Amor de otro mundo. (Rook x tú)

Capítulo 14.

Rook y Liz, se estaban preparando para salir con rumbo a la casa de los familiares de Liz, para hablar con ellos sobre su relación.

Ya Liz, había hablado por teléfono con sus padres y les había comentado sobre Rook, aún así, ellos irían parabque los familiares de la chica, conocieran al Revonnahgander.

Para que lo conocieran y para que Rook, les dijera a los padres de Liz, que se casaría con la chica como los humanos acostumbraban, ya que para las costumbres Revonnahgander, ella ya era su esposa.

Al terminar de subir las cosas que iban a llevar, abordaron la nave y Liz, les marco a sus padres para avisarles que ya iban para allá.

-Ya es hora- le dijo Liz, a Rook.

-Así es- le dijo Rook a Liz.

Después de que se dieron un corto beso, finalmente Rook, encendió la nave y se dirigieron al lugar en el que vivían los padres de Liz.

Los padres y abuelos de Liz, estaban esperando en la sala, la llegada de Liz y su pareja Revonnahgander.
Los hermanos de Liz, también estaban esperando la llegada de su hermana y su cuñado, solo que ellos se encontraban en la escuela.

Para la madre y la abuela de Liz, en un principio había sido sorprendente que Liz, fuera pareja de un chico de otro planeta, pero después de su sorpresa inicial, lo único que les importaba era que Rook, fuera un buen chico y que cuidara bien de Liz.

Ya habían hablado por teléfono con el una vez y les parecía que era un joven muy educado.
No sabían a que hora iban a llegar, pero sabían que sería temprano ya que usarían una nave para ir (el proto-camión)

Habían llegado rápido a la casa de los padres de Liz, que era donde acordaron llegar.
Se quedarían una semana con los padres de Liz y luego regresarían a su casa para seguir con su trabajo como plomeros.

-Que bueno que ya llegaron, ¿Cómo estuvo su viaje?- lea dijo la madre de Liz.

-Estuvo muy bien. Encantado de conocerlos, mi nombre es Rook Blonko- se presentó Rook, con los padres y abuelos de Liz, que habían salido a recibirlos.

-El gusto es nuestro, pasen por favor, están en su casa- dijo la madre de Liz.

-¿Cuánto tiempo van a quedarse?- preguntó el padre de Liz.

-Una semana- respondió Liz.

-No es mucho tiempo, pero si podemos tener todo listo en ese tiempo- dijo la abuela de Liz.

-Sí, solo debemos comenzar a preparar todo ya- dijo el abuelo de la chica.

-¿De qué están hablando?¿preparar qué?- preguntó Liz.

-Su boda- respondió el padre de la chica.

Había una cosa que Liz, no sabía y era que cuando Rook, había hablado con sus familiares, ya les había mencionado a ellos que se casaría por las leyes humanas con Liz, pero que quería ir para pedir su mano formalmente.

Los padres y abuelos de Liz, decidieron que planearían la boda para cuando Liz y Rook, estuvieran de visita, pues ahora que Liz, estaba trabajando en otra área de los plomeros, su padre haría los viajes diplomáticos.
El padre de Liz, tenía pensado llevar a su esposa con él a los viajes que haría como diplomático de los plomeros.
Para ellos sería como una segunda luna de miel.

Cómo los padres de Liz, se irían de luna de miel, por el trabajo del padre de Liz y no podrían asistir a la boda si se hacía después (lo planearon rápido para que no se hecharan para atrás)

-¿Nuestra boda?- preguntó Liz.

-Quería decirtelo en la cena, pero supongo que te lo diré ahora- le dijo Rook a Liz.

Después de que Rook, hablara con Liz y pidiera su mano formalmente, fueron a comer y de ahí, comenzaron los planes de la boda.

Mientras la madre y abuela de Liz, se la llevaban a buscar un vestido de novia para la boda, Rook, le llamó a Ben, el Magistrado Tenyson, Gween y Kevin, para invitarlos a la boda.

Mientras Rook, invitaba a los amigos mas cercanos a la boda, Liz, ya había recorrido varias tiendas, buscando el vestido de novia para su boda.

Se había probado en total cinco vestidos.
Se había probado un par en corte sirena, dos de corte sencillo, pero al final había elegido uno en corte princesa, que no solo le había encantado a ella, también a su abuela y su madre.

El vestido era sencillo, pero sin duda muy bonito.

Liz, agradeció haber encontrado el vestido perfecto, pues, no solo su madre y su abuela, le habían ayudado con sus opiniones, el hombre encargado de la tienda, también se había unido a ellas y escuchar tantas opiniones, al final no estaba siendo de tanta ayuda.

Al probarse el último vestido, supo que era ese con solo ponérselo.

Los planes de la boda, siguieron después de eso.

Continuará...

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Les traigo el siguiente capítulo de esta historia.

Disculpen si estoy tardando con las actualizaciones.

Espero que les guste.
Gracias por leer.
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Les mando un abrazo.
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