15

631 84 21
                                    

- Y como te ha ido en el viaje - caminaba, casi saltando mientras salía de recoger a su hermano del aeropuerto.

- Pues normal Kai - su aroma se espeso como si se estuviera enojado, mas Kai estaba ansioso de que le contase lo que había hecho durante esos 4 días.

- ¿Pero qué? ¿Qué hiciste, que viste cuéntame cuéntame? - salto aún emocionado

- Calma chaval, calma... tranquilízate un poco - subieron al taxi dándole la dirección del hotel para partir hacia el lugar.

- Pero me vas a contar - Kai miraba emocionado a su hermano en espera de sus grandes anécdotas girando un poco su cuerpo en los asientos traseros para quedar viendo totalmente a Michael - Anda cuéntame ... cuéntame por favor,  por favor - mi miro de cerca la cara contraria intentado que el mayor lo mirase, mas este solo mantenía su vista fija en la ventana su costado - Cuéntame por favor.

- ¡¡Calla Kai!! - seco y frío, eso es todo lo que salió de su boca para luego voltearse dándole la espalda.

Tal vez solo está cansado, seguro y si, el viaje lo canso, luego me contara, solo está cansado.

Se intentó auto convencer de que su hermano no está enojado con él, más por su aroma pareciese que sí, intento que el suyo no delatase su tristeza, mas se dio cuenta que falló cuando el taxista volteo a verle por el espejo retrovisor, sin duda a su hermano le estaba dando igual su presencia, tal vez no había sido buena idea ir a recogerle al aeropuerto.

El resto del viaje se mantuvo mirando la ciudad viendo como la vida empezaba a mostrarse en las calles con la gente caminando para llegar a tiempo a su respectivas tares del día , sin duda la ciudad esta llena de gente, miraba las calles intentando retener las lagrimas que amenazaban con salir, sin duda su hermano era una de las personas mas importantes en su vida y su falta de interés en ser le sentir en su pecho un horrible hueco que parecía querer consumir todo como un holló negro.

- Gracias - le dio el dinero del viaje al taxista para luego voltear para darse cuenta de que el alfa ya se encontraba adentrándose al edificio.

- Hasta luego hermano ... descansa - se alejó del edificio, esta vez correría para llegar hasta la estación, ya luego se bañaría y cambiaria en ella.

Había vuelto a aquello que mejor sabía hacer, más no conocía otra mejor forma de entender lo que sentía, de comprenderse sin sentir que se consumía en el intento.

...

La estación estaba tranquila, por lo que podía ver no estaba el capitán de servicio y esto le llenaba una paz un tanto buena, por lo menos no tendría que cuidarse de que le llegase un linternazo volador de su parte.

Muchos no habían ido a trabajar, la mayoría tomaría el turno nocturno, al entrar a radio se enteró de que los únicos de servicio eran Rene y Holly que se encontraba en una alerta en el norte así que yo era el único en la estación o eso creía.

- Hey - Sigurd llegaba con la vestimenta de servicio a la parte de la barbacoa o la terraza, depende de a quien le preguntaras - Kai ... Kai reacciona - movió un poco al menor que miraba con suma atención el suelo de la planta baja desde el balcón.

- Eh - miró extrañado al rubio hasta que su cabeza volvió en sí - Aaah Hola Sigurd - sonrió un poco apartando todos aquellos pensamientos que rondaban su cabeza que le habían hecho volverse en ella misma hasta cambiar su olor por uno más concentrado.

- En que tanto pensabas - apoyó sus brazos en la barandilla dirigiendo su mirada al moreno.

- ¿Yo? - hizo una pausa separando los ojos de los contrarios para pensar en una buena excusa - En nada solo me distraje un poco

- Aja si y yo soy Odín - miro con gracia al moreno viendo cómo evitaba su mirada fingiendo interés en el paso de los coches frente a la estación.

- Es verdad Thor ... perdón Sigurd.

- O no no esta bien Thor me gusta mas - se enderezo llevando su manos hasta la mejilla contraria moviéndola hasta que sus caras estuvieron frente afrente - Que es lo que te preocupa pequeño - no era tonto como para no notar el ligero cambio en el aroma del menor.

- Ya te lo dije nada - desvió la mirada a la parte trasera de la cabeza del noruego aun con la mano del contrario en su mejilla, algo caliente, el rubio emanaba un calor que hacía cómodo su tacto - Solo me distraje.

- Kai mírame a los ojos - demandó con una voz más gruesa de lo normal.

- T te miro - por un momento el mayor olvidó su propósito bajando un poco la mira hasta los labios contrarios tentado a probar su teoría de que estarían dulces y suaves - Solo estaba distraído - mentía, más no quería presionarlo más.

- Vale - quitó su mano del cuerpo ajeno volviendo a recargarse en la barandilla.

Mentía estaba seguro de que lo hacía, más no lo presione, si mi pequeño me lo quería decir lo diría y si no esperaría a que lo hiciese.

Kaigurd - OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora