AVISO Obligatorio: La serie de Fate, sus personajes y todo elemento del Nasuverse presente en lo siguiente no me pertenece. Es propiedad de Type-Moon.
La serie de The Beginning After The End, sus personajes y todos sus elementos no me pertenecen. Sus derechos a su respectivo autor.
Abrí mis ojos, examine mi entorno y parpadee algunas veces. Estaba en la cocina, me encontraba preparando un clásico desayuno americano. ¿Por qué estaba en mi casa, estábamos cayendo del acantilado? ¿Todo fue un sueño?. No podía ordenar mis pensamientos y, escuché una vos que me llamaba.
"Shirou, apúrate que los niños deben de ir a la guardería."
No podía moverme, era imposible que ella este viva. La vi morir, estuve presente cuando dio su último suspiro. Me aferré a su cadáver durante horas. ¿Sabía que estaba muerta, pero de quien más podía ser esa voz.?
Como un cervatillo recién nacido, me dirigí al lugar de procedencia de la voz mientras me apoyaba en la pared y tenía la cabeza agachada.
"¿Shirou te encuentras bien?, ¿te duele alguna parte del cuerpo?" Ella pronunció esas palabras. Mi mente sabia el resultado, pero me negué aceptarlos.
Levante la cabeza lentamente mientras se formaba un nudo en mi garganta. Oh!! ... Sigue tan hermosa como siempre. No pude resistirme y la abracé. Sentir su delgado y frágil cuerpo entre mis brazos era indescriptible. La sensación del contacto entre su cabello liso y mi piel me fascinaba. Su voz o su voz, escucharla decir nombre con preocupación generaba una sensación de culpa que era insignificante, frente a la dicha de poder escucharla.
No me resistí y comencé a jugar con su cuello.
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"Shirou!!, detente. Este no es el momento" escucharla, decir mi nombre solo me emociono más. Sentir el roce de mis labios en su cuello, el cómo se agitaba su frágil cuerpo para liberarse de mi abrazo para al final solamente ceder a mis demandas y carias. Quería más, deslice suavemente mi mano a través de su espalda y las repose en sus muslos. Pese a su condición, siguen igual de firmes como siempre. Comencé con carias suaves, el ritmo variaba dependiendo de la intensidad sus jadeos. Ver como se ruborizaba hizo que aumentara las carias en su cuello, sople en su oído y se agitó, quería más y le di un mordisco en su oreja.
"hummm" fue el gemido que soltó.
Aparte mi rostro y pude admirar como Rin desviaba la mirada y como crecia el sonrojo en sus megillas. Alce mi mano a su rostro y aparte las hebras de cabello que lo cubria para finalmente acariciar suavemente su mejilla.
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