Allison.
Por la mañana nos despertamos temprano para comenzar a prepararnos, debemos ser rápidos en lograr nuestro objetivo para llegar a tiempo a Rusia con los demás y llevar a cabo la reunión que decidirá el final de la era Rinaldi. Adrix se acomoda su chaleco antibalas mientras que yo me sujeto bien las botas negras y le lanzo una que otra mirada discreta al hombre que me ha pedido matrimonio hace unas horas....
- ¿Te gusta lo que vez? - pregunta de repente con una sonrisa ladeada que solo lo hace ver mas sexy... - Tierra llamando a Allie..- se burla
- Perdón, ¿Que? - balbuceo haciéndolo reír.
- Enfocate - dice mientras guarda sus armas en los sujetadores que lleva en las piernas - Si tienes tu cabeza en otro lado es mejor que vuelva a ti, porque no conocemos a estos tipos, no sabemos como trabajan, ni de lo que sean capaces de hacer.
- Estaría mas enfocada si no me hubieras pedido matrimonio hace un par de horas - resoplo
- ¿Te arrepientes de haber dicho que si? - junta las cejas en una expresión seria así que me pongo de pie rápido para llegar hasta el. Lo conozco tan bien que se perfectamente que justo ahora su mente esta maquinando un sin fin de historias negativas respecto a lo nuestro.
- No es eso... - lo abrazo con suavidad - bueno, si es eso... pero no lo digo de mala manera - le aseguro -Esto es algo nuevo para mi, y estoy segura de que para ti también...
- Si - responde y se aparta para tomar sus cuchillos - pero no por eso estoy dudando de mi decisión. - dice con cierto tono que me inquieta un poco. - eres la mujer que amo y quiero casarme contigo. Jamas voy a dudar de eso.
- No estoy dudando - me defiendo - Es solo que... - me muerdo el labio inferior - siento que no puedo dejar que la felicidad del momento me abrace ya que tengo el presentimiento de que algo va a suceder y lo va a arruinar.... como siempre - confieso - todo lo bueno en nuestras vidas ha durado poco, tal parece que el dolor es lo mas constante a nuestro alrededor.
- Allison debes dejar de vivir con miedo - me regaña - tienes a todo un ejercito de asesinos a tus pies - me recuerda - tu lograste que la pirámide que conocíamos se quebrantara y así poder formar otra mejor. Eres la ultima persona que debería tener miedo - asegura con firmeza
- Dante ya me ha quitado a mis padres, a Nikolai y casi a Alana con lo de Henry y su adicción.. fue difícil que saliera de ese pozo y yo.... - suspiro - solo tengo miedo de que también te aparte de mi. - confieso. Abrirme a el con mi mas grande trauma es complicado pero si no lo hago el pensara que el problema es el y no es así...
- Dante ya no te podrá quitar nada porque juntos lo vamos a matar - asegura sujetándome de los hombros- Nadir entrenó a una asesina y a una mujer fuerte. No olvides que Dante es quien debe temer porque te has convertido en su peor pesadilla, y cada segundo que pasa es tiempo que el se arrepiente de no haberle puesto mano dura al imbécil de su hijo que se creía invencible y ahora está tres metros bajo tierra. - me dice y se que tiene razón, pero no tengo idea de porque me sigo sintiendo así...
- Vale - suspiro. Obviamente aun no me he convencido del todo, pero si insisto se que será una discusión de nunca terminar y justo ahora debemos irnos.
- Debemos estar enfocados a partir del momento en que crucemos esa puerta- la señala con un leve asentamiento hacia ella. Si Nadir estuviera aquí me golpearía con la Bo de nuevo.
- Vamos - aseguro caminando con determinación hacia la salida. Ya tengo todo lo necesario y ya casi es hora de irnos; Nuestros hombres infiltrados ya nos han informado que en el palenque hay muchísima gente y que entre ellos esta Esteban. Tenemos ubicada su camioneta y tendremos que hacerle una visita ahí. - ¿El capo esta a la vista? - pregunto por medio del intercomunicador que usamos para mantener contacto con nuestros hombres.
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La Reina De La Mafia: Nacimiento del Ave Fénix
Roman d'amourLa pirámide se ha dividido, los bandos se han elegido y ahora los enemigos de la nueva generación van a arder en llamas. Allison Lane jamás imaginó todo el cambio que tomaría su vida a partir del momento en que Adrix entró a su vida. El la hizo sen...