Capítulo 37

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. •. No Seas Así. •.
.~❄︎~.

———-México-———


Hoy había cometido muchos errores: uno de ellos, aunque no tan importante, fue escoger una mesa de seis lugares. Me lleva.
Mi madre ha invitado a Italia, a Rusia y a Bielo a sentarse con nosotros, Alemania no se molestó en contrariarla, hasta le arrimó la silla a Rusia.

Ósea, también lo hizo con Bielo e Italia, pero...

—No era necesario— soltó Rusia algo incomodo.

—No me cuesta nada—Ale le dio un par de palmadas. Joder, si que actuaba bien: Ya bésense hijos de su madre.

Italia se sentó entre mi madre y Rusia—. Que amable Ale, eres muy suertudo México— me tragué la sopa para no escupirla y sonreí sin decir nada.

Ale tomó su asiento a mi lado mientras los recién llegados ordenaban.

—Ay, que linda situación—comentó mi madre—. Hace mucho que no convivía con tantos colegas.

Arquee las cejas.

—Tienes mas de quince hijos, madre—le recordé.

— Pero son mis hijos.

— Y prácticamente también colegas.

— No hijo—negó quitándome el mechón de pelo que tenía en la frente—Es diferente.

— ¿Cómo va a ser diferente?

— Este...Mex, España...— Ale nos llamó y giramos a el—. Hay presentes—dijo refiriéndose a Rusia, Italia y a Bielo.

Rusia estaba haciendo lo imposible por no soltarse a reír, lo noté en sus ojos. Luego recuerdo lo que hicimos hace un rato y bajo la mirada; mi madre y yo pedimos disculpas. En la comida todos hablaban menos Rusia y yo, que nos limitábamos a comer y tratar de no cruzar miradas. Lo último era difícil mientras mas lo intentaba.

—Oye Ru— Ale le llamó—. No me has hablado más de aquella mujer.

¿Qué bromas?; ¿Cuál mujer?

Miré a Rusia cuanto antes, este solo se quedó sin nada que decir, todos guardamos silencio.

—¿Cuál mujer? —devolvió la pregunta. Parecía no saber nada.

—¿Cómo que cual?, Hablo de la secretaria del Kremlin—soltó Ale seguro. Lo raro es que si se escuchaba sincero.

—Ah—Rusia pareció recordar, esquivó mi mirada—. Somos amigos.

Me va a dar un tic en el ojo.

—¿Tienes otra amiga?—preguntó Italia con voz herida.

Arrugué la frente y tomé mi jugo de arándanos.

El y Yo ||R u s m e x||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora