Capitulo tres

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Sophia

Salí de la universidad después de una gran jornada de clases, es algo agotador pero extremadamente necesario. Llego al estacionamiento, y me subo a mi auto para dirigirme a casa. Le prometí a Livana que la llevaría hoy a conocer al lobito en el busque, claro que no estoy segura de que aparezca hoy pero no pierdo nada con intentarlo.

—Llegue a casa y después de estacionarme, entre.

—Hola, nana —salude dejando mi bolso en el mueble —¿donde esta, Livana?

—Se está vistiendo —asenti y fui a verla a su habitación. Al verla, note que estaba muy bien vestida

Siempre le ha gustado verse bien para cada ocasión, aunque solo tiene cuatro años le encanta verse hermosa. Le puse un gorrito y unos botines blancos que le combinaban a la perfección con el vestido rosado que ella eligio.

—Vamos, mami —dijo tomando mi mano y jalandome fuera de la habitación

—Un momento, cariño —bese su frente —deja que me duche, me cambie y nos vamos —asintió —anda y dile a nana que nos prepare algo de comer para llevar —volvió a asentir sonriente y salió de la habitacion

Me fui a duchar y no tarde más de cinco minutos, salí rápidamente y me vestí, decidí usar un outfit deportivo. Unos jeans rasgados, un crop top rosado y unas deportivas Nike blancas, amarre mi cabello en una coleta y salí de mi habitación hacia la cocina. Llegue y vi una cesta muy linda encima de la mesa del comedor.

—Ya está la comida, mami —dijo Livana con una gran sonrisa

—Entonces vámonos, preciosa —tome su mano, la cesta y salimos de la casa.

Livana salió prácticamente corriendo de la casa hacia el auto, mientras yo la seguía. Abrí la puerta trasera, dejé la cesta y ayudé a Livana a subirse en el lado del copiloto colocándole el cinturón de seguridad. Después me dirigí al bosque, con la esperanza de encontrar al lobo aya.

Donovan

Llevábamos más de media hora esperando, y nada que mi mate llegaba. Me estaba desesperando, y eso provocaba que miles de ideas pasaran por mi cabeza, ninguna buena. ¿Y si no viene? ¿Y si la asuste? ¿Y si no vuelve nunca?

—¿Hasta cuándo vamos a esperar? —preguntó Emilia a mi lado

Emilia ya está cansada de esperar, es una chica impaciente, varias veces me dijo que deberíamos regresar a la manada por que ella no vendría. Pero yo quería volver a verla, yo sabía que ella iba a venir... bueno ya no estaba tan seguro, pero algo dentro de mi me dice que si me voy, no volveré a verla nunca.

Después de unos minutos por fin escuché el motor de un auto acercándose, me transforme en lobo y me asomé a ver si era ella la que había llegado, efectivamente era ella. Bajo de su auto y se veía tan hermosa como la última vez.

Comencé a acercarme a ella con cautela, no quiero asustarla. Comencé a ronronear para que me escuchara, ella volteo y me observo con una sonrisa. En la ventana del auto observe a una niña, que me miraba con una gran sonrisa y sus ojos bien abierto en asombro.

—Hola —hablo nerviosa —hoy traje a alguien para que te conociera —incline un poco la cabeza —no estaba segura si te vería hoy, pero veo que si.

Abrió la otra puerta y ayudo a bajar a la niña. ¿Será la hermana?, no se parecen mucho, ¿quién será?. La niña se escondió detrás de mi mate mientras ella tenía la puerta abierta.

—Ella es Livana —señaló a la niña —es mi hija

Las observe a las dos, tenían rasgos parecidos pero no muchos, por lo que supuse que se parecía a su papa. Me puse triste, ¿Como es posible que tenga una hija?. Yo debía ser el primer y único hombre con el que tendría que tener hijos, ella ya tiene una vida hecha, ya tiene familia.

—Hey... —intento acercarse pero se detuvo —¿Que pasa, lobito?

Me sentía muy mal, no quería aceptar que alguien más había estado con mi mate, que ella es de alguien más, ¿esa niña será hija del idiota con la que la vi ayer?.

—Mami, el lobito está triste —dijo la niña haciendo pucheros y apunto de llorar.

—No llores nena, lobito solo está... —se quedo callada, no sabia que decirle a la niña. Me acerqué a ella y acaricie su mano con mi nariz —lobito solo te quería saludar —dijo con una sonrisa nerviosa

—Es un lobito muy bonito —dijo felizmente la niña, aunque no sea mi hija, la voy a querer como si lo fuera. Solo espero que el padre no sea pareja de mi mate —te quiero mucho, lobito —me abrazo tomándome por sorpresa

—No, nena, no hagas eso... —tenía miedo de que le hiciera algo a la niña, se notaba

Me pegué aún más a la niña, y me acoste al lado de las dos, después de un rato se relajaron. Sacaron una cesta del carro llena de comida, se sentaron a mi lado y comenzaron a comer. Paso bastante tiempo, conversaban de todo tipo de cosas, y yo solo miraba a mi hermosa mate y a la princesa sonreír.

Después de unas horas, se levantaron y comenzaron a recoger todo. Ya se tenían que ir, y eso me ponía triste, no quería alejarme del amor de mi vida. Aunque no quería alejarme de ellas, las tenía que dejar ir. Se subieron al auto después de despedirse de mi, asegurando que nos volverían a verme de nuevo.

—Voy a seguirlas —me informo Emilia, yo asenti y ella se transformó

Regrese a la manada, estaba muy cansado. Me duche, comí algo y después me fui a mi habitación a descansar. Me acosté, no podía dejar de pensar en mi mate, en su hermosa sonrisa, en la hermosa tarde que pasamos hoy y con ese pensamiento en mente me deje llevar por el sueño. Me quedé dormido

Sophia:

Livana se quedó dormida de camino, la llevé a su habitación acostando la en su cama. Me fui a la mía, me duche después me acosté a dormir, estaba realmente agotada. Mañana volvería a ir a verlo, de eso estaba segura

La pregunta era, ¿por qué me sentía tan segura con ese lobo? ¿Por qué sentía todo esto?

Y ese fue mi último pensamiento antes de caer rendida en los brazos de morfeo.

——————《♧》———————

¡hola coca colas!

Nah, no es cierto

¡Hi, mys lovers! ¿Como están?
¿Les esta gustando esta historia?, espero que si

Bueno, quiero avisar que las próximas actualizaciones serán los días lunes, miércoles y sábados.

Posiblemente actualice algún otro día, pero por ahora solo esos días. Estaré avisando

Espero que compartan mi historia y dejen su ⭐

Y como no tengo nada que decir, me despido con una sita de Albert Einstein

"Locura, es hacer la misma cosa una y otra vez, esperando obtener diferentes resultados"

Besos y abrazos de colores🌈

Posdt: Eh notado, que mis notas se han vuelto más largas que de costumbre. ¿No lo creen?

Mi mate, mi lunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora