Capítulo 18 | Eventos simultáneos

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Eren citó a Zeke esa misma tarde en la hamburguesería donde T/N y el rubio se conocieron. El ojiverde con resentimiento en sus palabras le contó todo a su medio hermano, desde los largos viajes de negocios de Grisha hasta las investigaciones que había hecho para dar con su paradero.

–Ya lo sabía. Mi madre y yo sabíamos sobre Carla y sobre tí – comentó Zeke –Yo también investigué a papá hace algunos años. En realidad me alegra que muriera.

–¿Murió?– preguntó Eren intentando ocultar su sorpresa.

–Tuvo un accidente – contó el rubio –Pensé que lo sabías.

El castaño soltó una risa irónica, de alguna manera le tranquilizaba que su padre falleciera, por un momento sintió que todo el coraje hacía él se disipaba.

–¿Solo me buscaste para contarme eso? – cuestionó el rubio dándole un sorbo a su bebida.

–Sí– mintió – T/N me animó a reencontrarme contigo.

–Parece buena persona.

–Mmju– contestó desviado la mirada– Cuéntame sobre ti, necesitamos ponernos al corriente.

Mientras los dos hermanos fingían alegría al charlar el uno con el otro, T/N y Armin reían muy agusto en la oficina de recepción.

–Eres increíble– decía el rubio entre risas por la anécdota contada de la chica.

–Sí un poco– rió de vuelta– Oye Armin, ¿Puedo preguntarte algo?

–Lo que quieras.

–¿Crees que soy molesta?– preguntó con miedo por la respuesta.

El chico cambió su expresión por una más seria.

– Lo sabía– dijo desilusionada sin darle la oportunidad a su amigo de responder.

–¿Por qué crees eso?– cuestionó el chico  con una mirada tierna.

–Eren y yo discutimos hace rato, me dijo que era una infantil– comenzó a contar con la mirada baja.

–No es lo mismo que ser molesta– argumentó.

–También he escuchado a Jean decir cosas sobre mi mientas habla con mi mamá– suspiró.

–No eres una molestia– Armin tomó la mano de T/N en señal de apoyo– ¿Eren te dijo eso? – volvió al tema.

–Sí

–No creo que lo piense– intentó mostrar apoyo– Él te quiere– fingió una sonrisa.

–¿Alguna vez él te hablado de mí?

–Sí, antes me platicaba sobre lo mucho que le gustabas – dijo manteniendo la sonrisa.

–¿Y te dijo la razón por la cuál yo le gustaba? – interrogó la mujer bien atenta a la respuesta que daría el ojiazul.

Armin pensó un poco antes de hablar, Eren nunca había mencionado una buena razón para estar enamorado de la chica así que disfrazó sus pensamientos como si fueran los del castaño.

–Porque eres alguien divertida, muy linda, que en el fondo se preocupa por los demás y tienes un gran espíritu de diversión – expreso con ilusión y un poco de rubor en sus mejillas.

–¿En serio?– preguntó con brillo en sus ojos–  Él nunca me lo ha dicho. 

–Tendrá sus razones– desvió la mirada–   ¿Y a ti por qué te gusta Eren?

– Hasta hace poco era de las únicas personas que no decían que soy una molestia. Eren nunca me ha reclamado sobre las cosas que digo de más, tampoco me echa en cara o se burla cuando hago algo mal y eso me hace sentir... Bien– respondió casi en automático– Sin mencionar que me está motivando y acompañando a hacer las cosas que nunca he hecho por miedo al fracaso.

Effetto pigmalione | Eren Jaeger Donde viven las historias. Descúbrelo ahora