Pacto De Amor (Lujarcos)

Momentos

Fernanda: ¡Pedro Bajame!
Pedro: Dale, Fer! Vas bien, intenta un poco más
Cómo todos los días estaban en su clase de equitación: Pedro siempre supo llevarse bien con los caballos y le agarró la mano enseguida, Fernanda por el contrario apenas podía subirse a uno y le resultaba difícil mantenerse montada.
Marcos lleva con una mano a su caballo  y la otra alrededor de la cintura de Luján: cualquiera que los vea se da cuenta de el gran amor que se tienen
Pedro los vé llegar y sin querer suelta el caballo de Fernanda, el cual sale corriendo con la chica aún montada. La chica no podía frenarlo, si no hubiera aparecido en ése momento el entrenador podría haberse matado
Marcos: Mí amor mantenete alejada del campo
Lujan: pero yo quiero dar una vuelta en esta hermosura (tocando al caballo)
Marcos: ni lo pienses! Es muy peligroso
Lujan: pero si Fernanda que es un desastre puede porque yo no?
Marcos: Por eso mismo mantenete alejada: yo confío en vos pero hay demasiados irresponsables arriba de un caballo (mira de reojo a Pedro quien intenta calmar a Fer después del susto)
Lujan: y si me llevas con vos? Ahí no me va a pasar nada, vos sabés manejarlos
Marcos: Dije que no, Lujan!
Lujan; Pero…
Marcos: pero Nada! Mientras estés embarazada te quiero lejos de los caballos
Lujan: Estoy embarazada no enferma, Marcos!
Se da vuelta enojada para ir a sentarse y él la frena para besarla
Marcos: Solo quiero cuidarte. Haceme caso, no quiero que te pase nada malo
Lujan: Al lado tuyo no me puede pasar nada malo, mí amor.
Al escuchar eso el chico sintió una punzada en el pecho: algo le decía que ella corría peligro y a eso sumaba que todas las noches se repetía el mismo sueño el cual no se animaba a contarle a nadie: estaba acostado sin poder moverse y al intentar tocar a Lujan su mano se llenaba de sangre. Su novia decía que era el miedo lo que no lo dejaba dormir pero él sabía que había algo más.
Marcos: Hace lo que te pido, si?
Lujan: Está bien, está bien!
Lo abraza y va a sentarse mientras él se dirige al campo de entrenamiento
Fernanda: Hola
Lujan: ¡Hola! ¿Cómo estás?
Fer: un poco decepcionada; no consigo mantenerme arriba de un caballo. ¿Vos porque no montas?
Lujan; Marcos no me deja, dice que me puede pasar algo
Fernanda: pero vos querés?
Lujan: Si, obvio. Pero bueno, me voy a tener que quedar con las ganas
Fernanda: Si querés podemos ir al campo de al lado y montas sin que Marcos te vea
A Luján le brillan los ojos: en serio?
Fernanda: Si vamos.
Marcos vé que las chicas están por salir de las gradas y siente de nuevo una punzada, por lo que decide no continuar con el entrenamiento
Entrenador: Marcos la competencia es en 10 días, tenés que practicar
El chico hace oídos sordos y sale del campo
Marcos: Lujan! Donde vas?
Fernanda y Luján se miran nerviosas
Fernanda: al buffet, Lujan tenía hambre
Marcos: Bueno, yo la acompaño. Andá tranquila, Fer
Lujan: pero vos tenés que entrenar, deja que voy con Fernanda
Marcos: ya practiqué lo suficiente
Las chicas se despiden y la morena vuelve al campo para ver entrenar a Pedro
Marcos intenta besar a su novia pero esta le corre la cara
Marcos: Que te pasa?
Lujan: ¿qué me pasa? Qué me tratas como a una tarada, Marcos!
Marcos:; ¿de que hablas?
Lujan: De que no me dejas hacer ejercicio, no me dejas montar un caballo, no puedo hacer nada!
Marcos: ¡Sólo quiero cuidarte!
Lujan: Una cosa es cuidarme y otra es asfixiarme
Marcos: Entonces no ibas al buffet! Porque mentis?... Luji vos sos lo más importante que tengo, no quiero que te pase nada
Lujan: No me va a pasar nada por subirme a un caballo Marcos. Ya me subí varias veces y lo supe manejar o te olvidas?
Marcos: obvió que no! Pero tengo miedo, Luján. Por favor te lo pido déjame cuidarte, sólo quiero que estés bien
Luján agacha la cabeza y se le llenan los ojos de lágrimas, el chico la toma de la barbilla para mirarla a los ojos
Marcos: Te amo, si te pierdo me muero
Lujan: Eso no va a pasar nunca
Se besan con ganas y salen del club abrazados

