Jonathan perdió a su esposa a quien creía conocer y debe lidiar con un futuro incierto. Heredero de una gran fortuna e imperio, decide apostar todo por la venganza cuando se reencuentra con la niña que lo miró a los ojos cual adulta fuese. Sus plane...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Jonathan:
Han pasado dos días sin saber absolutamente nada de Katrina. Un esfuerzo terrible para mí. Ya que yo mismo fui quien le pidió que no me llamara porque podría ser peligroso.
Si todo estaba como yo creía, entonces Roper ya no querría casarme con su hija. Por eso involucró a uno de sus más fieles lacayos para seguirme por tanto tiempo. Aunque no le pareció, decir que no queríamos casarnos era una buena opción por el momento. Si Roper veía que no estaba interesado en ella podría no ponerla en peligro ante cualquier caso. Si ella decía que no quería casarse conmigo, veía la opción de que pudiera hacerlo con Sebastián, como Roper seguramente quería.
Decirle que me interesaban más los negocios que casarme con su hija podría hacerlo sentir más seguro sobre mi posición.
Por su puesto Katrina no quería, pero tuve una noche larga para convencerla de que era lo mejor. Y que tuviera paciencia y me esperara... solo un poco.
"*Recuerdo de Jonathan mientras va en el Jet con Roper*
—Si algo me pasa... prométeme que huirás. Que no dejarás que Roper siga controlándote. Prométeme que serás libre — pasé mis manos por su cintura desnuda, la pegué a mí mientras ella acariciaba mi pecho con sus dedos — prométeme que no me olvidarás jamás.
—No digas esas cosas Jonathan. Nada te va a pasar. No seas tonto — Katrina se acerca y me besa, sus suaves labios son tan deliciosos — prométeme que esta misión suicida va a terminar.
—Te lo prometo — hablé sobre sus labios — Quiero que... — me alejé para poder mirarla a los ojos — tú y Danni vengan conmigo cuando esto termine — ella amplió los ojos intentando no parecer lo suficientemente sorprendida — sé que parece que estuviera implícito, pero... no pienso dejarlos a la deriva. Si la madre de Danni no pone objeciones, me gustaría llevarlo con nosotros. Aunque sea intervalos de tiempo. Quiero alejarlo de lo que tenga que ver con Roper lo que más pueda.
—Creo que estaría fascinado de vivir contigo — ella sonrió y rodeó mi cuello con sus brazos. Sus pechos se pegaron al mío y me besó — Mi mamá tiene una hermosa casa en el lago en Noruega. El pueblo está a media hora. Y no hay vecinos en kilómetros. La tiene guardada para mí. Mi herencia, de su parte — ella sonrió con nostalgia y deslizó un dedo por mi rostro — creo que sería un buen comienzo para nosotros. Lejos de todo el pasado.
—Me parece una estupenda idea — apreté su trasero y ella enredó sus piernas con las mías — Kath — susurré.
—¿Qué?
—Te amo.
Sus ojos se aguaron y tras cerrarlos me besó. Suave, inocente. Lleno de pasión, lujuria. Tantas cosas. El corazón se me aceleró y la apreté con más fuera contra mí.
