Hasta mi último suspiro.

C a p i t u l o 11

*Lian*

Después de haber terminado de cenar y haber lavado los platos, hemos decidido que lo mejor será irnos a dormir, algunos de los amigos de Aly irán a sus casas, y otros se quedarán en casa de Alex mientras que Alex y yo dormiremos en la casa de Alyssa, por cualquier cosa.

Veo la hora y ya son las 11:48 p.m, Aly ya se ah ido a su habitación.

Estoy a punto de irme a la habitación que me ha dado para dormir pero pienso, ¿Es que acaso su madre no piensa llegar a dormir o qué?, para evitar estar pensando en eso, voy a la habitación de Aly, obviamente antes de pasar toco la puerta.

-Mi niña, ¿Puedo pasar?.

-Claro, pasa-. Me dice eso y al momento paso.

-¿Cómo te sientes?-. Digo sentándome en una silla que tiene cerca de la ventana-.¿Estás mejor que hace un rato?-. Le pregunto haciéndole entender que obviamente me preocupa el como se encuentre.

-No me siento del todo bien pero al menos ya mejor que hace un rato-. Me dice y se que hay algo que no me está diciendo.

No la voy a presionar tampoco, pero me preocupa demasiado.

-¿Y tú madre?-. Pregunto tratando de cambiar la conversación.

-¿Qué hay con ella?-. Me dice con un tono indiferente, debí suponerlo, la odia.

-¿No piensa llegar a dormir a casa o qué?

-Ahh, eso. La verdad no sé y no me importa, se la pasa tratándome de la mierda que ya lo que haga con su vida me importa muy poco. Pero no te preocupes, es normal que no llegue a dormir.

-Entiendo peque, y no voy a preguntar más, se ve que el tema no te hace bien-. Ella solo asiente.

-Lian...

-Dime Aly.

-¿Prometes nunca dejarme sola tal y como muchos han hecho?

-Te lo prometo. Eres lo que más quiero en esta vida, y si alguien se atreve a tocarte una vez más...te prometo que soy capaz de romper todo solo por tu bienestar, palmerita.

-Eres demasiado bueno como para ser amigo de alguien...como yo.

-¿Alguien como tú?, ¿A qué te refieres?

-Soy una persona rota, Li. Una persona a la que quizá no le falta tanto para convertirse en polvo.

-No Alyssa, no estás rota, solo te han lastimado demasiado y te han hecho creer que eres insuficiente. Pero no es así, eres una chica demasiado buena y que siempre, siempre ayuda a sus amigos aunque ella esté peor, eres alguien que sin saberlo llegó a mi vida en el momento adecuado y me dio la razón para seguir viviendo que necesitaba. Sigo viviendo por ti Aly, sigo viviendo para hacer todo lo que esté en mis manos para cuidarte-. Veo que las lágrimas comienzan a correr por sus mejillas-. Nunca en mi vida creí encontrarme contigo, antes de conocerte todo estaba perdido. Pero de la nada, aparece una chica despistada, amante del básquet, que ama escribir y leer, que también le encanta escuchar musica y que su sueño en la vida es ser una gran psicóloga para darme esa señal de que todavía no me podía ir de este mundo. Y créeme Aly, eres más que suficiente, podrán existir muchas chicas, pero tú, siempre serás tú, siempre tendrás eso que te haga diferente a las demás. Porqué parecerte a las demás solo te hará una chica normal, por así decirlo, sin juzgar a nadie, claro. Pero tú, jamás serás como ellas, porqué yo creo que en tú lugar, cualquier otra persona no aguantaría tanta mierda-. Toco su cara para hacer que me vea a los ojos y escuché bien lo que le voy a decir-. Eres alguien demasiado fuerte, has aguantado demasiado para la edad que tienes, has sufrido tanto y aún sigues aquí, tratando de hacer feliz a la gente que quieres. Y eso, justo eso peque, te hace distinta a las demás personas. Y que no te importe que la gente te diga "rara" o cualquier otra cosa, porqué a la gente jamás la tendrás contenta. La que debe de estar contenta con quién es, eres tú. ¿Entendiste?.

-Yo...yo no sé que decir. Es que simplemente...te amo, te amo demasiado. Y déjame decirte que tú también me salvaste, y lo has hecho desde que estás en mi vida. No sé cuánto tiempo más pueda soportar esto, tampoco se que día ya no estaré más, pero lo que si se, es que todo el tiempo que me queda...siempre te voy a agradecer todo lo que has hecho por mí.

-Yo también te amo, palmerita-. Le digo y me acerco un poco a ella para dejarle un abrazo.

ఌ︎❀ఌ︎

Estoy en la cocina cuando escucho a Aly bajar las escaleras.

-Buenos días a todosss-. Dice Alyssa entrando a la cocina-. ¿Cómo amanecieron mis chicos favoritos?

¿Buen humor?, que milagro, eh.

-Yo muy bien peque-. Respondo tomando unos platos para servir el desayuno-. ¿Y tú?

-Bien bien, bueno no, tuve una pesadilla-. Dice y baja la mirada.

-¿Quieres hablarlo?

-No, estoy bien. Mejor vamos a desayunar, muero de hambre.

-Vaaleee-. Estoy a punto de hablarle a los demás chicos para que bajen a comer pero Aly se me adelanta.

-¡¡BOLA DE FLOJOS A DESAYUNAR YA!!

-Cuanta amabilidad, eh-. Dice Alex entrando a la cocina con cara de adormilado aún.

No te rías, no te rías

-¿ALEX?, por dios, ¿qué te pasó?, Parece que te paso un burro encima-. Dice Lyssa y yo no puedo evitar reírme.

Tarde, ya te reiste.

-Ja, ja, ja. Grosera-. Dice Alex haciéndose el indignado y tomando su lugar en la mesa-. Aly, ¿Por qué tan de buen humor?, no me molesta, al contrario, me gusta cuando estás feliz.

-Ah, no es nada. Es que ayer por la noche estuve hablando con Lian y me dejó pensando bastantes cosas, es por eso.

Veo como Alex me voltea a ver y logro leer que con sus labios suelta un "gracias Lian". Yo solo asiento.

Tienes que decirle a Alyssa y a los chicos. Ya.

¿No puede ser después?

No, es más, ni se te ocurra decirle 3 horas antes porque te juro que me cambio de cerebro, idiota.

-¿Lian?-. Pregunta Alex y se que me quedé peleando con mi mente de nuevo.

-Les tengo que decir algo-. Todos, en especial Alyssa dejan de comer y me voltean a ver.

-¿Qué...pasa?, Me estoy preocupando-. Dice Aly.

-Me voy mañana-. Digo y todos quedan en silencio.

Y...Alyssa se desplomo en el piso.

Mierda.