Kaigurd - Omegaverse

18

- ¿Kai? - camino bajando las escaleras con un gran fajo de papeles que tendría que firmar y llenar por petición, más orden, del capitán.

- Kai - entró por la puerta de la sala de descanso viendo como el pequeño cuerpo del moreno se encontraba cómodo en un pequeño rincón del sofá hecho bolita soltando su relajante olor por todo el lugar.

Dejó los papeles en la mesa para luego tomar su caquetá entre sus manos empezando a retirarsela con cuidado de no hacer mucho ruido para no perturbar el descanso del menor.

Dejó la chamarra cubriendo el cuerpo del omega alejándose un poco para mirar la tierna escena, aquel chico causaba más cosas de las que quería aceptar y más preocupación de la que quería pensar, ¿Que es lo que le había sucedido?, ¿Porque no quería volver a su casa?.

Rin rin rin 

Mierda el teléfono, pero ¿donde esta?, ¿donde esta?, bingo.

Tomó el teléfono sonante entre sus manos.

- ¡Kai! donde estás ya es muy tarde - una voz que no conocía se escuchó por el aparato.

- No soy Kai - es lo único que se me ocurrió para contestar.

- ¿Quién eres?, ¿Por qué tienes el teléfono de Kai? ¿¡Dónde está el!?- se alejó del sillón para hablar más fuerte y no por susurros.

- Soy Sigurd compañero de Kai,  Kai está en la estación, se quedó dormido en el sofa.

- Komo … ¿Dormido en la estación?

- Si - en la sala de descanso por ser más específicos - Se veía muy cansado - dio la información sin más ya que si Kai lo tenía agendado conocería al hombre de la llamada, ¿No?, o eso esperaba.

- Vale .. vale … cuando despierte le puedes decir que lo espero en el hotel … que quiero hablar con él  - despegó el teléfono de su cara para mirar el nombre agendado en el aparato, Michael.

“Michael? … Ooo no no no … es él mi hermano” 

La voz del menor en la conversación de hace algunos días volvió a su cabeza. Michael era su hermano.

- Si claro yo se lo dijo Michael.

- Muchas gracias 

Corto la llamada dejando el aparato en la mesa mirando de paso la hora y el fondo de pantalla en el, una foto del atardecer, muy bonito si podía opinar.

Entonces Michael podía ser la razón por la cual no quiere ir al hotel, ¿Se habrían peleado?, o ¿El habrá hecho algo?, aquel alfa con olor a café. Muchas suposiciones se plantearon en su cabeza, mas no tenía la suficiente información como para descartar o afirmar alguna de ellas, así que solo se sentó en un hueco del sofá para empezar a firmar los papeles, entre más rápido terminara , más rápido se marcharía.

Pero la calma del lugar, junto con el relajante aroma del omega a su lado relajo todo su cuerpo dejando que la calma llenace su cuerpo haciendo que terminara rápidamente en los brazos de morfeo.

Quien los viera, dos bomberos cómodamente descansando en el sofá de aquella estación, sin duda una escena llena da cariño, el menor recostado en el pecho contrario, ambos acomodados de forma que solo cabían abrazados, una maravilla visual, sin duda algo que todos quisiesen ver, pero nadie tuvo la fortuna, ¿O si?