Capitulo 14

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Haberle contado todo a mi hermana trajo buenas y malas consecuencias. Una es que se alarmó mucho cuando se enteró de cosas que oculté y para mala suerte, mi madre logró escuchar aquello. Ambas me escucharon atentas y aunque se molestaron por tener tan poco confianza en mi familia, no me juzgaron y al día siguiente, me programaron una cita con una psicóloga que mi hermana conocía.

El insomnio hizo de las suyas como todas las noches durante estos días, pero a diferencia de otras veces, ahora me sentía inquieta por el asunto de la psicóloga.
Sé que mi situación no era tan grave, pero si me perjudicaba, además de que no soy buena expresando mis sentimientos y no sabía que tan malo sería eso con mi cita.

La mañana llegó rápido y me levanté para ayudar a mamá a preparar el desayuno. Saludé a papá quien no había podido ver el día de mi llegada debido a que ya estaba encerrada en la habitación intentando dormir.

Me alegré un poco cuando mi madre me dijo que no le diría nada a papá y que fuera yo quien se lo dijera cuando estuviera lista.
Ella también se ofreció a acompañarme a la consulta, ya que mi hermana tenía un examen importante que hacer y no iba poder ir.

Al llegar al consultorio, la doctora que me atendió fué amable y después de presentarnos y decirme algunas cosas como que dependiendo la magnitud de mi situación, esto me llevaría poco o mucho tiempo hasta que finalmente pudiera superar todo. Así, fué como empezó a preguntar aquello que me atormentaba y que fuera lo más honesta, pues es mportante para que pudiera ayudarme.

Doy una largo suspiro y comienzo a contarle todo desde el principio.

Desde el día en que lo conocí y como se desarrolló la relación a lo largo de los años, le dije sobre aquellos momentos felices que compartimos juntos al principio y el infierno que se volvió después, el desinterés, sus malas palabras hacía mí, sus gritos con ofensas y poco después los golpes.

Lo que sufrí por no decirle a nadie sobre lo que pasaba por miedo, lo inútil que me sentía por no poder hacer nada y lo cobarde que fuí por no escapar de ese infierno que se había vuelto aquel lugar a su lado que consideraba seguro.

Cómo el tiempo cambió a aquella persona que fué importante para mí durante cuatro largos años y como también, el tiempo me hizo recapacitar de lo mal que estaba y que no tenía porque seguir sufriendo. Que ese no era mi lugar y que merecía algo mejor.

Así, le conté como con valor terminé con todo y él, más cansado que yo con todo esta “relación” se alejó de mí.

Sin embargo, eso solo era el principio para la interminable soledad que comencé a vivir.

Sabía que no tenía que soportar eso pero eso no me ayudaba con aquel vacío que sentía. Mi mente me atormentaba con todo los recuerdos y sentimientos que tuve en su momento, y lo mucho que extrañaba esa sensación de felicidad.

Mis lágrimas no pararon de salir durante todo el tiempo que estuve hablando y ella me escuchaba atentamente sin interrumpir. Poco a poco sentí como aquel nudo en mi pecho se iba disolviendo y me hizo sentir algo liberador.

—¿Hubo algo o alguien que te motivó a dar el primer paso para salir de la depresión?

Pensé y entonces recordé aquella noche, esa dónde estaba Iván en su balcón llorando al cielo mientras fumaba un cigarro, dónde pensé que no solo yo estaba sufriendo y aquel sentimiento de empatía que compartí con él, por saber lo que es llorar a media noche.

Aquel recuerdo me invadió y sonrío.

—Sí... Hay alguien que es importante para mí en este proceso— respondo con una sonrisa.

La doctora me extendió unos pañuelos y me sequé las lágrimas.

—Ya veo, esa sonrisa solo me dice que es alguien que te trae felicidad ¿no es así?— asiento y ella sonríe— Bueno, si está persona te está aportando cosas buenas, espero que se mantenga a tu lado haciéndote sonreír de nuevo ¿no crees?

—Sí... Él es una gran persona; amable y muy caballeroso.

—Eso es interesante, deberás contarme eso en la próxima sesión que tengamos.

Asiento y ella me habla sobre que tan grave es mi problema. Me receta algunos medicamentos para el estrés y unos antidepresivos que considera que no son tan importantes pero si necesarios, así como en que momento debería comenzar a tomarlos.

Me despido de ella y salgo del consultorio con un sentimiento ligero.
Como si una carga que no sabía que estaba allí se hubiera ido con todo lo que dije.

[📈]

Todos deberíamos tener el apoyo que los amigos y familia de Susan.
Aún si no es así, recuerden que la depresión es un tema importante y que es la causa de miles de perdidas en el mundo.
Recuerden que nunca están sol@s y que buscar ayuda siempre es lo mejor.

Cuídense y besitos!

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