~°●•. ( 10 ) .•●°~

55 15 0
                                    

Era la siguiente mañana, Jungkook se estiraba sobre su cama, al parecer había tenido mejor descanso, inmediatamente recordó y rosó sus labios con sus dedos, recordando aquel dulce beso que le había dado Jimin con toda la ternura posible, y eso hizo que se intensificarán las ganas de ayudarlo.

Llegó temprano a la academia y como siempre barría el lugar para ver si podía localizar al rubio, aunque suponía que todavía no se presentaría por lo evidente de sus lesiones, así que evitó el patio central y se dirigió a la biblioteca.

Minutos después llegó Taehyung con equipo de video y fotografía, le había pedido autorización para que él le apoyará en esa parte del proyecto por lo que ahora sería colaborador.

Platicaron un poco y dió instrucciones de lo que harían a continuación, ya no podía perder más más tiempo así que se pusieron a trabajar, comenzaron a hacer tomas de todos los salones con los tutores y los alumnos, y así comenzaron por las artes visuales, capturando la belleza de las pinturas y buscando transmitir los mensajes que hay en ellas, las esculturas, erguidas fuertes, con sus poliformas y conceptos, la concentración del artista al cincelar, los pisos llenos de materia que reflejaban el tiempo invertido, los bocetos en hojas arrugadas, manos llenas de arcilla por la alfarería y cerámica, los tejidos y nudos en los telares, la combinaciones de colores.

Y así tardaron la mayor parte del día en esas tomas, se había pasado su hora de comida, así que se dirigieron a la biblioteca para guardar todo, encontró una pequeña nota sobre su laptop.

》Jimin está con su tutor, salón A.

Jungkook leyó la nota y tuvo un sentimiento extraño.

-Taehyung acompáñame deja todo ahí.

Corrieron por la academia y llegaron a la oficina A que se encontraba cerrada de repente se escucharon gritos de un hombre, que eran reclamos e insultos, Jungkook interrumpió dando golpes sobre la puerta, se escuchó un fuerte silencio.

-AHORA NO, ESTOY OCUPADO.

Jungkook sabía que Jimin estaba ahí dentro y que corría peligro con ese animal, pero tenía que ser más astuto para poder rescatar a Jimin en ese momento de esa situación sin afectar a Jimin.

-Estoy comenzando con las entrevistas al personal, y la suya es una de las más importantes

-Por favor Taehyung llévalo a la biblioteca y entrevistalo, en lo que me cercioro del estado de Jimin - susurró para su compañero

Evidentemente Tae no entendía nada pero hizo completo caso a las instrucciones de Jungkook, él maestro salió de su oficina cerrando detrás de él, se encaminó a Taehyung y Jungkook para saludarlos, Tae le indicó que lo siguiera mientras Jungkook se excusó con ir al baño.

Una vez fuera de la vista los dos, Jungkook regresó a la oficina y la abrió sin dudar, estaba Jimin sentado en el suelo hecho bolita abrazando sus piernas y escondiendo su rostro entre las rodillas, cuando escuchó a Jungkook entrar se espanto apretandose más aún.

-Shh Shh, Jimin soy yo, ¿estás bien? ¿Te ha pegado?

Jimin sólo pudo aventarse a sus brazos y llorar, temblaba, Jungkook lo recibió en sus brazos e intentaba reconfortarlo.

-Shh pequeño, estoy aquí, tranquilo, vamos salgamos de aquí.

Pero cuando Jungkook quiso sacarlo de la oficina él se arrepintió, y Jungkook no entendía porque se rehusaba a salir.

-¿Qué pasa Jimin?
-El me hizo, el puede destruirme, me lo ha advertido, dice que le pertenezco, que soy y que siempre seré suyo.

-Pero que carajos, Jimin tu tienes talento no necesitas de él ni de nadie, no tengas miedo.

Jimin se separó de él y aún seguía llorando.
-Te dije que todo esto era una mierda Jungkook, no sé porqué te preocupas por mí, aléjate Jungkook porque si no te arrastraré a todo esto y es lo que menos quiero.

