Ranas de papel

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YoonGi estaba volviendo de su hora del almuerzo a la oficina con un café descafeinado. Fue justo en ese momento que se encontró con una pequeña figura verde descansando sobre sus papeles de trabajo, junto a ella había una nota.

"¡Los anteojos te quedan geniales!".

El mensaje fue completamente adorable. YoonGi se sentía como un viejo cada vez que tenía que aumentar la graduación de sus lentes y sólo estaba por llegar a los cuarenta. No tenía idea de cómo vería cuando se volviera mucho mayor.

Debía ser ese chico. El chico de las flores de papel.

Si algo había aprendido YoonGi en su nuevo trabajo, era que ese muchacho se trataba de una verdadera mariposa social fuera del departamento. Lo encontró hablando con hombres encargados de la animación y después un grupo de mujeres mayores, todas ellas reían de algo que había dicho y le tiraban las mejillas cariñosamente.

En su propio departamento, era como si el chico no existiera. Las personas nunca le dedicaban una segunda mirada.

Curiosamente, en ese instante uno de los chicos de cubículos vecinos a YoonGi contempló la rana que sostenía y se acomodó para mirarla por completo.

—Oh, ¿esa no es una de las figuras que hace H?

—¿Qué? ¿H? —YoonGi preguntó, guardando la ranita celosamente en su portafolio de papeles. H tenía que ser la inicial de su nombre. Nadie podía ponerle un apodo así de ridículo.

—Ya sabes. H, como la letra.

Otra de las jóvenes trabajadoras que terminaba su café helado se unió a la conversación. Ella se acercó a YoonGi como si estuviera a punto de contarle un gran secreto y tuviera miedo de ser descubierta.

—Honestamente H es tan raro. Me pone nerviosa que siempre escuche, pero nunca tenga nada que decir.

Parecía ser un chiste compartido en los iniciados, porque todos los jóvenes rieron. A excepción de uno, el chico de cabello platinado y corto se levantó de su silla. No se veía nada feliz a juzgar por la expresión de su cara.

—Todos son tan insoportables. JiMin ya dijo que odia ese apodo —les advirtió, apretando los puños. Su tono de advertencia hizo que el primer chico se sobresaltara.

—Pero, HoSeok, yo nunca lo escuché decirlo.

La aclaración rápida hizo que toda la oficina estallara en risas. YoonGi estaba por hacerlos callar, porque la broma no era divertida para JiMin, definitivamente. Sin importar que apenas conociera el nombre del chico. Sin importar que JiMin no estuviera presente.

Movió la boca hasta que SeokJin hizo acto de presencia y las risas se detuvieron.

—Como su supervisor voy a pedirles que detengas esas bromas. Si JiMin ya manifestó que se siente incómodo con ellas, deténgalas. —SeokJin colocó las manos en su cadera, lo que sólo le agregó dramatismo a la situación—. Se llama JiMin Yoshida y espero que se refieran a él de esa forma.

—S-sí, superior —respondieron todos al mismo tiempo.

La mirada de SeokJin tuvo a todos volviendo al trabajo rápidamente. Entonces el jefe del departamento palmeó la espalda de YoonGi y se alejó con un suspiro.

YoonGi miró las caras de culpa y luego a la ranita dentro de su portafolio. Quizás JiMin estaba haciéndole figuritas porque todos en la oficina le daban un trato silenciosamente cruel y buscaba ganarse otro amigo.

Eso era triste.

Impulsado por un sentimiento noble, el diseñador tomó uno de sus bocetos que no pensaba mejorar e hizo un barco del tamaño de toda la hoja. Su figura era tan torpe comparado con los trazos de JiMin.

"Gracias. El origami te queda genial." Él escribió en la vela del barco.

Justo cuando estaba por depositar su figura en el cubículo de JiMin, su teléfono se iluminó con la notificación de un mensaje.

«Iré a recoger las cosas que me faltan. ¿A qué hora puedo pasar por ellas?»

A veces el error de YoonGi era no mirar a fondo en las personas y confiar en que serían igual de directas que él, también fue el motivo por el que su matrimonio terminó arruinándose. Por eso se tomó un momento en analizar la situación, lo que le hizo recordar algo importante.

«Deja de fingir que no conservas una copia de las llaves.»

«Quiero hablar contigo.»

La respuesta ni si quiera le sorprendió. Su exposa nunca iba a cambiar y YoonGi olvidó por completo entregar el barco de papel después de eso. 

Origami [YM/JS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora