Hasta mi último suspiro.

C a p i t u l o 23

*Alyssa*

*Un mes después*

Ya paso un mes desde que me dieron de alta en el hospital, he estado en la etapa de recuperación. Por lo tanto no he asistido a la prepa. Lian se ha quedado todo este tiempo y se lo agradezco mucho, él toma sus clases en línea.

Mamá desde el dia que salí del hospital, no ha discutido conmigo y es un milagro sinceramente.

Hoy después de un mes, salgo de mi casa, bueno no salir, es solo el patio.

Chistosita.

Yo estoy sentada en el patio cuando pasa Vicki, mi vecina, con su bebé. Ella aun tiene 21 años, pero su novio fue un gilipollas y bueno, digamos que prácticamente solo la embarazo y pum, se fue.

Ella platicaba conmigo y no sabía que decisión tomar, si abortar a la niña, darla en adopción apenas naciera o hacerse cargo.

Yo le dije que tomara la decisión que la hiciera mas feliz.

Y al ver que eso hizo...me pongo muy feliz.

Ella se ve alegre con su bebé.

-Vicki!-. La saludo y me pongo de pie caminando hacía ella.

-Aly!-. Me devuelve el saludo.

-Veo que tuviste a la niña-. Le digo abriendo el portón para salir y verla mas de cerca.

-Así es, tus consejos me sirvieron de mucho, de verdad gracias. Mirala, ya tiene un mes y medio-. Me dice y yo volteo a ver a la bebé-. ¿Quieres cargarla?

-Oh,¿De verdad?

-Claro-. Ella me la entrega y yo la agarro cuidadosamente.

-Dios, es tan linda y pequeñita-. Digo y suelto una sonrisa despues de tanto tiempo.

Como que se me alborotaron los ovarios.

Ayno, soy muy jovencita para eso, basta.

-¿Como se llama?-. Le pregunto mientras la niña juguetea con mi dedo anular.

-Lyssa-. Responde Vicki y yo quedo en shock.

-¿Le pusiste casi mi mismo nombre?

-Claro!! Tú estuviste para mi cuando ese idiota me dejo. La niña merecía un buen nombre y Lyssa era bonito y me recordaba a ti. Asi que opte por ponerle ese.

-Es demasiado lindo Vicki. No te hubieras molestado de verdad.

-Oh, tranquila. No fue nada, yo estoy muy feliz con ello y al parecer la pequeña Lyssa tambien. ¿Recuerdas cuando daba pataditas al oír tu voz?

-Oh dios mio, si. Desde pequeña me adora. ¿Dejaras que le enseñe a jugar básquet y voley, verdad? Tiene que ser igual de buena que yo.

-Pero claro, ella será igual de buena que su madrina.

-¿Ma-madrina?

-Eso dije. Alyssa...¿aceptarías ser la madrina de mi hija? Nada me haría mas ilusión.

-POR DIOS, CLARO QUE ACEPTO.!

Vicki, la pequeña Lyssita y yo nos damos un abrazo.

Pero...ese abrazo se ve interrumpido por una persona.

-¿Alyssa?, ¿saliste?-. Escucho la voz de Lian.

Ay dios. Que no nos regañen, por favor.

-Sipi, estoy acá fuera con Vicki.

Él sale y veo como Vicki lo queda viendo de pies a cabeza.

Qué-