34. Elliot Júpiter, ataca

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Mingi a pesar de sentirse derrotado y solo, se quedó en el lugar secreto donde se escondian la gente de la organizacion. Estaba agradecido con Park, por no haber sido lanzado a la calle de una merecida patada por todos los errores que cometió.

Ultimamente el poderío que Park habia conseguido, absorbiendo las organizaciones de Troy y Oso negro, estaban menguandose. La policia habia logrado retener varias propiedades y su vigilancia causaba que no se pudiera traer mercancia de manera segura, por lo que esta temporada, se habian mantenido bajo las sombras, sobreviviendo con las ganancias del casino de Oso Negro y el trafico de estupefacientes de Kills.

Ademas, el líder de esta organizacion, tampoco estaba en las mejores condiciones.

Mingi ingresó a la habitacion de Park, despues de varios toquidos insistentes y a falta de respuesta, se vió obligado a abrir la puerta.

Vió a Park sentado en uno de los sofás, sujetandose de los cabellos, mientras su vista se mantenia en el suelo. Ademas habian dos libros tirados en el suelo, incluido su arma y algunos cristales de botella hecho pedazos.

No sabia que pasaba, pero Park no estaba en sus cabales y eso le preocupó.

—Park, ¿puedes oirme?— Se acercó a una distancia prudente. Insistió un par de veces mas, antes de agitarlo de los hombros.

—Mingi... voy a enloquecer, no soporto mas esto... anda, ve por algo que me deje inconciente o trae un medico, ¡Date prisa!— Gritó.

Song no compredía a Park, incluso su tono de voz desvariaba, sus manos le temblaban y sus ojos estaban dilatados. Era cierto que a veces lo veia hablar solo o enfadarse repentinamente, pero nada se comparaba con lo que le ocurría en esos momentos. Asi que Mingi salió corriendo para buscar un medico.

—¡Yunho, ve con Park y no permitas que haga algo peligroso!— Le pide a Yunho, quien debido a la seriedad no hace bromas y va a cumplir la orden.

Yunho ingresa rapido cuando oye vidrios quebarse y los gritos alterados de Park. Actúa rapido, sujeta e inmoviliza a Park por la espalda, apenas puede creer que Park haya roto los vidrios de la ventana con sus manos desnudas que ahora sangran por los cortes.

—¡Debes reaccionar, Park Seonghwa!— Trata de hacerlo volver en si.

—N-no puedo...— Aun lucha por soltarse del agarre. —¡¡Mata a Marte, esta volviéndome loco!!— Pide en su descontrol.

Sus alaridos, atraen a otros mas que ayudan a inmovilizar a Park, que parece un demente sin control.

En minutos, Mingi llega con un medico que antes no puede hacer otra cosa que sedarlo. Y mientras la injeccion hace efecto, el medico revisa su pulso y pupilas, pero Park tiene su vista a su otro yo, paseando alrededor y burlandose de su descontrol.





Horas mas tarde, Park abre los ojos, su cuerpo se siente relajado y sus latidos son normales, aun con los leves efectos del sedante, observa su alrededor. Jongho y Yunho estan ahi, al parecer vigilandolo por si tiene otra crisis.

—¡Hyung!, estas despierto— Jongho se acerca mas y lo ayuda a recostarse sobre la cabecera.

—¿Qué fue lo que te ocurrió?— Yunho desde su sitio, pregunta y sus ojos reflejan preocupacion.

—No soy médico, el que vino si y seguro ya les dijo— Responde Park, su voz es baja y ronca.

—Hyung, el medico dijo que tuviste una especie de ataque de nervios, debido a la acumulacion de ansiedad y tu presion se elevó tanto, que fue una suerte que no pasara algo peor— Jongho le explica.

—Supongo que fue eso. Aunque realmente necesito un loquero— Hace una mueca por la ironía.

—No digas eso hyung, procura descansar, te traeré algo de comer— Jongho a prisa sale por alimento.

EL SECRETO DE MARTE | SeongJoongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora