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El teléfono sonó a mitad de la madrugada. Elliott se despertó tontamente y lo contesto sin siquiera ver quién llamaba.

— ¿Bueno? ¿Elliott? Soy Amber.

Trato de aclarar su voz antes de contestar, se incorporo en la cama lentamente.

— Si Amber, ¿Que pasa? ¿Sucedió algo?

¿Timothee está contigo? No está en ninguna parte y no me contesta el teléfono. Su auto y su motocicleta están aquí, estoy muy preocupada.

Elliott se levantó de la cama de inmediato al oír aquello, trato de espabilar y una vez que lo hizo se dio cuenta que la cama a su lado estaba vacía. No tuvo que pensar durante mucho tiempo, sabía que era lo que estaba pasando.

— No está conmigo. Llamaré a Quentin, sigue tratado de contactar a Timothee.

Colgó la llamada antes de escuchar la respuesta de Amber. Llamo de inmediato a Quentin y no se sorprendió cuando esté tampoco le contestaba. Por alguna razón había empezado a enojarse y no era precisamente un enojo leve.

¿Bueno? aunque lo sabía, le dolió oír la voz de Timothee del otro lado de la llamada.

— ¿En donde están? — pregunto y no espero la respuesta — ¿Quentin está bien? ¿Tuvo otra crisis? Pásamelo, quiero hablar con el.

El, bueno, el está llorando. No creo que pueda hablar en este momento.

— No te pregunté si podía o no Timothee, ponlo al teléfono con un carajo.

Los sollozos de Quentin resonaron en la llamada, intentaba articular palabras pero no podía.

No creo que pueda colarse en los dormitorios, lo llevaré conmigo a mi departamento.

El pecho de Elliott dolió al escuchar aquello, quería decirle que trajera a Quentin de una maldita vez al dormitorio junto a el pero también quería decirle que no lo llevará a su departamento con el. Y aunque eran la maldita cosa tenían significados monumentalmente diferentes.

— Hagan lo que quieran — su voz ya estaba quebrada para cuándo dijo aquello.

¿En qué edificio estás?

— Llévalo a tu departamento, está bien.

Por favor Elliott, ¿En qué edificio estás? de mala gana Elliott se lo dijo — ¿En qué piso? Cuando te envié un mensaje abre tu ventana, ¿De acuerdo?

La llamada termino. La siguiente media hora se hizo eterna para Elliott, miraba su celular cada pocos segundos pero no había rastro de ninguno de los dos. Empezaba a preocuparse cuando su teléfono vibró, era un mensaje de Timothee con un par de palabras.

Abre la ventana.

Fue de inmediato al leer aquello, casi corrió hasta que llegó a abrir. Del otro lado en la pequeña terraza de su dormitorio había un chico jadeando.

— Hola — sonrió tontamente.

— ¿Dónde está Quentin? ¿Lo dejaste abajo?

— Te lo dije — seguía recuperando la respiración — lo deje en mi departamento, Amber cuidara de el.

— ¿Por qué no lo trajiste contigo? Timothee necesita a alguien que lo ayude, no está bien ¿Por qué lo dejaste?

Q U E E R. | Finalizada |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora