Al salir los primeros rayos de sol ,Hermione tomó su celular y marcó hacia la casa de los Potter tratando de hablar lo más bajo posible.—Hola Hermy ¿Cómo estás?
—Ginny, necesito que me acompañes a levantar una denuncia, ¿Crees que podrías…?
—Amiga, ¿Estás bien?—preguntó preocupada al escuchar su voz entre sollozos.
Pronto, Hermione comenzó a contarle todo lo que había ocurrido. Ginny consternada y enojada por partes iguales, no sabía a quién lanzarle un crucio primero, si a malfoy, o al Dr. Granger.
—...pero antes de ir, tendré que volver a visitar a Malfoy, olvidé mi collar, y es muy importante para mí. Lo he tenido desde que tengo memoria.
—Te acompañaré. No confío en ese idiota, imagina que quiera propasarse contigo, y…
—No es necesario Ginny, puedo cuidarme sola.
—¿Segura?
—Segura— afirmó limpiando sus lágrimas.
—Bien, pero si te demoras en llegar, mandaré a todo el ministerio de magia de ser posible al apartamento de Malfoy.
Hermione estuvo de acuerdo, y reuniendo todas sus fuerzas se incorporó. Con mucho esfuerzo, se puso un abrigo que cubriera sus heridas, y aprovechando que aún todos dormían salió a hurtadillas de su casa.
Tomó un autobús hasta ese sitio, y suspirando caminó a paso lento hasta su apartamento.
Al estar a pocos centímetros de la puerta del lugar, se percató de que estaba un poco abierta, y pudo identificar algunas voces masculinas que salían de ella. Tuvo la impresión de que uno de ellos había mencionado su nombre en la conversación, así que para salir de dudas, pegó su oído en la madera fría, y trató de fundirse en ella para poder distinguir más el tema de conversación.
—… entonces no te la pudiste tirar y eso te trastorna, ¿no?
—¡No seas Imbécil, Blaise!—respondió Malfoy dando vueltas como león enjaulado, con las manos puestas en sus bolsillos.
Zabini no tardo en notar la presencia de Hermione, y no pudo evitar que una sonrisa apareciera en su rostro ante la irresistible idea de empeorar las cosas entre ellos.
—Y lo peor de todo es que perdiste la apuesta ¿No?—dijo burlón. Malfoy se detuvo, y frunció su ceño sin entender a qué se refería exactamente.
—De que estás hablan…
—Ni modo amigo— lo cortó su amigo sin dejar que termine la frase– así es en estos juegos. Pero ¿sabes? Me hubiera encantado saber cómo lo hacía Granger. Ya sabes lo que dicen…"Las mojigatas son las más perritas"
En ese momento Hermione pudo escuchar como el cristal de su corazón se rompía en mil pedazos, y en un impulso de dolor e ira, empujó la puerta haciendo notar su presencia.
Zabini al verla entrar, aprovechó la oportunidad para escabullirse
—Nos vemos -se despidió. No estaba seguro, pero en ese momento, Malfoy podía jurar que en sus ojos, había un brillo de burla.
—Ven acá pedazo de… —Él joven intentó alcanzarlo, pero Hermione se lo impidió cuando se plantó delante de él, tapando su camino.
—Así que… eso era todo…
—¿Qué? —preguntó Malfoy sin entender a qué se refería.
—Eso era todo…una simple apuesta…
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Próvocame
FanfictionHermione Granger se vio forzada a desaparecer del mundo mágico por ocho años,hasta que Draco Malfoy llega a su vida para ayudarla a salir del encierro en que ha vivido. Dramione.