Todoroki Shoto, un Alfa de categoría dominante, joven soltero miembro de el equipo de Futbol Americano conocido como UA, a su edad a alcanzado la gloria como Core back de su equipo.
Bakugo Katsuki, un joven omega, practicante en el Hospital Tokio, h...
-Adiós Katsuki-chan! - Gritaron unos cuantos cuando el omega pelirrubio paso por la sala donde se encontraba el equipo de la UA descansando de su entrenamiento.
-Si, si ya a la chingada- Dijo el cenizo asintiendo a las palabrerías del equipo- Adiós Bastardos!- Grito por ultimo antes de salir por la puerta, dirigiéndose al estacionamiento del complejo , a esperar su Uber.
-Hola- Dijo alguien confundiendo al cenizo, quien le respondió dudoso.
-Hola?- Alzo su ceja, mirando al oji dorado.
-Mi nombre es Tamaki, tu eres Katsuki, ¿Cierto?- Pregunto aquel chico de ojos dorados y porte similar al suyo.
-Así es- Respondió el cenizo, fijando su mirada en aquel desconocido- ¿Qué quieres y que haces aquí?- Pregunto viendo que el desconocido no paraba de sonreírle, haciéndolo sentir incomodo.
-Ah! solo quería conocerte Katsuki-chan, y por lo visto eres todo lo que me han comentado- Dijo por fin el de ojos dorados.
-AAH! Quien te crees que eres, debería golpearte por ser tan insolente con una persona que ni conoces- El rubio iba a seguir con su griterío hasta que el guardia de seguridad del complejo se acerco y le informo que el Uber que esperaba había llegado, así que ignorando al rubio de ojos dorados solo se alejo con el guardia en dirección al Uber que lo esperaba, y antes de subir solo le mando una mirada asesina.
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Vio como el rubio cenizo se perdía entre las calles y solo entonces el omega oji dorado dio la vuelta y se dirigió a la limosina en la que había llegado.
-Y como te fue?- Pregunto el Alfa de la familia.
-Es todo un caso, me recuerda a mi pero con muchísima mas agresión dentro de su cuerpo- Respondió riendo un poco el omega.
-Ya lo creo, observe su conversación y con lo ultimo que le dijiste pareció alterarlo mas de lo que se encontraba cuando salió.
-Si- Dio alargando la palabra- Creo que fue el tono en que lo dije.
-Ya lo creo- Respondió el albino que estaba recostado en los amplios sillones dé la limosina y con los ojos cerrados .
-Papi!- Dijo un pequeño pelirrojo, lanzándose a los brazos de su padre alfa.
-Si cachorro- Respondió el alfa arrullando a su cachorro.
-¿Cuando veremos a Sho-chan?- Pregunto tratando de no quedarse dormido ante las suaves feromonas a roble que su padre alfa desprendía de su cuerpo, calmando a su pequeño quien poco a poco cerraba los ojos dejándose llevar.
-Pronto cachorrito, pronto- Susurro el alfa depositando al pequeño en brazos dé su madre, quien lo recibió gustoso dándole un beso en la frente, mientras colocaba una manta para que su pequeño no tuviera frio.
-Es momento de ir a casa- Hablo el alfa pelirrojo.
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