Capítulo uno
El rostro de Severus se encontraba enrojecido, tal vez por el enojo o, por la vergüenza que James Potter le había hecho pasar hace unos minutos atrás. Lily, observó con pena a su amigo, al ser ella quien lo recibía tras salir de la chimenea. James, no tardó en aparecer, segundos después del pelinegro con lo que parecía ser una sonrisa en su rostro.
—¿Por qué estás tan molesto, Severus? Lo único que dije fue la verdad—El auror soltó una risita al tiempo que se peinaba el cabello hacia atrás.
Lily miró a Severus maldecir en voz baja a James, el pelinegro de cabellos largos evitó iniciar una discusión en su presencia, subiendo directamente a la habitación en la que este dormía.
—¿Por qué simplemente no le das el divorcio? —preguntó la pelirroja algo incómoda de tocar el tema. La situación en la que ella y su amigo se encontraban junto a James era bastante rara, rayando un tanto lo incómodo.
Severus y James se habían enlazado mágicamente a los quince años, cuando eran estudiantes de Hogwarts, justamente en el tiempo que el merodeador se había enterado de los horrores que padecía Snape en su vida familiar. Las disculpas, y apoyo incondicional no se hicieron esperar pero, la única alternativa para que Severus pudiera abandonar aquella terrible casa era estando enlazado con alguien.
James no se había opuesto a la idea, y después de meses después de aquella unión había florecido el amor, uno hermoso y puro. Severus fue relativamente feliz con James, hasta que todo se arruinó cuando salieron de Hogwarts.
Si bien, en algún punto Lily se había sentido atraída por el merodeador, terminó aceptando que Severus finalmente era el dueño de los sentimientos de James, y ella no sería nadie para impedirlo, su amistad era mucho más importante que el amor de un hombre.
Pero, tal y como se mencionó, la hermosa relación entre Severus y James se había arruinado por culpa de este último, y por un solo motivo: celos.
James no se había opuesto a que Severus estudiará pociones, es más, el auror fue su soporte económico desde su casamiento, comprando lo mejor para su esposo, pero una vez y Severus se fue abriendo un poco más al mundo James simplemente explotó. Tratando de controlar las salidas, amistades y tiempo que invertía el pelinegro en sus deberes.
El pelinegro amaba a su esposo, y poco a poco se fue sometiendo a sus deseos hasta que finalmente se cansó, Severus exigió el divorcio a los diecinueve años de edad, justamente cuando el aniversario número cuatro de su boda estaba a días de celebrarse, tomando también la decisión de irse de casa.
Lastimosamente divorciarse de James no era tan fácil como sonaba, ambos se habían unido a través de un enlace mágico, el cual era de la época medieval, donde las uniones eran hasta más allá de la muerte. En este enlace el único con poder para deshacer la unión era la parte dominante, y este no era otro más que James Potter.
James no iba a permitir un divorcio. Severus sería su esposo hasta el día de su muerte. Aunque, el auror por la rabia de la separación y rotunda negación de su esposo de regresar a casa, terminó en una situación un tanto complicada.
Había dejado embarazada a Lily luego de una borrachera (he de aclarar que ambos estaban borrachos y, ningún fue consciente de lo que hicieron hasta el día siguiente) Y, los padres de ésta al enterarse de su estado, le habían exigido a James una unión marital.
Una unión que se realizó a través de los estándares civiles muggle, porque mágicamente era imposible. James, a pesar de las súplicas de la pelirroja y del mismo Severus, se negaba a dar marcha atrás sobre su divorcio y...
—Mañana regresa Harry—Murmuró el auror ignorando el tema. No necesitaba hablar con Lily de algo que no era de su incumbencia—Séptimo año, he, no puedo creer lo cerca que está.
Lily asintió, su hijo, su hijo hijo hasta la fecha, ya estaba por convertirse en un adulto, el verano ya había iniciado y solo faltaba menos de dos meses para cumpliera diecisiete años—Si ¿Me acompañaras a buscarlo?
—Tengo trabajo—Contestó con simpleza, quitándose la túnica de auror—Además, creo que es un trabajo que puedes hacer tú sola. Tratare de salir temprano, pero no te prometo nada.
Lily sintió aquellas palabras como un puñal, asiente mientras observaba a su esposo subir al segundo piso, seguramente para continuar mortificando a Severus.
—Abre—James tocó la puerta del pelinegro—Severus, abre la puerta, es una orden.
El pelinegro tembló dentro de su habitación, odiaba con todo su ser aquella última frase "Es una orden" ya que, al estar enlazado mágicamente con el Potter, la unión le obligaba a cumplir las órdenes dichas por este—¿Qué mierda quieres? ¿No estás conforme con haberme ridiculizado? ¡Te odio!
James se quitó los lentes mientras rodaba los ojos, el auror los limpió y se los colocó nuevamente—Repito, solo estaba diciendo la verdad. Soy tu marido ¿Por qué insiste en utilizar tu apellido de soltero? En tu identificación oficial, y en todos tus documentos, aparece mi apellido.
Severus se mordió los labios con fuerza—¿Tú... no te cansas, verdad? ¿Acaso no te sientes malditamente incómodo con esto? ¡Lily está aquí! ¡Y tú maldito hijo también! ¡Mierda James! tan solo piensa. Tu familia son ellos, no yo... y que todos estemos viviendo aquí, bajo este techo es repugnante.
El auror soltó una risita, acercándose al pocionista—Tú eres mío—Susurró—Además, fuiste el primero en vivir en esta casa.
Severus negó, sin poder creer en aquellas palabras—Escucha, james. Tu hiciste tu vida con Lily, tienes una familia, un hijo, les diste un nieto a tus padres ¡Déjame ser libre! Por favor...
—¿Para qué quieres ser libre? ¿No te he dado todo? ¡¿Todo?! —James Casi gritó, haciendo que Severus retrocediera levemente—Te saque de tu horrible casa, te ayude, te di mi cariño, el de mis padres ¡Incluso te daría mi propia vida! Y aun así... lo único que deseas es abandonarme.
Severus tembló—No lo entiendes, no lo estas entiendo. James, yo... también quiero mi propia familia, y... esta, esto en lo que estamos viviendo es ridículo ¿Acaso no te importa Lily? ¿No te importa Harry? ¿Lo avergonzado que debe sentirse al haber crecido en una familia tan extraña como esta?
James bufó—Lily, Lily—Repitió el auror—Lo único que parece importante es ella.
—Y-yo. n-no. —Tartamudeo el porcionista—Es mi amiga, y Merlín James, esto es ridículo ¡Hemos estado viviendo de esta forma desde que Harry nació!
—Lily, Lily, Lily—Repitió nuevamente fastidiado el auror—¿El problema es Lily, no es así? Sabes que ella no me importa, puedo deshacerme de ella ahora mismo, solo tienes que pedirlo.
Severus sintió su estómago revolverse ¿Cuántas veces había escuchado a James decir tal cosa? La forma tan despreocupada en que lo decía, le aterraba. Era como si en verdad, el auror estuviera dispuesto a deshacerse de ella—Yo... lo mejor es que me dé un baño.
Los brazos de James rodearon la cintura del pelinegro, su rostro estaba a solo centímetros de tocarse.
—Te amo—Susurro, besando ahora su cuello—te necesito a mi lado, y haré lo necesario para que te quedes ahí.
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Sumisión Forzada
FanfictionSeverus Snape, James Potter y Lily Evans se encuentran en una extraña relación marital.