te quiero a mi lado

El Sentir Del Corazón

Llego temprano, pero aún así, seguía pensando que era una mala idea, el pensar que ella podría hacer algo como eso, ¿cuando fue la última vez que acepto hacer algo aun cuando se había negado al principio? Se preguntó. Pero ya no había escapatoria, ya estaba ahí y no tenía otra opción, más que quedarse y hacer lo mejor que podía y sabía, mientras que esperaba la llegada de su jefa, quien al llegar, se sorprendió, y al así mismo, se acercó a ella y preguntó...

Maki– ¿así que eras tu Umi?

Umi– bueno... quisiera decir que si, pero no creo que yo sea la indicada.

—lo entiendo, mamá me dijo que ya había contratado a alguien que me ayudara, sabes que lo hago por ayudarlos.

Umi– oh, ¿creí que seguirías tocando música?

—bueno, lo dejé por ahora, pero... Bien, vamos, ya vendrá el primer paciente.

Umi– haa... Esta bien, supongo que no tengo de otra.

—jeje. Eso creo.

Umi– bien, ¿quién será el primer paciente?...

Diez minutos después.

Umi– [al final Maki no me dijo quien era el paciente, ¿porque sería?] haa... Bueno, bienveni... ¿Honoka?

Honoka– ¿Umi Chan?

Umi y Honoka– ¿qué haces aquí?

Honoka– ¿yo? Bueno, Yo... ¡vine a acompañar a Yukiho! ¿Verdad Yukiho?

Yukiho– ¿Eh? Ah, Si, Así es, jeje.

—ah, entiendo. Entonces...

Maki– Kousaka Honoka!!

Honoka– ¿qué? Dísculpa Maki Chan, pero te equivocas, yo solo...

Maki– no es así, yo tengo registrado como mi primer paciente, a ti Honoka.

Honoka– ¿yo?

Maki– así es, tu.

Honoka– ¡Yukiho! Tu me dijiste que te acompañará al hospital, porque tenías una cita, ¡no yo!

Yukiho– lo siento, es que no ibas a venir si te lo decía, era mejor eso.

Honoka– arg... Bien, voy a pasar. -entra al consultorio. Bien, Aquí estoy, ¿que se supone que tienes que, "revisar"?

Maki– primero que nada, hola y el que, ¡mira como estas, Estas toda pálida! pareciera que hubieras Pasado un tiempo lejos del sol.

— sólo fue una semana, no es para tanto.

Maki– ¡Una semana! ¡Y Dices que no es para tanto!

—bueno... No es tan grave, ayer recibí un poco de sol.

Maki– puede que si, pero igual, tengo que revisar como estas.

—esta bien! [mejor me hubiera quedado en casa, en mi habitación, ¡sin tener que pasar por algo como esto!]

Maki–bien, ya te revise, y tu presión está bien, tu corazón... Bueno, parecía latir un poco más rápido de lo normal. Aunque ya se porque, pero bueno, aparte de eso, nada está mal. Sólo quiero saber, más que nada, hacerte unas pruebas para ver si no tienes nada más que yo no sepa y recomendarte que salgas más y deja de pensar en que ya todo terminó.