XI

175 24 2
                                    

***

2 días después recibió la visita del rey bestia, le había llevado flores y presentes.

-Toga, yo... Estoy muy agradecida pero no era necesario y no comprendo el xq de tales obsequios.

-te seré directo Rin, mi madre solo habla de ti, así que me has tenido intrigado, te he estado observando un tiempo de lejos y de cerca y la verdad quiero ahora conocerte personalmente.

-como... amigos?

-al inicio-toma su mano y besa la punta de sus dedos lo que la hace sonrojar y retirar la mano ante tal atrevimiento.

-no puedo aceptarlo.

-xq no? No estas casada ni comprometida ni tienes una relación, yo tampoco.

-no lo conozco.

-deseo que me conozcas.

-yo...yo...

-sólo piénsalo -se acerca y besa su mejilla-volveré otro día y lo hablaremos, aunque yo estoy seguro de lo que quiero-se va.

***

Ya había pasado un mes y Rin estaba de viaje con Kagome comprando más telas para el taller.

-nunca me habías pedido acompañarte.

-es que no quiero hacer este viaje sola.

-y cuál es la diferencia?

-pues, es que...-suspira y le cuenta del señor del oeste-no me siento cómoda con él.

-y xq no se lo dices?

-creí que se lo había dicho,vle dije que no deseaba una relación con nadie por ahora.

-por ahora? Ay Rin, solo le das motivos para intentar que cambies de opinión ¿Entonces temes que si venías se apareciera y te acompañara todo el camino o que se aprovechara de tu soledad y abusara de ti?- Rin la ve alarmada.

-abusar?!-Kagome ríe.

-a veces eres tan inocente. ¿A veces? Todo el tiempo.

-Kagome... Te ha gustado alguna vez un yokai o un hanyou?

-soy sacerdotisa, no me he fijado en nadie, solo en mis asuntos.

-y si conocieras a uno...

-qué sucede?

-no lo sé-suspira.

-Cuéntame.

-le contarás a los chicos?

-no lo haré.

-es posible amar a alguien aunque sea distante?, pero aun así sea cómodo estar en silencio?

-estas enamorada?!

-no...lo sé, digamos que me gusta alguien pero es un imposible.

-xq imposible?

-es...-se sonroja-un yokai.

-bueno, existen relaciones así, de allí vienen los hanyou ¿pero él te corresponde?

-no lo sé, no lo creo, yo solo soy una costurera y él...un poderoso guerrero.

-como lo conociste? Trabajaste para él?

-no exactamente.

-debes tener cuidado con el señor del oeste, podría atacar a tu demonio para no tener competencia.

-crees que sea posible?-se detiene.

-los demonios perros son territoriales, dominantes.

-pero...él es fuerte.

-dudo que al nivel de un daiyokai.

-pues...

-Rin!-la nombrada mira roja a Kagome-estás diciendo lo que creo? Te enamoraste de Sesshomaru?!

-no grites, por favor.

-cómo es posible?

-nos hemos visto un par de veces este mes de casualidad, se siente bien estar a su lado, aunque no diga nada sé que me escucha.

-te amenazó de muerte.

-se disculpó.

-solo admite que te quedaste aquí esperando volver a verlo.

-me gusta lo que hago.

-y Kohaku?

-Kohaku?-se rie-solo somos amigos, él no siente nada por mí aparte de eso. Oye, la gran abuela quiere que vaya a su palacio.

-no has ido?

-no, ¿me acompañan?

- nunca te dejaremos sola-la abraza.

Eres lo que necesitabaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora