Con mascarilla de oxígeno contra su boca y nariz, observa el piso en el que ha estado viviendo ser consumido por las llamas. Lo bueno es que se encontraba en el pasillo cuando aquello exploto, sin embargo, está seguro de que no hay forma de que Punk haya sobrevivido o algo de su apartamento se haya salvado, ¿qué mierda pasó? ¿Un corto circuito?
No, no cree que haya sido así.
Se retira la mascarilla, suelta un suspiro y ve hacia el camión de bomberos, ellos han hecho un gran trabajo apagando el incendio y han actuado rápido a pesar de lo lejos que se encuentra el apartamento de la estación, sin embargo, no duda que ese sujeto de cabello negro y gran altura haya tenido algo que ver.
El padre de Eijiro es aterrador, a pesar de estar a metros de distancia, puede sentir la pesada mirada del pelinegro.
— ¿Eres el dueño del apartamento? —la pregunta hecha lo hace girar la cabeza hacia la izquierda, encontrándose con el capitán del escuadrón de los bomberos— Mi teniente no quiere venir a hacer su trabajo porque se trata de ti, así que he venido yo.
— ¿Qué diablos pasó en mi apartamento?
— Dejo una llave de la estufa abierta —Arquea la ceja ante eso, niega con la cabeza—. Es normal que quiera negarlo, pero...
— Salí a las seis de la mañana de mi apartamento y quien se quedó fue Eijiro, el hijo de su teniente —se cruza de brazos y el hombre mayor frunce el ceño, volteando hacia los demás. Con un ademan les llama, obligándolos a acercarse—. Y por la tranquilidad con la que están manejando todo, estoy seguro de que no estaba dentro.
— No, no lo estaba. Solo dimos con un pequeño animal... ¿Tenías un gato?
— Era un tejón de miel.
— Lo siento mucho —Asiente en respuesta. Los pasos acercándose lo hacen volver su atención al frente, viendo a quienes se acercan. El rostro de Lev es el que más delata lo mucho que le desagrada.
— Quiero aclarar que la razón por la que tu hijo está conmigo, es porque ustedes lo siguieron tratando como un niño.
— No pienso hablar de mi hijo contigo —Corta Lev, cruzándose de brazos.
— Tranquilo, león —Sakamata coloca una mano contra el hombro izquierdo de Lev, quien gruñe mostrando los afilados dientes. Le sorprende no sentir nada al verlos, pues cuando Eijiro muestra esa afilada dentadura acaba con todas sus terminaciones nerviosas—. Todos nosotros sabemos de tu relación con nuestro chico, pero si dices que él fue el último en salir de tu apartamento... Eso quiere decir que estás a la vista de nuestro querido pirómano, pero ¿dónde está Eijiro?
— Normalmente sale con el tipo rico, Monoma Neito.
— ¿Es malcriado embarazado? —la pregunta hecha por el hombre de cabello platinado hace a los demás suspirar, parece ser el sujeto sin filtros— Bueno, definitivamente no estaba con él. Hace una hora fue a la estación para platicar con Lev, y realmente parecía querer conversar más, e de los tipos que habla por hasta los codos... Es lindo, pero molesto.
— Ya, ya. Suficiente información —Shinji se lleva la mano al mentón, ladeando ligeramente la cabeza a la derecha—. Es extraño, ¿no? Nuestro pirómano no había salido de un perímetro.
— Y ahora se fue casi hasta la orilla —el padre de Eijiro se da la vuelta, avanzando con firmeza hacia el camión de bomberos— ¡Si ese hijo de puta va por mi hijo, está muerto!
— Oh, explotó —Sakamata voltea a verlo—. Eres el destinado de nuestro muchacho.
— Sí, lo soy.
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Un Alfa Para Ti (KiriBaku)
FanficEn los barrios bajos todo puede ocurrir, desde un amor entre un detective y un bailarín exótico hasta los asesinatos más despiadados y turbios que alguna vez la ciudad escuchó hablar, sin embargo, esta historia no se enfoca ahí. Todo empieza en los...