Always with you (Jumin x V)

Mar de estrellas

Jaehee acaba de ajustar mi corbata y me doy un último vistazo al espejo. Hoy por fin era la fiesta en el resort, hemos aprovechado los días anteriores a que llegasen los asistentes pero ese tiempo de calma se terminó y ahora nos disponemos a hostear otra fiesta de la RFA. Jaehee lleva un vestido sencillo de corte recto, elegante pero simple. En las invitaciones se especificó que no había que venir de etiqueta, se quería crear un ambiente más cercano. Si hacíamos estas fiestas para la caridad no tenia sentido tampoco que todas fueran absurdamente ostentosas aunque me negaba a que fuesen mal elaboradas y como dirían algunos, cutres. Todo esta preparando sobretodo en la parte exterior, cerca de la piscina, incluso si alguien deseaba darse un chapuzón nocturno era bienvenido a hacerlo, yo por supuesto no iba a hacerlo. Al llegar esta decorado exquisitamente, algo que no me sorprendía viniendo de mi mejor amigo y mi asistente. Los invitados ya ocupan sus puestos, algunos dentro para guardarse del fresco de la noche pero la gran mayoría deambulan por el jardín y la piscina charlando los unos con los otros. Varios fotos de Jihyun están expuestas en caballetes junto con algunas pinturas. Un pequeño escenario cerca de la piscina coronado con flores y luces tenues se encuentra ocupado por una joven tocando la guitarra acústica. En cuanto veo el cabello color menta de mi amigo me dispongo a ir hacia él, lleva simplemente una camisa arremangada hasta los codos y unos vaqueros los cuales parecen indecentes de lo bien que le quedan, aunque sinceramente y siendo objetivo, dudo que algo le pueda quedar mal. Se le ve cómodo e incluso risueño y se perfectamente que este ambiente va más con él que las anteriores fiestas las cuales son algo a lo que yo estoy muy acostumbrado. La gente parece incluso hacer cola para hablar con él, se le ve feliz, así que decido alejarme y dejarlo disfrutar de la fiesta. Sabrán se encuentra en un rincón apartado pero no solo, Luciel constantemente se encuentra cerca de él asegurándose de que este bien, de que no le ocurre nada, me da la impresión de que Saeran se agobia y más dada su personalidad irascible pero aunque se le ve visiblemente incómodo por alguna razón no monta un espectáculo ni le grita a su hermano. Zen está rodeado de mujeres de varias edades y se le ve disfrutando de la atención femenina, algo que yo nunca he necesitado pero para él si, su confianza depende de que le hagan caso al parecer.

El frío de la noche despeina ligeramente mi cabello mientras miro el mar tranquilo y oscuro iluminado apenas por la luna y las estrellas, apenas se vislumbra el horizonte, como si en realidad fuese todo uno, como si el mar se extendiese hasta el infinito, hasta el cielo salpicado de estrellas. Me hallo sentado en una tumbona con el sonido de la fiesta de fondo, ningún ruido a parte de la lejana celebración y el sonido del mar. No he podido hablar con Jihyun en toda la noche y eso ha acabado frustrándome hasta el punto de querer alejarme de todo. Y pensar que no hace tanto no me importaba, podíamos pasar horas o días sin vernos pero ahora que le solté lo que siento por él me es casi insoportable él no tenerlo cerca y hablar cara a cara con él. La verdad es que no me reconozco y casi me parezco a esos personajes de dramas que tanto le gustan a Jaehee, algo patético pero las emociones humanas a veces son... apabullantes. El sonido de arena crujir me pone alerta y veo como Jihyun se acerca a mi con una leve sonrisa en sus labios, se ve hermoso, increíble, tengo que hacer un esfuerzo por apartar la vista de esa magnífica vista.

-ya me preguntaba donde te habías metido, no te encontramos en tu habitación así que he pensado que podrías estar aquí.

-me he agobiado un poco simplemente.

-eres capaz de soportar fiestas de etiquetas, reuniones de equipo y mucho más pero esto te supera.

Jihyun ríe levemente y sin importarle nada se sienta a mi lado en la arena, dándole igual que se le meta en los vaqueros, se le ve despreocupado, tranquilo y libre, nunca lo había visto de ese modo y hace que me sienta aún más atraído hacia el, tiene un magnetismo difícil de resistir y no es siquiera consciente de ello, nunca lo fue, a pesar de que la gente siempre se ha visto atraída hacia su aura, su encanto natural y su sonrisa encantadora.

-No es algo a lo que este acostumbrado.

-cierto, se te echaba de menos aún así, si te marchas avisa, me he preocupado.

Suelto un suspiro y lo miro allí sentado, tan desgarbado y poco elegante pero a la vez tan atractivo y hermoso... No, me era imposible apartar la mirada de él, mucho menos cuando me la devolvía con esos ojos inescrutables, a veces era imposible saber lo que pensaba, aunque otras fuese más claro que el agua.

-estabas ocupado y no quería interrumpir, ademas, sabes que soy un adulto ¿verdad?

Jihyun sonríe y me echa a un lado de la tumbona dejando medio cuerpo mío fuera de esta, le miro horriblemente mal cuando lo hace dado que es de mala educación pero solo recibo una risa juguetona como respuesta, me fijo en que sus mejillas están levemente coloradas y suelto un suspiro exasperado.

-¿cuanto has bebido?

-No estoy borracho.

-lo parece.

Chasqueó la lengua molesto y me giro para mirarlo de frente, sus ojos me atraviesan, me observan y por un momento los veo clavados mirando mis labios, y aunque se que no es posible una chispa se enciende en mi, consciente de que seguramente eso se lo hace hacer el alcohol, y yo, a diferencia de él, estoy sobrio, pero mi cuerpo es incapaz de reaccionar a su mirada, al deseo que comienza a formarse en él y antes de que me dé cuenta he alargado el brazo rodeando su cintura pegándolo a mí y nuestros labios se encuentran bruscamente mientras él suelta un gemido de sorpresa. Me levanto casi de inmediato porque acabo de besarlo, y encima estando el borracho, no tengo excusa, niego con la cabeza y me alejo a grandes zancadas porque soy capaz de volver a hacer lo mismo si me quedo allí pero no llego muy lejos cuando una mano tira de mi y me gira encontrándome con el rostro enfadado de Jihyun.