7.30 a.m
Dunoff: oficialmente le doy la bienvenida a nuestro establecimiento, señor Luciano! La señorita Mónica le va a dar su uniforme y lo acompañará hasta su puesto de trabajo
Mono: Muchísimas gracias, señor.
9 a.m
Marizza; al fin termino ésa clase horrible
Pablo (abrazando a su novia por la cintura):
Carmen cada día está más loca
Laura: Vamos al bar que muero de hambre
Guido: ¡Ya pareces Lujan, mi amor!
Marizza: Hablando de eso dónde están los tortolitos?
No termina de decirlo que el rubio pasa corriendo arrastrando a la chica
Lujan: ¡Pará un poco, Marcos!
Marcos: Pero apúrate Lujan! No te voy a esperar todo el día
Entran al bar y Marcos la hace sentar en una mesa donde había un ramo de rosas y un corazón de cartulina con su nombre junto al de ella
Marcos: ¿te gusta?
Lujan: No, no me gusta
Se da vuelta y lo besa: Me encanta, mi amor. Sos divino
Él la pega más a su cuerpo y la besa con ganas: Te amo
Lujan: Te amo
Marizza se pone en el medio: Bueno bueno cortando con los besos! Vení, Lujan, vamos a pedir el desayuno
Lujan vuelve a besar a su novio y vá a la barra
Detrás de esta estaban pancho y mono atendiendo a los alumnos que ya estaban haciendo cola. Las hermanas se colan para molestar al nuevo buffetero
Lujan se acerca a la barra y le apreta la cara a mono: Hola monito lindo lindo lindo.
Mono: uuu flaca sos cargosa! Andá a hacer la cola
Lujan: no te da pena una embarazada que tiene antojos? Si no me das un café en este momento Blas va a salir negrito por tu culpa, o no bebé?(se toca el abdomen)
Mono (dándole el café con 3 medialunas): Toma, toma y ahora desaparece
Lujan vuelve a apretarle la cara y le besa la mejilla: Gracias, cobraselo a Marquitos
Vá a la mesa donde ya están los chicos
Guido estira la mano para agarrar una medialuna y Luján le pega en la mano
Pablo: porque vos ya tenés tu desayuno y nosotros tenemos que hacer fila?
Lujan; es el privilegio de ser amiga del chico del bar
Marcos: Aaaa no y el mío?
Se acerca a la barra: ¡Mono yo también tengo hambre!
Mono; pero no estás embarazado. Igual acá tengo algo para vos ( le da el ticket de Lujan)
Marcos: encima tengo que pagar yo?
Mira a su novia: ¡Sos una viva bárbara!
La chica se ríe y le tira un besito

Silvia: Hola, mi chiquita, que linda sorpresa
Lujan la abraza fuerte y la llena de besos
Silvia: Marcos no vino con vos?
Lujan (con mirada triste): no, se fue a practicar al club
Silvia le levanta el rostro: ¿pasa algo, Luji?
Lujan se larga a llorar sin consuelo
Lujan: Tengo miedo, miedo a que encuentre a una chica mejor que yo y me deje de nuevo
Silvia: pero que decís? Mi hijo te ama, chiquita. Discutieron o pasó algo?
Lujan: No, él es divino conmigo:  no me da razones para desconfiar, todo lo contrario…
Silvia: y entonces?
Lujan: Es que yo sé que soy muy poco para él: al fin de cuentas no soy más que una chica de la calle, una recogida
Silvia: Vos no sos nada de eso, Lujan. ¿Sabes quién sos vos? La persona que le sanó el corazón a Marcos, la que me devolvió las ganas de vivir: sos nuestro ángel. Así que no quiero escucharte decir esas cosas de nuevo¿,Ok?
Lujan intenta limpiarse las lágrimas: Estoy hecha una tonta sensible, no sé que me pasa
Silvia le acaricia el rostro; Estás embarazada, mi vida, Eso es lo que te pasa. Vamos a lavarnos esa carita así salimos a pasear un rato, dale
Se abrazan y entran a la casa