Tokyo Manji es la banda rock del momento; Chifuyu es un mesero común que un día va a una fiesta con su mejor amigo y no sabe cómo pero termina en la cama de uno de los integrantes de la banda.
Historia original.
@Los personajes le pertenecen a: Ken...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
:presente:
Deja su bolso en el sillón y va directo al refrigerador para buscar algo de comer, no es mucho de cocinar pero al menos puede hacer ramen instantáneo. El de queso es su favorito, así que pone manos a la obra mientras su celular desde la mañana ha estado sonando como loco.
Chifuyu nunca ha sido fan de las redes sociales –antes y menos después de Baji- así que lo ignora la mayor parte del tiempo pensando que quizá es su hermana la que lo llaman, ya que además de ella, nadie más lo hace. Se volvieron más unidos desde la muerte de su madre.
Apaga la estufa con el ramen y toma su celular, es un número desconocido el que ha marcado al menos más de 50 veces en todo el día.
La curiosidad mató al gato y aquello es lo que mata a Chifuyu cuando marca y escucha la voz de Hanagaki Takemichi del otro lado.
―¿Chifuyu? ¿Sí eres tú?
En todo el tiempo que han pasado sin hablarse, pensó que alguna vez volvería a escuchar su voz.
―Por favor, responde. Necesito hablar contigo.
Hace tanto que quería escuchar aquella frase, "necesito hablar contigo" justo como antes de que su amistad se terminará por tomar caminos diferentes; Chifuyu no pudo convencer a Takemichi de dejar a Mikey, eligió a ese ser horrible que lo engañaba con miles de personas en lugar de escuchar a su mejor amigo.
Vio todo lo que sufrió con Baji, Takemichi también sufrió y aun así, se quedó. Escogió a Mikey por encima de los insultos, golpes y engaños.
Todos los días esperaba sonar el celular y que fuera su mejor amigo diciéndole que lo necesitaba, que había reflexionado pero eso no pasó y después de un año eliminó todas sus redes sociales y perdió contacto con él y Hina.
―¿Cómo, es que conseguiste mi número?
Se escucha una risita a miles de kilómetros y eso hace que los ojos de Chifuyu se llenen de lágrimas, no podía creer que estuviera hablando con él de nuevo.
―Sabes muy bien cómo―claro que lo sabía, Kokonoi.―Tengo algo que preguntarte, Chifuyu, ¿Irás al concierto?
¿Qué?
Por un iluso momento pensó que se trataría sobre su amistad y no sobre aquella horrible banda que acabó con todo lo bueno que tenía; arruino su vida, sus mejores amigos y lo dejo totalmente solo y con miedo de tener amigos o pareja.
―¿Para eso me hablas? ¡¿Para eso tengo cincuenta llamadas perdidas tuyas?! Sabes la jodida respuesta y es no, no iré al concierto de esas mierdas de personas.
Y colgó. Y volvió a sentirse vacío.
Simplemente no podía creer que lo llamara después de muchos años sólo para preguntarle semejante tontería de la cual ya sabía la respuesta. Hanagaki lo vio llorar por Baji, maldecir por Baji, sufrir por Baji, aunque también lo vio reír con él, sonreír, amarlo –lastimosamente- y jurarle amor eterno.
