9- [¡Bienvenido a mi morada...!]

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Una vez que los dos muchachos se desahogaron de aquellas penas que guardaban, comenzaron a cuestionarse el que harían ahora. Se estaba haciendo tarde y la lluvia no parecía querer cesar. Allí fue el momento en el cual a Gundham se le vino una brillante idea.

-Humano, ¿Le apetece a usted quedarse en mi humilde morada? No es muy lejos de por aquí.

-Claro, ¿Por que no? Aún que, nunca creí que vivirás en una zona tan céntrica de la ciudad, me esperaba que vivas en una especie de mansión abandonada en un bosque oscuro, como en los cuentos de hadas.

-Estoy planeando conseguir algo del estilo, pero de momento, no me queda de otra que adaptarme al estilo de vida de los mortales.

-Va, pero no es molestia si me quedo la noche allí, ¿Verdad? Mi viejo es de carácter algo jodido, y de vez en cuando hay veces en las que prefiero evitarlo, ¿Sabes?

-Por supuesto que no hay problema, anda,  partamos hacia el destino.

Una vez fuera del edificio, Gundham metió la mano en su bolsillo de su gabardina para tomar las llaves del apartamento. Aquellas llaves que tenían un bonito llavero con un gatito blanco fueron utilizadas para abrir la puerta y ambos pasaron al lugar. Tanaka guio con pasos delicados a Souda hacia los ascensores y se dirigieron hacia el piso correspondiente.

-Ah... Espero que no te moleste si...

-Tranquilo hombre, es tu hogar, no voy a criticarlo, además seguro es más ordenado que el mío.

-Bien.

Una vez en el piso correcto, el adiestrador volvió a tomar sus llaves y abrió la puerta de su habitación. De repente, un montón de bolas de pelo se lanzaron hacia él para recibirlo. Gatos, perros, hámsteres, roedores, vacas, caballos, pollos y ovejas entre muchísimos otros más. Animales de todo tipo se acercaron a saludar a su maestro mientras emitían alegres sonidos. Kazuichi se quedó inmovilizado contemplando la escena, mientras que algunos animales se acercaron a olfatearlo con curiosidad.

El morocho aplaudió dos veces y todo el ruido cesó. Aquellos animales inmediatamente se sentaron tras escuchar las palmadas de su gran maestro.

-¡Atención, criaturas infernales como yo! ¡Oídme! ¡Este es mi nuevo compañero, el guerrero de las maquinarias, Kazuichi Souda! ¡Les pido que le den su aprobación!



Las "Mascotas" de Tanaka se levantaron y se acercaron hacia Kazuichi en manada. El mecánico seguía extremadamente confuso ante la situación. Sabía que Gundham era extraño, ¿¡Pero a este punto!? De cualquier forma, los animales lo aceptaron tras haberlo analizado lo suficiente, e inclusive un pequeño minino comenzó a frotarse en su pierna para impregnarle el aroma del hogar y considerarlo un miembro más del rebaño.


-Kazuichi, ¿Se encuentra usted bien?

-No me esperaba que tengas... T- Tantos...-

-¿Tantos secuaces? ¡Bwahahaha! ¡Así es! Todas estas magníficas criaturas conviven conmigo. ¡Algún día encontraremos un espacio en el cual formar nuestra propia nación! Pero por desgracia, momentáneamente tenemos que acostumbrarnos a este pequeño apartamento. -Dijo Gundham algo decepcionado.

-¿Y como es que todos entran aquí? ¿Acaso hay espacio para ti? -Preguntó Souda, que miraba el ambiente intentando buscar algún espacio.

-Somos una manada, por lo que a mis compañeros no les molesta estar muy pegados a pesar de ser de distintas especies. Además en algunas estaciones, algunos se marchan para luego volver meses después, es por esto que aún que el espacio sea pequeño, no encontramos disconformidad. ¡Además! ¡Al ser yo el líder, recibo un respeto especial y una zona solo para mí y aquellos que yo invite! ¡Observa!

"Dos idiotas, accidentalmente enamorados" Soudam Fanfic - DanganronpaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora