La Reina De La Mafia: Nacimiento del Ave Fénix

37° Alphabet

Rita.

La maldita pirámide está trabajando a toda máquina, ideando planes, estrategias y métodos de escape en caso de estar acorralados por los malditos Sparrows, tenemos plan A, B,C y si es necesario tener todo el abecedario completo entonces así será, pero ninguno de esos bastardos van a conseguir lo que quieren; que es a nosotros.

Mi hija se ha ido lejos junto con los padres de Allison a quien sabe dónde y es mejor así, aunque me duela en el alma es mejor que entre menos sepamos de su paradero más a salvo estará. Respiro profundo y me aseguro de que mi cinturón este bien puesto cuando Nadir informa que estamos por aterrizar en tierras Suizas; Son inteligentes y en este lugar no hay extradición en caso de ser descubiertos por el gobierno de los Estados Unidos, cosa que no ha sucedido, por suerte para ellos y para mí, pero desde que supe de la existencia de amenazas hacia mi persona y mi familia, me di a la tarea de buscar personas que estoy segura me servirán como aliados para acabar con dichas amenazas; un ejemplo son este grupo de hackers, que en mi opinión, son los mejores en su campo, han acabado incluso con otras organizaciones rivales solo por diversión. Esa clase de personas capaces son las que necesitamos, además se de buena fuente que odian al gobierno que los vio crecer mucho más que yo.

El viaje fue demasiado largo y aún más porque tuvimos que desviarnos un par de veces en caso de haber estado en la mira de Elijah Castle y su sequito de tarados.

— ¿Segura que están aquí? — pregunta Dimitri al bajar de la avioneta. No es idiota y les di a todos los detalles sobre los Alphabet, así que saben que no es tan simple encontrarlos, por suerte... hice bien mi tarea.

— Si — respondo con firmeza antes de seguir a Nadir y a los hombres que nos acompañan de la legión hacia la base oculta fuera del radar de cualquier enemigo o persona indeseada. Los Alphabet no son los únicos con buenos hackers y la legión ha sabido y sabe mantenerse bajo las sombras.

— Dinos lo que necesites y te lo daremos — dice el mentor de Allison.

— No hace falta — le aseguro — solo necesito un chaleco antibalas, un arma y a Dimitri ya ti — digo y me detengo frente a una pared con armas estratégicamente acomodadas para que el personal de la legión pueda decidir cuál usar. Tomo dos Glock y las cargo con municiones, tomo un poco de reserva y vuelvo a girarme para mirar a los dos hombres que me observan con detenimiento — Vinimos por algo y no nos iremos sin conseguirlo — agrego — Se dónde están los Alphabet — digo con firmeza.

— ¿Cómo? — pregunta frunciendo el ceño — ni siquiera nos has pedido rastrearlos.

— Porque no funcionara — Aseguro — No son estúpidos, ni mucho menos crías de preparatoria... esa organización es de las grandes ligas y así como con los Sparrow llevo tiempo siguiéndoles la pista — confieso provocando que ambos me miren con sorpresa — Me gustaba mi trabajo — me encojo de hombros y camino hacia las computadoras recién encendidas y protegidas por uno de los hombres que llego con nosotros. — Busca la iglesia St Brond — demando al que teclea y al cabo de unos segundos una iglesia antigua aparece en la pantalla — James Oxford — digo en voz alta sin mirar a ninguno — Es el nombre de la persona que fundo la organización... ¿Cómo lo supe? — pregunto lo que seguramente ronda por sus cabezas —James solía ser un integrante de alto rango en la mesa que toma las decisiones en la D.S.F hace veinte años — informo — cuando investigue sobre la D.S.F me refiero a que de verdad investigue todo lo habido y por haber — soy clara. No me gustan las cosas a medias, y cuando me propongo algo, lo cumplo.

— ¿veinte años? — pregunta Dimitri — ¿Un anciano dirige una organización como loa Alphabet?

— No — me cruzo de brazos — el murió hace exactamente veinte años