❦𝑂𝑢𝑟 𝑆𝑒𝑐𝑟𝑒𝑡 (KookV)❦

❦Capítulo 25.

Los días en el palacio Jeon, son pacíficos, aunque puedo oír como algunos empleados murmura cosas malas de mi y  dan miradas de desprecio, realmente los entiendo, soy alguien desconocido, es más, el próximo líder del reino que desde que tienen conciencia es su enemigo, tienen sus razón para odiarme.

Aún con todo eso me resisto a decir algo, ya que adoro compartir el día a día con mi alfa, despertar a su lado y que me cubra de besos; jamás imaginé que sentirme de esta forma, aunque al notar como me complemento con Kook, toda duda se extingue.

No mentiré, aun no puedo dejar de pensar en lo que planea mi madre, la conozco, sé que no me dejará ser feliz con tanta facilidad y eso duele, porque por esa misma razón siempre oculte mi relación con Kookie.

—Amor, ¿Estás listo para bajar a cenar?
Oigo decir a través de la puerta del baño. Termino de acomodar mi cabello y salgo se la habitación.

—Si, amor, solo me siento algo mareado.

Mi alfa al oír mi respuesta me mira con preocupación.

—¿Quieres mimos antes de bajar? —habla de forma suave mientras cierra la puerta de la habitación.

—Por favor, acaricia mi pancita por duele un poco.—le menciono mientras me recuesto en la cama.

—Como ordene mi príncipe —termina de decir para luego recostarse a mi lado y abrazarme.

Comienza por acariciar mi cabello, dejando un delicado beso en esa zona, se aleja de manera abrupta para acomodarse mejor y abrazar mi torso, finalmente  aproxima su mano a mi estómago, regalado suaves caricias mientras murmuras unas palabras que no logro oír.

Pasan muchos minutos de esa forma, por eso me sorprendo oír como alza un poco su voz.

—Eres esa luz que necesitaba mi oscuridad, cariño, puede que jamás te lo mencionara, pero antes de conocerte me sentía perdido, era el futuro rey, debía hacer lo que mis antepasados creían correcto, salí con muchos omegas guapos, pero ninguno logro llenar ese vacío que sentía, hasta que te vi, fue curioso, porque me cautivaste enseguida.

—Me paso algo similar, Jungkookie, estaba atado a seguir las reglas del reino, no desea esa vida, ya que siempre anéele la libertad, odiaba pensar en compartir mi vida con un alfa que me sometería, golpearía y utilizaría para su propio provecho, pero cuando te conocí sentí esa que tanto buscaba y por eso te agradezco, te agradezco por sacrificar todo por mi.

Continua con los cariños y yo solo sonrío, sé que la paz es algo temporal y pronto se desatara un tormenta que puede dar como finalmente algo muy trágico.