mutawahijat aimra'a sultán Solimán

epílogo

—Repite lo que acabas de decir— Solimán había regresado, luego de calmar a los protestantes quiso ver a sus hijos pero aquel guardía lo recibía con malas noticias.

—Su alteza. La noche del saqueo, Kahzarah hermano de nuestra Sultana Zahra... Decidió traicionar al imperio llevándose a los príncipes y a la sultana raziye.— fue lo segunda peor notícia que alguien le había dado. Su corazón se había roto por segunda vez, no pudo soportar que su primer amor se fuera y ahora, perdía lo que más quería y lo que lo seguía uniendo a ella. Sus hijos.
—¡¿Cómo dejaron que pasará?! ¡Quiero que busquen en todos los rincones de este continente! ¡Quiero que traigan a mis hijos!

Gülfem sentía aquella presión en su pecho, el sentimiento de estar lejos de los niños la tenía mal. Todo el tiempo rezaba por ellos y a la vez, pedía una y otra vez el perdón de Zahra. Había dejado que sus hijos crecieran lejos de su padre por protegerlos de una sola mujer, aquello, era patético para ella.

—Kahzarah... Protege a los niños y cuídate mucho. Por favor... Regresen a salvo.

°

No sabía cuándo tiempo había pasado, Gülfem ahora había sido trasladada al lado de la Sultana Hatice. Mahidevran había dado a luz a un principe y por años se mantuvo como la favorita del principe.

Solimán, tomó el trono una vez su padre dejó el mundo. El sultán del mundo, Solimán el magnífico, ahora se concentraba en su reinado dando por fallecidos a sus hijos y a la mujer de su vida..
Gülfem observa desde las sombras, no puede tolerar que el príncipe que conoció cambiara mucho debido a Mahidevran pero ella sabía que Solimán, seguía pensando en Zahra... ¿Cómo lo sabía?
Porqué aún pedía que colocarán las flores favoritas de Zahra en los jardines, durante años, sigue pidiendo a su amiga Gülfem, cantar la canción de cuna que aprendió de Zahra. Sigue visitado ese lago, sigue manteniendo su tumba construyendo una mezquita para ella.

Pero, una nueva mujer llegó... Hürrem, quién ha vuelto a traer la vieja actitud del principe Solimán.
Puede ver en los ojos del sultán, el amor que antes solo se hacía presente al ver a Zahra.
Lo que le gustaba de aquello, era ver a Mahidevran sufrir por la llegada de Hürrem.

—Zahra... Me pregunto. Si estuvieras aquí. ¿Hürrem hubiera tenido oportunidad?
Zahra era... La luz del principe y se que si no te hubieras ido, seguiría siendo así.— Gülfem caminó hasta el jardín,  pudo ver el carruaje detenerse. La princesa  de Polonia, quién sería la invitada del Sultán bajaba de este, era una joven hermosa de la edad del principe Mehmed, estaba segura de eso. Su corazón comenzó a latir rápidamente al ver a la joven bajar junto a ella, y a su lado, tres jóvenes que cuidaban de ellas, no sabía si lo que veía era cierto pero aquel collar que la joven junto a la princesa tenía, lo había visto antes y el rostro de ella era igual.

—Zahra... No, ¿Raziye?

Continuará....