Hasta mi último suspiro.

C a p i t u l o 27

*le da una caja de pañuelos a todos*
La necesitarán.<3

{Disfruten y no olviden
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*Lian*

Le he mandado un mensaje a Alyssa por la mañana diciéndole que necesito hablar con ella, lo más probable es que esté en clases y por eso no me haya respondido, no me preocupo.

Salgo de mis pensamientos.

-Entonces doctor...me esta diciendo que me deben de operar del corazón, ¿cierto?-. Pregunto al doctor que hace unos minutos había dicho algo respectivo a eso, pero por pensar en Aly, no lo oí bien.

-Así es muchacho. Tenemos como máximo 3 meses para realizar la operación y salvarte. ¿Quieres hacerlo?

-Yo...no lo sé doc, déjeme pensarlo-. Él asiente.

Dada por terminada la consulta salgo del consultorio y voy camino a la casa de mi padre, hace tiempo no lo veo y ni siquiera quiero hacerlo, solo voy por que mi hermana pequeña vive con él y joder...necesito verla.

Llego a su casa y toco al timbre.

-¿Quién?-. Esa voz que tanto amo en el mundo.

-Adivina-. Es todo lo que digo.

Y bastan de 5 segundos para que Zoe, mi hermana, este colgada en mi cuello como chango.

No me gusta el contacto físico pero ella, ella y Alyssa son mi todo.

-LIAAAAAAAAAAAAAAAAAN, VINISTEEEEEEEEEEEE-. Okey, esta muy emocionada.

-Así es pequeña, ¿puedo pasar?

-Clarooo. Papá está en el comedor, hablando con no sé quién por cosas del trabajo, ya sabes.

-Entiendo cariño.

Ambos vamos hacía el comedor y al verme, papá termina la llamada y habla.

-Lian.

-Señor Hans-. Hablo igual de cortante que él y se sorprende al escuchar que lo llamo por su nombre-. Necesito hablar contigo.

Zoe me voltea a ver.

-Cariño, ¿puedes ir a tu habitación?, necesito hablar con papá cosas privadas.

Ella asiente.

Zoe apenas tiene 10 años, pero no es tonta, ella sabe que algo pasa.

Aún así, acepta irse a su habitación y yo me siento del otro lado del comedor para poder hablar con Hans.

-Y dime, ¿qué te trae por aquí?. Te recuerdo que no pienso darte dinero, desde el día en que te fuiste, perdiste todo conmigo Lian.

Oh padre, que equivocado estás si piensas que quiero dinero.

-No, no quiero ni un centavo tuyo. Solo vengo a avisarte y a pedirte algunas cosas. Probablemente en unos meses yo tenga una operación en la que me harán un transplante de corazón-. Él se sorprende, pero continuo-. No, no te pido dinero para ella. Me la puedo pagar yo solo con MI dinero. Te quiero pedir que, si yo no me llegase a salvar, cuides muy bien a Zoe.

-Sabes que yo la cuido perfectamente.

-Por dios papá, regalarle cosas para compensar tu nula presencia de padre y comprarle lo que quiere cada que quiere no es cuidarla bien. Cuidarla bien es, pasar tiempo de calidad con ella, tratarla bien, no preferir el trabajo antes que a tu hija, TU HIJA. Por favor, no dejes que también abusen de ella como lo permitiste conmigo. No permitas que pase con ella, lo que paso conmigo. Por que jamás te lo perdonare, hasta luego Hans-. Me pongo de pie dejandolo con la palabra en la boca.