DRAAKON |JJK| (#1)

Capitulo 20: ¿Todo está bien? Michael dice que si.

Susan miró por la ventana. Afuera estaba nublado y la lluvia caía con fuerza, creando un barrial increíble gracias a que se encontraban en una parte de las montañas.

El viento era fuerte y azotaba con fuerza a los árboles, moviéndolos.

"Probablemente caerá un árbol pronto en algún lugar.", pensó.

—¿Estás planeando como deshacerte de nosotros? —Taehyung preguntó inteligentemente, mirándola con ojos astutos y una sonrisa traviesa.

Susan todavía no podía creer que ese hombre, no, ese chico aún no era un adulto y que en edad humana probablemente tendría cerca de dieciséis años.

—Nunca he hecho algo como eso antes. —ella se defendió, pasando a mirarlo. —Eres Taehyung, ¿No? —dijo, tratando de pronunciar el nombre del draakoniano de la misma manera en que había oído a los otros decirlo.

Una sonrisa llena de satisfacción curvo los labios de Taehyung. —Sí.

—¿Y él otro es Jimin? ¿Tu hermano?

—Sí, hembra... Suh-sahn. —Taehyung se corrigió rápidamente, sabiendo que a ella le molestaba que la llamasen hembra. —Es mi gemelo.

—¿Gemelo? Ustedes no se parecen.

—Somo un caso especial. Realmente buenos y atractivos, además de llamativos para cualquier hembra.

—Gemelos no idénticos, algo normal aquí en la tierra. —Susan comentó, omitiendo las ultimas palabras de Taehyung.

Ella entrecerró los ojos. Taehyung parecía estar demasiado lleno de sí mismo, él tipo arrogante y descarado que sabe que es atractivo, un poco similar a Jungkook en eso. Pero completamente diferente a Jimin, que parecía ser tímido y dulce.

¿A quién le importaba si era alto, de piel canela y se veía lo suficientemente bueno como para estar mirándolo por horas sin descanso? ¡Había leído más que una buena cantidad de novelas románticas en la biblioteca para saber cómo eran realmente! Los chicos como Taehyung eran un dolor de cabeza. Susan no quería lidiar con eso, no en ese momento y probablemente no en el futuro.

—Bueno, Taehyung. —ella dijo. —Tú y tus compañeros pueden salir de mi casa ahora. —espetó, levantándose de su lugar junto a la ventana y caminando en dirección a la cocina.

—Hay una tormenta afuera. —Taehyung señaló. —Y somos extraños en este planeta, no sabemos si será peligroso para nosotros si salimos.

Susan le dirigió una sonrisa fría y se encogió de hombros.

—No es mi problema. —respondió con voz dulce.

Taehyung le dio una mirada analítica. —¿Nos echarías a mi hermano, al doctor SeokJin y a mí en una tormenta? ¿Dónde caía agua que estuvo apunto de matarte? —preguntó con curiosidad en su voz.

—En un instante. —mintió Susan, colocando sus manos en sus caderas y tratando de ocultar que comenzaba a sentirse como una mala persona por actuar tan a la defensiva con ellos.

¡Pero ella tenía sus razones! Ellos eran extraños a los que nunca había visto, no estaba segura de si decían la verdad, Jungkook estaba inconsciente todavía y Hoseok todavía no llegaba. Además, ellos habían irrumpido en su casa y Coffe, el kroktal, se encontraba alerta a cada movimiento de los tres alienígenas que habían llegado, como si desconfiase de ellos.

¡Y eso solo podía significar que no debía dejarse engañar por sus caras bonitas y palabras amables!

—No los invité a pasar. —Susan declaró. —No los conozco en lo más mínimo. Y Hoseok me advirtió sobre ustedes antes de irse, ¡Así que no puedo confiar tan fácil!