Eres lo que necesitaba

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-Cuando era niña...

-aun le tienes miedo a los lobos?-ella sonríe más aun al saber que la recordaba,  brillaba.

-y a los perros, pero mi amiga Ayame es del clan lobo y no tengo problemas con ella, tampoco con su abuela y su padre-el rostro de él cambio ligeramente.

-así que mi padre.

-a venido un par de veces por su madre, aunque a la gran abuela parece no agradarle eso-se rie-pero que descortés he sido! Ni le he ofrecido...

-no deseo nada...

-aunque sea un té o agua- él vuelve a mirar el lugar, nada fuera de lo común además de la dueña, la miró, esa mirada otra vez.

Debía admitir que al pasar, tanto mujeres como hombres, volteaban a verlo, por lo general después del terror era con deseo, algo que él nunca había sentido en comparación a su promiscuo padre, pero ella no lo miraba así, lo miraba con devoción, pero ¿Por qué? Incluso la había tratado mal, ni siquiera su sirviente mas fiel lo miraba así, menos a los ojos

-lo que desee amo.

Él iba a irse, pero por alguna extraña razón tomó asiento, ella volvió a sonreír y corrió a atenderlo sirviéndole té y los pasteles que le servía a su abuela, pero él no tomó nada

-son pasteles de luna pero con ingredientes sólo para consumo yokai, su abuela me enseñó a prepararlos, por favor pruebe uno amo-suplicó.

Él tomó uno y apenas lo probó, estaba muy bueno, aun cuando no lo diría

-sabe? siempre supe que lo volvería a ver y así le agradecería otra vez por salvar mi vida, amo.

-Por qué me llamas amo?

-pues...-se sonroja-así le dice el señor Jaken.

-Jaken es mi sirviente, esta obligado a llamarme amo.

-entonces, como debo llamarlo?

-todos deben llamarme señor Sesshomaru, ya que soy el daiyokai mas poderoso que hay y seré el señor de las tierras del oeste.

-entonces el señor Sesshomaru debe ser muy fuerte, yo no, solo soy buena en la costura-vuelve a sonreir-y al parecer para hacer pasteles.

Sesshomaru baja la vista y nota el plato vacío, ni se dio cuenta.

La siguiente hora Rin no paró de hablar pero él no la silenció, es más, prestó atención todo el tiempo, luego se puso de pie dando por terminada su visita

-espero tenerlo pronto por aquí señor Sesshomaru-él no contestó y se fue.