Capítulo 20

3.5K 240 17
                                    

Emma:

Verlo ahí, sin fuerzas gracias al dolor, es horrible.  Una mancha roja se empieza a expandir por la ropa de Frey, y ahí entró en pánico.

Sin importarme que Brad aún este en shock por haber disparado, corro hacia Frey y me hincó hasta sostener su cabeza y colocarla en mis piernas. Veo como la marcha se expande cada vez más, cada vez más cargada, más carmesí.

—Frey...— digo moviéndolo.

Frey suelta un quejido y luego intenta levantarse, al no poder gracias a la herida se deja caer en mis piernas. Cada vez está más pálido, más débil. Lágrimas ruedan por mis mejillas mientras con mi mano en su herida, intento ayudarlo en algo, pero es inútil. Completamente inútil.

Mis lágrimas no paran, siguen y siguen cayendo. Dejo de tocar a Frey, cuidadosamente lo dejo en el suelo. Mi blusa manchada gracias a que pase mi mano por ella, mi mano aun mojada de la sangre de Frey. Me levanto despacio, tomando en el camino el arma de Frey que había caído a un lado.

Levanto mi mirada hacia Brad, quien ahora estaba pálido, —Y-yo n-no que-eria mat-tarlo— dice al notar mi mirada.

Repetir la escena de Frey cayendo, el arma haciendo un ruido, el sonido de la bala antes de impactar contra el. Limpio mis lágrimas y con la mano firme, a pesar de tenerla mojada por sangre, apunto a Brad.

—¿Qué? ¿Me dispararas ahora?— dice con gracia y nerviosismo.

—¿Sabes? Durante toda mi vida nunca pude hacer algo así como así— me acerco más a el —. Pero tú...tú acabaste con el cuando lo único que intento hacer fue...alejarme de tú lado, estúpido psicópata.

Brad con nerviosismo también levanta el arma hacia mi, —No me hagas tener que dispararte o inclusive matarte a ti también, Emma. Te quiero mucho.

Río sin gracia, camino rápido hacia el y al llegar llegar frente del arma, sin el tener las agallas de disparar, coloco mi pecho en ella y la pistola en su cabeza.

—Acabaste con lo que más quería hasta ahora. ¿Crees que podamos seguir viviendo ambos sin odiarnos?

Veo sus ojos negros.

—Disparas tú o disparó yo, o ambos al mismo tiempo. Pero ten por seguro que me aseguraré que mueras de cualquier forma.

—Si no te apartas en tres segundos, disparare, Emma.

Me oprimo más contra la pistola, invitándolo a jalar del gatillo, pero simplemente no lo hace.

—Pues entonces en tres segundos nos morimos.

Aprieto más la pistola sobre su cabeza y ahí puedo ver como en sus ojos hay miedo.

—Escucha, disparas o te disparo ¿que hacemos?— digo desesperada.

Sinceramente, si tenía la oportunidad de matarlo, lo haría. El había acabado con lo que más he querido, no dejaría que saliera ileso en esto.

Y sin aguantar su silencio, un disparo se oye. Alguien tuvo las agallas.

[...]

Nota de la autora: ¿Están bien? ¿Mal? ¿Medio?

Muchas gracias por haber leído esto <33.

Tentaciones [Frey Stein Y Tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora