Nos llaman para abordar, pensé que iba a ser un vuelo comercial y pues no es un puto avión privado. Entro y es muy espacioso, lo tiene que ser para que puedan entrar 17 personas más el personal encargado del vuelo, consta de asientos tipo sofá individual, se ven bastante cómodos, opto por un asiento junto a la ventana, tengo tanto sueño que tengo miedo de quedarme dormida estando parada tomó asiento y reposo mi cabeza lo único que quiero es dormir. Mientras cada uno toma asiento escucho un carraspeo abro los ojos y es Alex que está viendo algo a mi lado, volteo y es un chico vestido de negro, apenas ve a Alex se levanta y se cambia de puesto, Alex se sienta a mi lado y frente a mí tengo a Max decido no prestar atención y cerrar mis ojos al rato siento que algo me está tocando cuando veo es Alex colocando mi cinturón.
- Ya vamos a despegar princesa, todo va a salir bien, lo hacemos todo por tu bien.
- Mm está bien. Tengo mucho sueño, así que solo presto atención al comienzo de la oración.
Siento cuando despega el avión me quita el cinturón de seguridad y me coloca una almohada y una manta encima, Max quita mis zapatos, me hago bolita y me acuesto a dormir.
- Princesa, princesa es hora de comer arriba.
- Ok ma quiero una arepa con mantequilla y queso por favor. Digo mientras tomo asiento y escucho carcajadas a juego, me asusto y abro los ojos de golpe.
- Pueden por favor no asustar a la gente así.
- Tranquila hija mía párate a comer no es arepa con mantequilla y queso, pero esperamos que este sándwich cumpla con tus requerimientos
- Que arepa que nada yo no dije nada.
- No princesa, tú no dijiste nada, fue tu estómago el que hablo primero. Y los descarados se siguen riendo... Aunque la verdad es que tengo mucha hambre, hoy salí y ni había desayunado.
- Princesa ya que eres de Venezuela que tiene de bueno tu país.
- Tienes muchas cosas como por ejemplo las playas que para mi son las mejores del mundo, el salto Ángel, el Canaima, los roques, los médanos de Coro, un monto de lugares que ni yo he llegado a conocer, pero que son espectaculares.
- Mírala Max primera vez que dice tantas cosas de una sola vez como se nota que le encanta su casa.
- Claro que me encanta esa es mi casa.
- ¿Porque te fuiste Nena si tanto te encantaba tu país?.
- La escasez de todo, inclusive las cosas más básicas como son el agua, la luz, el gas, querer un futuro mejor, nada más eso. Ah, y cabe destacar que mi hermana se comió a mi novio en ese momento, pues decidí irme así como así.
- ¡Perdón! Dice Alex impactado.
- Como escuchaste, porque tan impactado son cosas que pasan hasta en las mejores familias.
- Pero ¿cómo te sientes?, ¿cómo está tu relación con tu hermana?.
- Quieres escuchar la verdad o quieres escuchar una mentira.
- La verdad por supuesto Alex y yo siempre queremos escuchar la verdad de tu parte.
- Bueno, la verdad es que estamos muy bien, yo la perdone y seguimos nuestra vida como si nada y preguntarás por qué, y es simple, ella se enamoró, él la engaño, y la utilizo, ella lloró. Yo ya no lo quería, ella sufrió más que yo, porque tengo que seguir siendo su verdugo, si ella se castiga lo suficiente yo la amo es mi hermana.
- Princesa, tienes un corazón muy noble.
- No, Alex no es tener un corazón noble, no me dolió tanto porque yo a él no lo quería, pero si fueran ustedes otra cosa pasaría. Uy se me salió como lo devuelvo
- Repite princesa que fue lo que dijiste.
- No dije nada, solo tengo sueño eso. Me cubro con la manta
- Te escuchamos cariño, esperaremos todo el tiempo que desees para que lo digas fuerte y claro si ningún arrepentimiento.
- ¡Yo no tengo nada que decir!
- Está bien cariño, no pasa nada sal de allí que te vas a asfixiar.
- Y hablando de todo un poco aún no me han dicho por qué vamos a Venezuela.
- Bueno, princesa, estamos interesados en unos terrenos que están en venta y lo tenemos que ver nosotros mismos.
- ¿Terrenos? Para qué quieren unos terrenos allí.
- Es una larga historia princesa duerme primero más tarde te lo contamos.
Observó a Max y Alex y no puedo evitar recordar las fantasías que he tenido con esos labios sobre mí, mi cuerpo se mueve solo y aprieto mis muslos, los pensamientos hacen que me caliente de 0º a 100º en un solo momento. De repente siento una caricia que va desde mi estómago dirección a mi muslo de ida y vuelta. Tiemblo del deseo que recorre mi cuerpo, pero al mismo tiempo tengo los nervios de punta porque tenemos tanta gente alrededor haciendo que la adrenalina aumente y todo se intensifique.
- Nena te lo puedo dar, pero no puedes hacer ruido de ningún tipo, cariño no queremos que nos escuchen ¿verdad?
Su voz en susurro cerca de mi oreja me enciende a otros niveles, solo necesito que esa mano se mueva hacia mi coño, un solo toque es todo lo que necesito, estoy tan estimulada. Levanto mi rostro y observó a Max en el asiento del frente con su mirada de follame, los necesito dentro de mí, pero aún conservo un poco de racionalidad y sé que no es el momento y mucho menos el lugar.
La mano de Alex por fin llega al sitio más esperado, desabrocha mi pantalón de manera experta, toca mi coño, he introduce dos dedos de un solo golpe y no puedo evitar soltar un gemido, me besa para que no lo escuchen las personas alrededor.
Estás tan húmeda, cariño, no necesitas de ningún juego previo. Acelera a un ritmo constante, ya casi estoy allí, pero no llegó y me estoy frustrando cada minuto más.
- Sé lo que necesitas nena confía en mí. Y sin más preámbulo comienza a masajear la entrada de mi culo y solo falta un poco más introduce un dedo, he inmediatamente me vengo como una bomba en explosión mete su lengua hasta mi garganta para que no pueda hacer ni un solo ruido.
- Jamás pensé que te gustara tanto el exhibicionismo princesa. No puedo contestarle porque aún sigo ida en ese orgasmo tan potente. Mi mirada se dirige a la entrepierna de Max y Alex y tienen carpas gigantes. Carraspeó y decido hacerme la loca, me arreglo el pantalón, me levanto y voy directo al baño a limpiarme, no puedo quedarme el resto del viaje con restos de mi orgasmo. Pasó la cortina cuando abro la puerta alguien me empuja y se mete conmigo en el baño me asusto y cuando volteo veo a Max
- Me toca a mi princesa.
¡Dios! Porque tienen que ser dos.
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Security Guardian por que amar a dos no es pecado
RomansaSinopsis Alexander y Máximiliano dos hombres fuertes, posesivos hermanos, cuidan lo que consideran suyo hasta la muerte dueños de una de las empresas de seguridad más grande del mundo. Son fieles el uno al otro, pero que pasa cuando a la ecuación...