❦𝑂𝑢𝑟 𝑆𝑒𝑐𝑟𝑒𝑡 (KookV)❦

❦Capítulo 12.

Espero con ansias todo el día, hasta que finalmente noto menos actividad en el palacio, me levanto y me pongo uno de mis abrigos más grueso, ya que hace frío.

Necesito el calor de mi alfa, lo extraño.

Intento hacer el menor ruido posible, atento de que nadie se interpusiera en mi camino, con mucha precaución logro pasar todos lo guardias, al estar fuera del palacio, me dirijo enseguida al área del bosque, camino por alrededor 40 minutos y finalmente llego al lugar.

Miro atento todo y los recuerdos invaden mi mente, deseo volver a llorar lo extraño mucho, pero el miedo es más grande. No deseo dañarlo, realmente, lo amo y duele saber que sufrirá por mi culpa.

Tomo aire y con mi vista nublada por las lágrimas, me siento bajo el árbol para luego cerrar mis ojos con el objetivo de buscar una solución, pero todo llega a lo mismo.

Algo inquieta a mi lobo y unos pasos se hacen precente, no importa que sea, estoy dispuesto a defenderme; pero toda inseguridad desparecer cuando noto de quien se trata. Ese olor.

—Kookie...— Enseguida vuelvo a llorar y como si fuera algo automático, me tiro a sus brazos en busca de refugio.

—Amor, ¿Qué haces aquí? Es peligroso para ti. —La sorpresa no sé elimina de su rostro, pero, aun así, aprieta mi cuerpo contra el suyo en busca de calor.

—Yo solo necesitaba estar en un lugar que me recordara a ti, estos días han sido difíciles.

—Amor, yo estoy igual me siento inquieto y te extraño, mi lobo anhela tenerte cerca, por eso, me alegra encontrarte aquí. — Al escuchar sus palabras, una sonrisa aparece en mi rostro y siento como un suave besito es depositado en mi cabello.

Me siento tan bien a su lado, todo es un hermoso cuento, pero no todo lo es, la realidad es diferente, ahora recuerdo por que no lo quiero ver, no quiero que me mire con asco, no puede pasar, todos menos él.

—Kookie, yo lo siento. No me dejes por favor. — Comienzo a llorar y me aferro a su ropa.

—Amor, cálmate, no te dejare, ya me entere de tu compromiso, lo ideal es terminar, pero no puedo hacerlo, sé que no amas a ese chico, porque para la única persona que tienes ojos es para mí. Comprendo que es tu deber como príncipe, jamás le podre ganar a eso, pero por favor, mientras disfrutemos. No puedo dañarte, cariño.

Levanto la mirada y miro sus ojos, tan preciosos. Me sonríe con ternura, para luego unir nuestros labios.

Tiene miedo, al igual que yo, lo puedo sentir, pero realmente, no podemos alejarnos, aunque puede que en algún momento nos veremos con la obligación de hacerlo, en este instante solo me centrare de disfrutar estar a su lado,