitadamente, pero intenta calmar su respiración.
—Bien...ve.
Salgo de mi habitación y de la casa en si, camino hacia la de los Stein y toco la puerta con mis nudillos.
[...]
Nota de la autora: Uy, no, que cosas ¿no?
Un día estamos bien y al otro llega Frey a hablar con Candy, la invita a salir y luego ella viene loca. Que cosas...
En fin, ¿como están? ¿Ya se bañaron? ¿Ya comieron? ¿Están bien de salud? Respondan honestamente <3.
Muchísimas gracias por leer esto, bye <3.
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Tentaciones [Frey Stein Y Tú]
Fanfiction*onceava historia* Los personajes le pertenecen a Ariana Godoy. y algunos a mi :).