En El Bosque

Capítulo 26

Un enorme estruendo proveniente de la montaña se escuchó y los tres nos quedamos helados del miedo ¿qué fue eso? Pero la respuesta era muy obvia.

No podía estar pasando, o quizás sí, estábamos en el bosque, donde todo lo que menos me imaginaba y lo que más me aterraba podía suceder.

Estábamos paralizados. Al parecer Scott y Mike se habían olvidado de su estúpida pelea y estaban el estado de alerta al igual que yo.

-¿De qué huyes Eva? ¿Estás segura que quieres esconderte de mí? ¿Estás segura de que te escondes de la persona correcta?

Llevé rápidamente mis manos a mis oídos e impensablemente eso lo cayó, apagó el horrible sonido de su voz. Sabía que quería lavar mi cerebro y que también sabía que él podía leer mi mente, pero en ese momento nada me importó, tenía miedo, estaba hasta las muelas del miedo, mis piernas temblaban al igual que mi mano y nada de lo que había vivido antes se comparaba con ese momento.

Piensa en algo bonito- me recomendó Claire. Pero no era Peter Pan que necesitaba un poco de polvillo de hadas para salir volando y lamentablemente en todo lo que podía llegar a pensar era triste o malo. Todas las cosas que quería estaban lejos, en mi casa, lejos. Mi madre no estaba, mi padre, ¡Laila!

-Debemos correr-dijo Scott tomándome de la mano.

-¿Por qué haríamos eso?-replicó Mike.

-¿Qué te pasa hermano? Debemos irnos o el tipo este va a matarnos-le respondió velozmente Scott.

-No irás a ningún lado Eva, y menos con ese loco. Tiene un arma- dijo en un tono bastante desconocido para ser Michael.

-¿Mike, estás bien?- pregunté.

-Como cada vez que estás a mi lado preciosa- dijo y en ese momento, a la velocidad de un rayo, se acercó a mí y pasó un mechón de pelo detrás de mí oreja y un horrible escalofrío recorrió mi espalda.

No, no, no, no y no. Esto solamente me pasa a mí, a Eva, a nadie más.

Es lo que todos estaban pensando. Los ojos de Michael se volvieron azules nuevamente mientras que hacía una rotación con ellos.

-No tengas miedo Eva, yo voy a cuidarte- dijo el cuerpo poseído de Mike.

-Scott corre- le ordene.

Lo tomé yo de la muñeca y comencé a jalar de él, pero no nos movíamos. Como en los dibujos animados, Mike- o su cuerpo- me tenía de la ropa y no dejaba que avance. Scott o lo que quedaba de él, estaba paralizado.

-¿Dónde quieres ir?- preguntó y mi cuerpo se paralizó por completo- Por fin lo descifraste Eva-dijo lanzando una irónica risotada.

Y si señoras y señores, Charles Mocdoty había poseído el cuerpo de mi compañero. A nadie normal le podría parecer posible, pero como he dicho antes, estamos en el bosque y aquí todo es más que posible.

Se pueden imaginar tranquilamente a una Eva nerviosa y llena de miedos, porque es así mismo como me encontraba. Mi principal miedo era de morir ahí mismo. Habíamos estado a punto de salir, casi lo lográbamos, bueno quizás no, solamente habíamos logrado huir de su guarida y me había vuelto a reunir con Scott.

-¿Que pasará ahora Scott?-habló Charles- ¿Qué quieres que haga con ella?- Scott lo miro desconcertado, sabía que una palabra de más era un paso más lejos de salir del bosque- ¡Responde, joder! ¿O acaso quieres que la haga completamente mía y ya?

-Quiero que la sueltes, que no vuelvas a tocarle nunca más un pelo porque no tienes el derecho de hacerlo- dijo rápidamente y Charles le respondió con una sonrisa.