Capitulo 32

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El auto se estacionó frente a la escuela, de ahí salieron Meredith Salvatore y Olivia Gómez. Ambas con una mirada llena de furia, como un mar de  llamas que serían incapaces de apagar.

Casi de inmediato las detuvieron en la entrada. Luego de pasar los detectores de metales.

Todos estaban en clases, así que Olivia llegó tarde y debían avisarle al director. Sumándole a la situación que justo ahora venía de visita la reina.

—Se que es su trabajo, pero si no se quitan de mi vista, no responderé— la voz era gentil pero sabían quién era ella, una mujer poderosa—. Ellos vienen conmigo.

Así que se dejaron entrar a ambas. Estando a la par, caminaron con la frente en alto, la expresión dura y unos ojos verdes tan filosos como una navaja.

El sonido de las notificaciones de los teléfonos de cada alumno comenzó a vibrar, dándose cuenta de la presencia de Olivia y su madre.

Cada uno de sus pasos hacía temblar el suelo bajo ellas, Guzmán salió de su salón, sonriéndole a madre e hija.

En dirección a la oficina de Benjamin. Al detenerse frente a la puerta, de uno de los salones, es la castaña quien abre con una sonrisa. A su lado se para un hombre.

—Es ella— señala a la rubia que estaba junto a White

—Muchas gracias, señorita Gómez— agradece—. Adelaida Florence Von Triesenberg, está bajo arresto por agresión agravada a la señorita Gabriela Antonette Gómez Salvatore,

—¿De de habláis?— White se levanta con rabia.

—Por favor, acompañemos.

Olivia retrocedió unos pasos junto a su madre, disfrutando la escena de Adelaida siendo arrestada por los oficiales.

—Están equivocados, sueltenme ahora— ordenó demandante la princesa.

—No se resista— pidió.

—¡DIJE QUE ME SUELTEN, INÚTILES!

—¿Que está sucediendo aquí?— Benjamín junto a una mujer pelirroja.

—Esto no puede ser...— la reina observó a su hija siendo esposada y perdiendo el control.

—La joven Von Triesenberg es parte del alumnado, no pueden arrestarla.

—Guarda silencio, Benjamín— ordena Meredith con frialdad—. Esta es una orden de arresto legítima.

—¡Tu maldita, zorra!— Adelaida

De alguna forma logro zafarse de los oficiales avalanzandosé contra Olivia. Cayendo al suelo ambas, la rubia la tomo por el pelo. Liv intento empujarla pero era inútil.

—¡ADELAIDA!— Philippe corrió hasta su hermana y con ayuda de los guardaespaldas y los oficiales lograron quitarle de encima a la rubia.

—¿Estás bien, liv?— Guzmán la levantó del suelo con Samuel del otro lado para ayudarla igualmente.

Meredith miro con furia a la princesa pero sonrió con simpleza.

—Más cargos de agresión, no será bueno— puntualiza—. Llevensela.

—¿Quien es usted?— pregunta la reina con molestia—. Suelten a mi hija.

Meredith avanza para evitar que Benjamín y la reina interfieran con el arresto de Adelaida, quien luchaba para que las esposas salieran de sus muñecas.

—Te lo advertí muchas veces, Adelaida— musita la castaña acomodándose el cabello—. No te metas conmigo, y me ignoraste, este es el resultado.

Sin más, los oficiales salieron de las instalaciones con Adelaida bajo arresto.

Queen ☆ Élite ☆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora