Como yo a ella

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Es difícil para Scorpia no ver a Catra y Adora salir y dirigirse a una mesa aparentemente reservada, ella está con Perfuma y otras personas en el césped, no muy lejos. Ella quiere poner atención a la charla que sostiene con su rubia amiga, pero no puede evitar mirar fijamente a la pareja interactuando, como solía hacerlo hace dos años cuando el flechazo estaba fresco en su corazón. Perfuma llama su atención y al mismo tiempo logra encontrar el motivo de su desvío, su ceño se frunce, sus labios hacen una mueca y mira (con tristeza y enojo mal disimulado) a su amiga peliblanca. Ambas analizan al par por diferentes razones y en diferentes ángulos. Para Perfuma es claro que la charla no va bien. Scorpia considera que están charlando y eso es un empujón en una buena dirección.

-Están juntas - Le dice a Perfuma, como si no fuera obvio-No habían hecho eso desde hace meses- festeja como si quiera denotar lo extraordinario de la situación, Perfuma cree que le da más importancia de la que debería, claro que es una noticia, pero no significa nada si parece que ambas están sumamente incomodas. La chica zen no sabe de donde están saliendo estos pensamientos, aún si tienen mucho sentido, ambas chicas parecen rígidas, incomodas y al borde de una confrontación.
Perfuma niega con la cabeza en un gesto de fastidio ante la evidencia de que Scorpia aún siente algo por Catra.

-Si, bien por ellas-la rubia responde en un tono nada propio de su persona, suena casi sarcástica. Si Scorpia se da cuenta o no, no le interesa.

Reanuda su almuerzo a medias mirando entre el par y Scorpia, incluso cuando ven a Adora casi ahogarse no sé mueve, tampoco lo hace cuando Catra se va y Adora casi la persigue. Y ese casi es lo que la hace hablar del tema.

-Creo que Catra quiere que vaya tras ella- dice Perfuma completamente seria, aun esta molesta por lo que le dijo Catra el domingo, la chica no ha hecho mas que fastidiar su buen humor lo que hace que la amabilidad se ausente en su juicio.

-No creo- Scorpia dice sin pensar. Perfuma se pregunta que tan bien conoce a Catra en realidad si no puede verlo.

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Mermista encuentra a Adora con la cabeza apoyada sobre la mesa. Ella no espió su encuentro, pero vio a Catra entrar a la cafetería claramente molesta (más de lo que la había visto antes), supuso que algo salió mal y quiso averiguar cómo esta Adora, no sin antes terminar su comida obviamente.

-¿Sigues viva? - aunque su tono es neutro le divierte la situación, Adora no responde con palabras, solo un gruñido triste-¿Qué pasó?

-Se enojó- la boca de Adora está aplastada por el propio peso de su cabeza y la hace sonar chistosa.

-Aja si, la pregunta es ¿por qué? - enojada parece ser la forma básica de Catra, Mermista jamás la ha visto de otra forma que no sea enojada, fastidiada o molesta.

-No lo sé, no quiere almorzar conmigo mañana, -Adora se levanta mientras habla - dijo que almorzara con ustedes, le dije que quería almorzar con ella todos los días y ¡no me creyó! - exclama levantando las manos al cielo con indignación para luego volver a aplastarse contra la mesa.

- ¡Vamos! es el primer intento no puedes rendirte tan fácil-la situación divierte a Mermista, pero también quiere que su amiga tenga éxito. Así que se muerde la lengua.

-No me estoy rindiendo- levanta la cabeza y mira fijamente a la morena- y no es mi primer intento.

-Bien, entonces ¿Qué sigue? ¿cuál es el siguiente paso del plan? - Mermista se sienta a su lado con los brazos cruzados.

-No sé, esperaba poder hablar más con ella, pero... Se fue- adora vuelve a aplastar su rostro contra la mesa en el lado opuesto para no ver a Mermista.