Fuerza del corazón (Genya x Malereader, Maleoc)

24. Apuesta A La Séptima Postura.

El sonido de la cascada era quien opacaba los jadeos de Kessho, el cual se encontraba con la parte superior de cuerpo expuesto, al igual que su maestro, el cual solo tenía una de las espadas de madera apoyada en el suelo, con la cual se estaba apoyando de manera fácil para el.

– Bueno, sabía que te tomaría algo de tiempo dominar por completo la Séptima postura, al igual que el arte esotérico y la novena postura, pero tu mejora se nota cada día.

Dijo con una sonrisa, extendiendo su mano para poder ayudar al menor a ponerse de pie.

Kessho solo limpio el sudor de su frente, mirando a mayor con algo de duda.

– Señor Rengoku, cuál es el plan una vez logre dominar las nueve posturas de la respiración de la flama?.

Kessho dijo, solo manteniendo un silencio cómodo.

– Al ser mi sucesor, es normal que tengamos misiones juntos, así que puede que tengamos nuestra primera misión juntos en poco tiempo, pero para eso, tienes que dominar a la perfección las posturas que aún no puedes hacer bien, recuerda que la Séptima Postura y la novena son posturas, sumamente poderosas, así que la precisión de cada una debe de ser exacta por no decir perfecta a la hora de atacar.

Explicó con su típico tono de voz.

Kessho sólo miraba la katana que se encontraba sobre una roca.

– No te sientas de esa manera, se que puede ser difícil, pero lo conseguirás, confío en ti.

...

La luz de la luna ilumina distintos puntos del bosque, pero aunque para algunos era una hermosa vista, para ellos dos era una situación de vida y muerte para terminar la primera misión que tendrían juntos.

Tanto Kessho como Genya, tenían frente a ellos a un demonio, uno con apariencia de adolescente y el otro con apariencia de niño, además de que ninguno poseía un número en los ojos, por lo que era obvio no eran parte de las lunas demoníacas, si no un par de demonios de alto rango.

– Solo tenemos poco tiempo antes de que alguno de los aldeanos secuestrados pierda la vida, así que debemos de trabajar rápido.

Pensó Kessho mientras veía al demonio, era una situación bastante difícil, y sentía como él viento chocaba con su cuerpo.

Pero para los demonios la situación era distinta, mientras uno tenía la mayor calma, el otro tenía miedo por tener a dos cazadores frente a él.

– Jajaja, solo mandaron a dos cazadores por nosotros, que patético me resulta esta estúpida situación, y pensar que nos tomamos la libertad de poder tomar y asesinar a la mayor parte de ese pueblo, solo para que dos cazadores de bajo rango vinieran, jajaja, que idiotez.

Dijo el mayor de los demonios, sonriendo con arrogancia, pero al momento de ver a su rival, este cambio su expresión por una de asombro y molestia, Kessho sólo hizo el agarre más fuerte, ya que no le gustó mucho que el demonio cambiará su expresión facial justo a la hora de verlo.

Incluso el demonio temeroso noto ese cambio, pero tenía frente a él a Genya, el cual lo miraba como si nada.

– O-oye Akeli, e-estas B-bien?.

Pronunció, solo para detenerse al escuchar ver como Genya extendía su mano.

– Si yo fuera tu, no haría eso.

Dijo, pero ambos sólo escucharon el grito del demonio mayor.

–!! PORQUE MIERDA ERES IDÉNTICO A ESE INFELIZ? !!.

Preguntó con enojo a Kessho, el cual solo maldijo al ver cómo las sombras del demonio se expandan por toda el área.

– De qué mierda hablas?.