Capítulo 05.

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Imperio Ananhart, Palacio De Justicia, 07:00 A.M.

Se encontraba en el estrado, pasmado en su lugar, sentado y siendo señalado, podía escuchar los gritos en su contra, podía sentir las miradas, que le deseaban la muerte, atravesando todo su cuerpo y escuchaba a la mujer que más había amado en la vida, acusándolo.

Rosmerie: el me obligó!, ella era mi mejor amiga!-lloró con rostro lamentable, sus lágrimas eran como ver finas joyas- fue como una hermana para mi!.

Juez: entonces el te obligó hacer este crimen?-recalcó mirando neutral a ambos, algo no le cuadraba y su historia tenía muchas inconsistencias.

Rosmerie: si, yo no quería....!-cayo de rodillas, tratando de no ahogarse con su llanto- ella me tendió su mano y me ayudó!.

El llanto de la oji-verde y el bullicio del público estaban mezclados, unos estaban contra ella y otros estaban apoyándola, Elrick estaba cabizbajo no podía siquiera asimilar que estaba siendo señalado por su amante.

Juez: usted joven Elrick tiene algo que decir?-miró al joven que estaba cabizbajo, parecía en trance- diga algo por favor.

Elrick:....yo no quise matarla-respondio despacio- fue idea de ella!.

Apuntó a la castaña quien le dio una mirada llena de tristeza y lagrimas, le miro con enojo, él nunca quiso hacer eso.

Elrick: yo solo quería romper el matrimonio nada más!-explicó levantando la cabeza con orgullo- ella tomó la espada y la apuñaló!.

Rosmerie: ahora me echaras la culpa?!-señaló volviendo a llorar lamentable- despues de que me seducieras y me hicieras tu amante?!.

El silencio estaba reinando por el salón, la gran flor de la sociedad, había confesado ser la amante del prometido de su mejor amiga. Los gritos empezaron a escucharse desde todos lados, Elrick estaba siendo señalado por culpa de su amante.

Juez: orden orden!-exigió golpeando la mesa con el martillo- los acusados serán llevados a prisión hasta nuevo aviso!.

Estaba sentado en una esquina de aquel sucio lugar, habían sido arrestados, y después del juicio, el no sabía en dónde salió mal. Solo quería pedirle que anularán su compromiso, no matarla, admitía que no le tenía cariño pero solamente eso, no quiso matarla, fueron criados juntos y había algo de simpatía por ella.

Un guardia se acercó a él y con todo el desagrado del mundo le aviso que tenía una visita, entonces apareció un hombre alto y de cabello rojo.

Guardia: saludos al Emperador de Matma-inclino la cabeza en señal de respeto- aquí esta el criminal, con su permiso me iré.

Emperador Eryseo: vaya, vaya-hablo con asco mirando con frialdad al hombre- te vez tan patético Duque Arleyn.....no, Elrick.

Elrick: que quiere el Emperador conmigo?-alzó su vista con lentitud.

Emperador Eryseo: nada en especial solo quería ver que tan patetico te veías-respondió con burla al igual que colocaba sus manos detrás de su espalda- además vine a visitar la tumba de mi esposa.

Elrick: su esposa?-pregunto confundido poniéndose de rodillas- y eso que tiene que ver conmigo?.

Emperador Eryseo: oh vaya....!-solto una pequeña risa y su rostro se deformo por la ira- la que iba ser mi esposa, es la mujer tu has asesinado!.

El peli-rubio miro con impresión al mayor, tartamudeando empezó a acercarse tratar de levantarse, estaba seguro de que entendió mal y que lo que escuchó fue simplemente un error. Pero notando la ira y seriedad de aquellos ojos dorados, entendió que escucho bien perfectamente.

¡Renaci Para Vengarme De Esa Perr*! S2. -Hiatus-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora