Cuando la tetera suena anunciando que el agua está hirviendo, se levanta de la silla y va a la estufa, apangando la flama y sirviendo en dos tazas el tan caliente líquido, el cual expulsa vapor de sobre manera. Observa con atención su reflejo, piensa seriamente en si aceptar o no aquello que el detective le ha propuesto.
Toma ambas tazas volviendo a la mesa para colocar una frente del peliverde y otra al lado de su portátil, tomando lugar en el asiento que anteriormente estaba ocupando.
— Entendería si quiere mantenerse al margen —dice el detective, depositando dos cubos de azúcar en el agua caliente—, pero agradecería mucho su participación.
— Ha dicho que sólo han sido dos casos, ¿por qué cree que están relacionados y que habrá un tercero? —pregunta, observando con atención las manos llenas de cicatrices del hombre frente suyo— No me mal entienda, quiero ayudar, pero no pienso participar en algo que me quitará tiempo.
— Es comprensible.
— Soy un detective privado, salir a la luz pondrá una soga en mi cuello.
— Sí, eso es seguro —el hombre agrega una cucharada de café, remueve suavemente con la cuchara y vierte en la taza leche fría hasta que aquella oscura bebida se vuelva un suave color arena—. Ambas víctimas de violación comparten rasgos físicos, fueron amenazadas y obligadas a vivir lejos de japón, y estoy seguro de que habrá una tercera porque las dos féminas presentaron lesiones similares.
— ¿Un violador? —arquea una ceja— ¿Sólo eso quieres que busque?
— No —el peliverde da sorbo a la bebida, sonriendo de lado ante el dulce sabor que le ha proporcionado—, lo que quiero es que usted se vuelva eso que el violador busca —eso le hace fruncir el ceño, ladeando un poco la cabeza—. Si acepta, le daré más detalles de la investigación, si no, bueno, gracias por escucharme.
Ante aquellas palabras entrecierra los ojos, se prepara su bebida y al dar un trago, asiente. Deja de lado la taza, extiende su mano al detective de UVE y este le estrecha sonriente, demostrando así que la misión es de suma importancia.
— Será un placer trabajar con usted, detective Bakugo.
— No puedo decir lo mismo, detective Midoriya.
Se sueltan la mano y el peliverde procede a contarle todos los datos reunidos del caso, es en ella que entiende el porqué han ido a buscarlo y también siente que no se va arrepentir de haber aceptado, pues suena que va ser algo muy emocionante.
*solo para aclarar, esto no es una secuela ni precuela, es un "what if". Muchos cambios pueden haber, otros solamente dan un pequeño giro y unos más harán que se muerdan las uñas de los nervios. Re emocionada con volver con esta bella pareja y lista para hacerles la cabeza un caos.
gracias por el apoyo en UnOmegaParaMí, espero contar con ustedes en esta nueva historia.*
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Un Alfa Para Ti (KiriBaku)
FanfictionEn los barrios bajos todo puede ocurrir, desde un amor entre un detective y un bailarín exótico hasta los asesinatos más despiadados y turbios que alguna vez la ciudad escuchó hablar, sin embargo, esta historia no se enfoca ahí. Todo empieza en los...