ɴᴏᴠᴇᴅᴀᴅᴇs

177 21 1
                                    

Pov. James Potter.

Poco a poco, mi esposa volvía a ser ella. Cada día recordaba cosas que al inicio aseguró haber olvidado y a veces, me sorprendía con detalles que confirmaban que siempre me amó, aunque estuviésemos separados.

Cada sábado, me acompañaba a dejar un ramo de flores para Lily y muchas de esas ocasiones, era ella quien las elegía. Me agrada saber que nuestro pasado no estorba en nuestro presente y nuestro futuro, pues quiero estar con ella, siempre y cuando, se sienta cómoda a mi lado.

- Buenos días.- Saludó mi hijo, aún muy adormilado.

- Hola, Harry.- Contesté y señalé la mesa, dónde el desayuno estaba servido.- ¿Quieres desayunar?.

- Muero de hambre.- Admitió y tomó un plato.- ¿A qué hora nos vamos?.- Visitar a su madre, siempre lo ilusionaba, pie de alguna forma la sentía cerca.

- Cuando hayas terminado tu desayuno.

- ¿Y _________________?.

- Aquí estoy.- Mi esposa entró a la cocina, besó la frente de mi hijo y después se acercó a saludarme.- Amor, Harry necesita ropa nueva.- Murmuró, lo suficientemente bajo para que mi hijo no escuchara.

- ¿Que tiene de malo la que usa?.- Respondí de la misma forma.

- Creció.- Señaló las mangas y los pantalones de Harry, que en efecto, estaban mucho más arriba del sitio donde debían estar.

_________________, se sentó en una encimera cercana a mi y nos observó detenidamente, como si no nos conociera, causándome miedo. De pronto levantó la mano y la posó sobre mi hombro, sonriendo con orgullo.

- Lily, debe estar feliz de tener una familia como ustedes.- Murmuró, justo cuando Harry levantaba su plato de la mesa. Mi hijo, se acercó a abrazar a mi esposa y ella lo recibió cariñosamente, como si se tratase de un niño pequeño.

- No quiero irme, he disfrutado mucho éste verano.- Harry susurró, disfrutando del trato que mi esposa le daba.

- Te extrañaré.- Dijo ella, peinando el rebelde cabello de mi copia más joven.

- Y yo a ustedes.- Levantó la vista hacia mi y me uní al abrazo familiar.- Disfrutemos éstos últimos días.

Ya en el valle de Godric, nos acercamos a la tumba de Lily y dejamos las flores de cada semana, le hablamos de nuestros días y al final, le dimos tiempo a solas a mi hijo, él lo había pedido.

- Podemos irnos.- Dijo a nuestras espaldas, sonriente y más ligero que antes.

Nuestra siguiente visita, fue a casa de Sirius. Mi amigo disfrutaba pasar tiempo con su ahijado y sugirió ir al Londres muggle, pues seguramente encontraríamos algo divertido que hacer.

No se equivocó, entramos a algo llamado cine y vimos una película de soldados robots, bastante emocionante. No era la primera vez que entraba a uno, pero siempre me ha parecido asombroso. Comimos pizza en un restaurante, dónde el dueño conocía a Sirius y nos aseguró más de diez veces que nos llevábamos a la boca la mejor receta de toda Italia. Fue un día digno de recordar.

Todos llegamos a casa, incluído Sirius. Él y _______________, se acercaron a la sofás, pues mi esposa necesitaba descansar, aún tenía problemas para caminar, aunque por suerte mejoraba rápidamente.

- ¿Quieres subir a la cama?.- Pregunté a mi esposa, que se veía sumamente adolorida y no dejaba de masajear su pierna derecha.

- Está bien.- Sonrió falsamente, aunque dejó que la ayudara a recostarse en el sofá.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: May 22, 2022 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

James PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora