Red Room. [SANZU HARUCHIYO x OC]

Pista 11. Come Undone.

°°Trataremos de permanecer ciegos,
a la esperanza y el miedo allá afuera.
Quédate más salvaje que el viento y entonces
golpéame hasta llorar.
¿A quién necesitarás?
¿A quién amarás? Cuándo vengas deshecho.°°

Se suponía que el no me relacionaría con Bonten, ¿Entonces por qué?.

—Seguro, vayamos al pasillo...-Sanzu había levantado un poco el tono de voz.—No será tan tardado, ¿Usted conoce a la señorita Yuuki Fujiwara? Hace un par de días, nos informaron que alguien similar a ella salió de este edificio...Y después de investigar, el casero nos confirmó que solo una pareja joven vivía en este lugar.-

"Juguemos a las escondidas"

Sanzu sabía que nadie que tocara a nuestra puerta, sería algo bueno. Tomé aire y miré alrededor, la ventana de la habitación conectaba al balcón de la sala, ¿Qué tanto previó ese pelirosa maniaco?.—Si, claro, mi novia y yo nos mudamos hace un par de días...Pero ella está en el trabajo...-

—¿Podríamos revisar su hogar? Es meramente procedimiento.-Naoto se mantuvo firme. Ahora entendía porque Sanzu solo mantuvo lo necesario ahí, nada que pudiera delatar que estábamos ligados.

Escuché los pasos acercarse a la habitación y en ese momento salí por la ventana, el balcón crujió un poco bajo mi peso pero me agazape pegada a la pared. No quería irme, no ahora, aún no encontraba una respuesta al porqué de mi vida, además, tampoco quería que Sanzu sufriera.

Fueron los minutos más eternos de la vida, pero cuándo los escuché salir de la habitación, sentí que podía respirar un poco.—Lamento la intromisión, volveremos por la tarde para hablar con su novia, comprenderá...-

—Si, ojalá encuentren pronto a esa pobre chica, ¿Secuestrada? Una pena...-su voz en verdad sonaba convincente, Naoto se mantuvo en silencio.—Gracias por su cooperación, con permiso.-al cerrarse la puerta, entré por el balcón y me dejé caer en el suelo.

—¿Qué decías sobre tu amiguito?.-preguntó furioso tomando mi mentón, aunque no estaba enojado conmigo. Sacó un cigarrillo y lo encendió, miraba al techo firmemente.

—Debió ser en Halloween...pero a pesar de eso, se movió demasiado rápido el maldito...-susurró tirándose en el suelo. Halloween había sido dos semanas atrás, miré a la ventana y los brotes de las semillas que planté, el silencio reinaba mientras el pelirosa pensaba.

—Usé una identificación falsa, pero aun así, Tachibana será un problema si nos mantenemos aquí...-susurró levantando la mirada, el problema era yo, eso estaba muy obvio.—Así que nos mudaremos...-apenas había comenzado a acoplarme a ese departamento y ahora nos íbamos de nuevo.

—No hay otra opción...si se sospecha quién soy yo, las cosas se volverán molestas para Mikey y yo me encargo de eliminar lo que a Mikey le molesta.-la forma en la que lo dijo, realmente hablaba en serio. Preferí mantener el silencio antes de hablar sobre algo que estaba más allá de mi poder, además Sanzu parecía acostumbrado a huir constantemente de la policía.