Queen ☆ Élite ☆

Capitulo 15

El silencio abrumaba la habitación. Después de su shock. Olivia se mantuvo sedada hasta que Meredith llegó. Justo ahora la mujer no quería hacer que su hija se volviera un poco histérica.

-¿La vas a desconectar?

-¿Que?- los ojos verdes de su madre de posan en ella-. Ah...- toma su mano-. Son las únicas personas a las cuales nunca dejare de amar- la acaricia-. Incluso si pierdo mi fortuna... Tengo fe en tu hermana- asegura-. Se que ella es fuerte y está luchando para quedarse- Olivia siente las lágrimas caer por sus mejillas.

-Mamá...

Meredith decide abrazar a su hija con fuerza.

-Todo estará bien, Liv- besa su coronilla con dulzura-. Estoy aquí y no me voy a ir.

-Nosotras tampoco- las voces de Melione y Leah aparecen súbitamente desde la entrada de la habitación.

Ese día daban de alta a la joven Gómez.

-Gracias- Liv se limpia sus lágrimas, rara vez deja que alguien más le vea llorar.

-En ese caso, muchachas- Meredith aplaude-. En lo que Olivia se cambia, vamos por un café a la cafetería abajo y volvemos.

Ambas jóvenes asienten saliendo junto a la mujer. Olivia lleva sus orbes verdes al conjunto de ropa que estaba al pie de su cama. Cierra sus ojos. En este momento no pensaba en mejorarse. O en volver a la escuela. Tenía un plan.

Ella siempre fue una persona de pocas palabras. Ya que demostraba más con acciones.

Empezó a vestirse. Sabía que algo había cambiado. Ahora, con su reciente shock. Recordaba la sensaciones que ocuparon su cuerpo al momento del accidente.

Ese pequeño encuentro con la muerte.

Tenía claro lo que debía hacer. No solo por ella. Por Gabriela. Por su madre. Incluso Melione y Leah estaban incluidas. Tal vez no volvería a las Encinas de inmediato. Pero tenía que ver un asunto.

No tenía caso ver atrás. La Olivia que a pesar de ser una perra, era algo sentimental había muerto en el momento en el que ese auto choco contra ellas.

Ahora volvía la reina.

Más fría, más controladora y más ambiciosa.

Termino de abrocharse el saco. Mirando con seriedad su reflejo distorsionado en la ventana.

¿Su primer objetivo?

White y Álvaro Gómez.

(...)

Olivia golpeaba el lapicero contra su mentón. Estaba en la oficina de Azucena. Con dos maestros. Supervisando. Exactamente estaba presentando exámenes para verificar que se puso al corriente. Y la siguiente semana también se trataría de exámenes. Para ver si era bueno dejarla pasar al siguiente grado.

Era totalmente capaz. Aunque el trato especial se debía a qué su madre vino a hablar desde el primer día. Siendo la directora del colegio la única en saber el porque de la ausencia de Gómez.

Además de la gran cantidad de dinero que Meredith ofreció con tal de que Olivia pudiera pasar el año aún sin estar en clases.

-Termine.

Azucena recibió el último examen.

-Bien, eso sería todo.

-En ese caso me retiro- alisa su falda tomando su bolso-. Buenas tardes.

La mujer quería decirle o preguntarle algo. Pero Gómez se esfumó rápidamente. Saliendo del colegio. Era sábado.

Gracias a Leah estaba enterada más o menos de la situación que ocurría en su clase. Morrigan era dos años mayor que Olivia. Prácticamente tenía la edad de Gabriela. Pero regularmente le gustaba mentir de su edad. Cómo lo hizo cuando se presentó en clase. Bajo los escalones con elegancia colocándose los lentes de sol. Leah la esperaba en su auto.