Jungkook lo tomó de la muñeca y lo acercó a él de nuevo, lo abrazó con mucha más fuerza.

-Algo que no sabes de mi pequeño, es que cuando me propongo algo lo cumplo, y estoy totalmente convencido y decidido en que te voy a proteger, y ayudar a que te libres de todo esto, pero necesito que confíes en mí.

Levantó el rostro del rubio aún cubierto de lágrimas, lo limpió con una sonrisa tierna en él, y lo beso con tanto cariño, disfrutaba su sabor y el calor de su piel, su textura suave y esponjosa.

-Déjame cuidarte, Jimin.

Las palabras del moreno le estrujaba el corazón, en su interior él sentía que sería imposible librarse, había estado preso bajo las garras de ese hombre por tanto tiempo, que tenía casi la seguridad de que no tenía escapatoria.

Jungkook condujo a Jimin fuera de la oficina lo acompañó al baño a lavarse la cara y se recompusieron un poco, vamos tengo una idea, lo llevó consigo a la biblioteca en donde se llevaba la supuesta entrevista de Lee Ryu.

Miren a quien encontré, sostenía a Jimin entre su mano agarrándolo por la muñeca, mientras observaba a Ryu cambiar de gesto, de uno sonriente a uno furioso.

-Ya que está Jimin aquí necesito que hagamos tomas de sus ensayos y su preparación, así como de varios pasos en específico, así que es todo por el momento con usted, puede retirarse.

Esa tarde Jimin se encerró a él salón de prácticas sólo con Jungkook y Tae, bailó y se desenvolvió libre, brincó e hizo sus pasos con exactitud, parecía que coqueteaba con la cámara pero en realidad coqueteaba con el camarógrafo, cuando Jimin bailaba era el único momento en el que se sentía hermoso, pleno y radiante, en el que se llenaba de felicidad y se sentía pleno, por eso, amaba bailar, porque podía reconstruirse y pegar aquellas partes rotas de su alma, por que todo a su alrededor desaparecía y era un encuentro consigo mismo, en el que se obsequiaba el talento del baile, del ritmo.

Jungkook estaba hipnotizado por Jimin, por un momento dejó de grabar y contemplaba a Jimin con una sonrisa enorme, cuando se dió cuenta, Jimin se acercó a él bailando con una sonrisa pícara, disfrutando de la cara de embobado que tenía el moreno.

-¿No se supone que estás grabando?, o ¿babear también es parte de tu trabajo?

Jimin se carcajeo después de su chiste e iluminó más el lugar con sus carcajadas Jungkook entregó la cámara a Taehyung y correteó a Jimin para hacerlo pagar por su broma, cuando lo tuvo al alcance lo sujetó de un brazo y lo cargó cual costal, sosteniéndolo con un brazo y con con otro haciendo cosquillas impidiendo que pudiera deshacerse de su agarre, después de carcajear un rato Jungkook soltó a Jimin y este se deslizó sobre el cuerpo del mayor quedando uno frente al otro.

-Eres tan hermoso cuando sonríes, ¿quién no podría enamorarse de tu sonrisa?

Jimin se apenó y quitó la mirada pero Jungkook lo detuvo y regresó su cara frente a él, Jungkook lo acercó aún más a su cuerpo y lo besó con cariño, perdiéndose en sus labios, saboreandolos, succionandolos y mordiendolos a su antojo, ambos sonreían entre el beso, y hubieran continuado si Taehyung no los hubiera interrumpido tomando una fotografía de ellos.

Ambos se separaron algo apenados, habían olvidado por completo a Tae y sonreían tímidamente, el estómago de Jimin gruñó y Jungkook se percató que ya era tarde y aún no habían comido nada.

-Vamos a comer ‐ le indicó a Tae y a Jimin -no acepto un no por respuesta.

Jimin dudó por un momento pero la estaba pasando tan bien que después se haría cargo de las consecuencias, así que corrió a un rincón por su mochila y salieron los 3 de la academia.

Te debo un café Donde viven las historias. Descúbrelo ahora