El Escritor y El Pianista.

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Mi primer día oficial de poner en práctica lo que el señor Rodgers me había estado enseñando había llegado. Limpiaba lo último que me quedaba en la mañana para comenzar ese nuevo día.

—¿Ese no es Thomas? —la voz de JiMin interrumpió las actividades de Jonathan y mías.

—¡Viene para acá! —añadió Davis con entusiasmo.

El atractivo joven entró con su imponente presencia con esa moda británica que le iba bien.

—¿Listo para la audición Brondway? —dijo sin saludar a nadie, ni a mí jefe que estaba atrás del mostrador agendando citas.

—Hola Thomas —saludó Jonathan.

—Hola —le contestó su amado con poco interés—. Más te vale impresionar a todos con Chopin —se redirigio a mí—. ¿Qué haces limpiando?

—Ah yo sólo estoy ayudando un poco —miré alarmado la escoba en mi mano—. ¿Estoy ayudando verdad? —busqué a JiMin desesperado.

—Sí, de hecho ya deberías darme eso —me quitó la escoba—. No tarda en llegar tu primer cliente.

—Supongo que debo irme. Nos vemos mañana Abney, suerte —Thomas dió media vuelta para marcharse.

—Espera, ¿Cómo que mañana? —lo hice regresar.

—Las audiciones son mañana

—No, son el sábado.

—No, son el miércoles. Me llegó una carta el domingo cuando regresé a casa donde nos avisaban que las iban a pasar para el martes porque el auditorio se iba someter a remodelaciones. Ya sabes, para la nueva generación.

Mis axilas me empezaron a sudar. Aún no estaba listo, no importaba cuanto tiempo llevaba practicando, mi mente ya se había preparado mentalmente para ese sábado. En menos de 24 horas tenía que estar listo para la audición de mi vida.

—Yo no revisé el correo.

—Debiste hacerlo. Ahora con más provecho te deseo suerte. —sonrió petulante—. Adiós —se despidió de forma general.

—Nos, nos vemos el viernes —le dijo Jonathan.

Thomas ni siquiera le respondió, sólo le levantó el mentón como una afirmación.
Se marchó y mientras yo me quedé parado ahí, totalmente helado. Me sentí perdido de una.
JiMin se acercó a mí y posó su mano con calidez sobre mi espalda.

—Olvídalo hijo —habló el señor Rodgers—. Esa es una meta muy grande para ti.

—¡Oiga, no le diga eso! —JiMin salió en mi defensa—. ¿No ve que de por sí ya está nervioso?

—¿Huh? No le decía a Yoongi. Te decía a ti —señaló a John.

—¿A mí? —se señaló también, desprevenido.

—Ese chico es mucho para ti. No te hagas eso.

—¿Qué dice? —el menor se puso a la defensiva—. Pero si Thomas es alcanzable —junto sus cejas—. Es muy alcanzable, ¿verdad que es alcanzable, Jami?

—Ah, no tengo idea.

—Es alcanzable —dijo más para sí mismo.

—Tan alcanzable como mis sueño de que te vuelvas un buen trabajador —el señor Rodgers bromeó.

—Tanto aspirar spray lo está volviendo loco, viejo. Vuelva a lo que hacía.

—¿Tú dándome ordenes?

Bag Full Of Dreams ||YoonMin||💛 EN EDICIÓN.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora